Mario Balotelli, nacido en Palermo y de origen ghanés, vuelve a escuchar gritos de índole racista durante su segundo encuentro como internacional ante Rumanía
Mario Balotelli ha vuelto a vivir otro turbio episodio en Italia. El ariete lucía el dorsal '10' en su segundo partido como internacional y no pudo vivir la noche soñada, en la que llevaría el mando de la «nazionale», durante el encuentro que jugaron este miércoles Italia y Rumanía (1-1).
Fue un amistoso movido, donde la selección 'azzurra' tuvo que recurrir a la vieja guardia para salvar los muebles ante un conjunto que mostró su mejor versión. No obstante la nota negativa estuvo en la grada del Hypo Arena de Klagenfurt de Austria donde el delantero de origen ghanés, nacido en Palermo y que juega en el Manchester City inglés fue abucheado por un centenar de aficionados cada vez que tocaba el balón. 'Supermario' es admirado por su juego pero provoca grandes conflictos en su condición extradeportiva. El hecho de ser negro e italiano genera irritación entre los sectores más radicales.
Los ultras desplegaron una gran pancarta con el mensaje: «No a la Italia multicultural». Además atacaron al jugador con gritos de índole racista. Cabe recordar que los acontecimientos llegan en el primer encuentro de Italia desde que se tuvo que suspender el último partido de clasificación para la Eurocopa 2012 ante Serbia. Esa vez fueron ultras de extrema derecha de la selección balcánica los que la liaron, en un espectáculo dantesco que dio la vuelta al mundo. Los transalpinos comprueban por desgracia que cuentan también con algunos aficionados de pensamieto radical. De hecho los problemas de racismo en el 'Calcio' no son nuevos pero sí que es una novedad que los hinchas la tomen contra un futbolista de su propia selección.
"No hay negros italianos"
Cesare Prandelli, técnico de la selección 'azzurra' condenó el comportamiento y dijo que el equipo estaba abierto a cualquier persona que tenga la nacionalidad italiana. "Estoy enfadado, muy disgustado. Damos muchos discursos sólo para que ocurran cosas como esta. El chico debe saber que cuenta con el aprecio de todos nosotros", manifestó. Al término del encuentro, el propio delantero comentaba que se encontraba "feliz" en la selección y que "los aficionados deben resignarse porque la Italia multiétnica ya existe". "Necesitamos cambiar la mentalidad de esa gente, pero no es algo que pueda hacer yo", sentenciaba el jugador.
El delantero del City ya sufrió varios gritos racistas cuando jugaba en el Inter de Milán y se enfrentaba a la Juventus de Turín. Un juez llegó a cerrar el fondo de los ultras juventinos por cánticos como "no hay negros italianos". Además en el estadio del Chievo Verona, el ariete fue multado con siete mil euros tras aplaudir irónicamente a los fanáticos que le insultaban desde la grada.
Balotelli se lamenta durante el encuentro Italia - Rumanía.
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