Han dormido a las puertas de la delegación de Educación como si se tratara de la cola para comprar las entradas de un concierto. Pero los cientos de jóvenes que esperaban turno desde el mediodía del martes buscaban solo una cosa: conseguir una de las plazas vacantes para estudiar algún módulo de Formación Profesional en Málaga.
Los números empezaban a darse a las 09.00 horas de ayer. Pero los jóvenes sabían que poder estudiar el ciclo elegido dependía del orden de llegada. Por eso, medio centenar de estudiantes -y algunas madres- pasaron la noche a la intemperie, arropados con mantas y acomodados en sillas de la playa y cartones en el suelo. Cartas y charla fueron los mejores pasatiempos para que las horas pasasen más rápido.
Según la delegación de Educación, la oferta la formaban más de 432 plazas -184 de grado Superior y 248 de grado Medio- sobrantes en el proceso de adjudicación establecido en el Distrito Único Andaluz. Este procedimiento, similar al de los grados universitarios, supone que los alumnos puedan elegir las titulaciones en función de su nota en cualquier provincia andaluza. Pero, una vez pasadas las cuatro adjudicaciones -dos en junio y otras dos en septiembre-, las plazas excedentes salen en oferta libre. Por eso, muchos alumnos que aprobaron la ESO o el Bachillerato en septiembre y otros que solicitaron una plaza en la universidad pero no han obtenido la deseada, tienen una nueva oportunidad para formarse en un ciclo de grado Medio o Superior. En total se repartieron unos 260 números.
Faltó la rama sanitaria
Aunque la oferta era mayor que la demanda, no siempre llueve a gusto de todos y los jóvenes se lamentaron por la falta de puestos en la rama sanitaria, una de las más solicitadas. «Es el segundo año que vengo para ver si sobran plazas de Enfermería, pero me voy con las manos vacías», dice Assiar Tazarine, de 18 años. «Yo he venido desde Ceuta para entrar en el grado Superior de Electricidad y no quedan plazas», indica Taufik el Mrabet. «Buscaré alguno que tenga salidas laborales», dice Abel Casado, de 22 años. Desde la delegación, indican que la oferta se corresponde a la demanda en el mercado laboral. «No podemos crear más plazas en los módulos más solicitados si no existe una demanda en el mercado laboral», aseguran.
Los números empezaban a darse a las 09.00 horas de ayer. Pero los jóvenes sabían que poder estudiar el ciclo elegido dependía del orden de llegada. Por eso, medio centenar de estudiantes -y algunas madres- pasaron la noche a la intemperie, arropados con mantas y acomodados en sillas de la playa y cartones en el suelo. Cartas y charla fueron los mejores pasatiempos para que las horas pasasen más rápido.
Según la delegación de Educación, la oferta la formaban más de 432 plazas -184 de grado Superior y 248 de grado Medio- sobrantes en el proceso de adjudicación establecido en el Distrito Único Andaluz. Este procedimiento, similar al de los grados universitarios, supone que los alumnos puedan elegir las titulaciones en función de su nota en cualquier provincia andaluza. Pero, una vez pasadas las cuatro adjudicaciones -dos en junio y otras dos en septiembre-, las plazas excedentes salen en oferta libre. Por eso, muchos alumnos que aprobaron la ESO o el Bachillerato en septiembre y otros que solicitaron una plaza en la universidad pero no han obtenido la deseada, tienen una nueva oportunidad para formarse en un ciclo de grado Medio o Superior. En total se repartieron unos 260 números.
Faltó la rama sanitaria
Aunque la oferta era mayor que la demanda, no siempre llueve a gusto de todos y los jóvenes se lamentaron por la falta de puestos en la rama sanitaria, una de las más solicitadas. «Es el segundo año que vengo para ver si sobran plazas de Enfermería, pero me voy con las manos vacías», dice Assiar Tazarine, de 18 años. «Yo he venido desde Ceuta para entrar en el grado Superior de Electricidad y no quedan plazas», indica Taufik el Mrabet. «Buscaré alguno que tenga salidas laborales», dice Abel Casado, de 22 años. Desde la delegación, indican que la oferta se corresponde a la demanda en el mercado laboral. «No podemos crear más plazas en los módulos más solicitados si no existe una demanda en el mercado laboral», aseguran.