El Málaga gana músculo defensivoEl medio centro y el defensa viajaron ayer por la tarde a la concentración de Benahavís para comenzar el trabajo El club presenta conjuntamente a sus nuevas incorporaciones: Sandro Silva y Malagueño
23 de julio de 2010
LEANDRO PAVÓN.-
Malagueño y Sandro Silva ya son jugadores malaguistas. Los dos fueron presentados en la mañana de ayer en La Rosaleda por Abdullah Ghubn, el hombre de confianza del jeque Abdullah Al-Thani, dueño del club. Antes, el jugador brasileño pasó el reconocimiento médico que Malagueño hizo hace días. Estas adquisiciones son de corte defensivo, uno central y otro centrocampista, con lo que el equipo tiene más que reforzada la parte de atrás de la plantilla Gana mucho músculo. Así, compensa la llegada de dos futbolistas ofensivos como son Eliseu y Rondón.
Malagueño es un defensa argentino que proviene de la liga mexicana. El central ocupará plaza de comunitario por su pasaporte italiano y ha firmado por las próximas tres temporadas. Su cláusula de rescisión será de 18 millones de euros, dos menos que los otros tres fichajes realizados hasta el momento.
En cuanto a su estilo, el futbolista declaró: «Juego muy concentrado, muy agresivo en la marca, salgo con el balón y voy bien por arriba». No es un central excesivamente alto, pese a sus 1,84 metros, pero demuestra confianza en su juego aéreo. Esta no es su primera experiencia en Europa. En la temporada 2007-2008 militó en las filas del Iraklis griego, donde jugó 28 partidos y demostró su acierto cara al gol con cuatro dianas esa campaña.
Adaptación Este paso por el fútbol mediterráneo puede hacer que su adaptación a la Liga española, que el argentino calificó como la mejor del mundo, sea más rápida. Malagueño aseguró: «Con las ganas de trabajar que vengo, el desfase de la adaptación no será ninguna dificultad». En el fútbol mexicano es un jugador reconocido. Allí disputó una semifinal de Copa con los Indios de Ciudad de Juárez y llegó a figurar en el once ideal del campeonato en la temporada 2008-2009.
Más parco en palabras, quizás por la dificultad con el idioma, fue Sandro Silva. El brasileño se mostró más cauto con el tema de la adaptación. Aseguró que le será complicada, pero espera que sea rápida y pueda estar a la altura de situación.
«Lo que me atrajo del club fueron los nuevos directores que traen un nuevo e interesante proyecto. Quiero hacer una buena temporada y entrar en la historia del club», afirmó Silva. El brasileño, de 26 años, procede del Botafogo por el que fichó a principios de año y tan sólo ha jugado cinco partidos. Pero en su trayectoria en el Palmeiras, donde tiene experiencia en partidos de la Libertadores, ha sido siempre titular. Su cláusula es de 20 millones de euros y viene para jugar las próximas cuatro temporadas.
Después de la rueda de prensa de los dos jugadores, Abdullah Ghubn tomó la palabra y desveló los precios de los fichajes. Malagueño ha costado 945.000 euros, mientras que el traspaso de Silva se ha elevado a 2,2 millones. Sobre las posibles incorporaciones, Ghubn declaró: «Todavía faltan por venir, al menos, un portero y un delantero». La posición de guardameta es la que más urge, ya que sólo cuenta con Arnau.
Los jugadores se enfundaron la camiseta del club y dieron sus primeras patadas al balón como malaguistas. Intentaron demostrar sus cualidades y Silva, pese a ser un centrocampista defensivo, sacó su sangre brasileña para hacer unos cuantos malabares de cara a las cámaras. Tras esta presentación, los futbolistas partieron hacia la concentración del equipo en Benahavís.