Tapia, convencido de que los menos habituales ofrecerán un nivel alto esta noche en la Copa ante el Mallorca
El técnico aguardará al final del entrenamiento matinal de hoy para decidir la convocatoria y el once. Fernando y Alberto Luque se perfilan como los delanteros y Goitia ocupará la plaza de Arnau
INSTRUCCIONES. Antonio Tapia imparte consignas en presencia del medio centro Lolo. / SALVADOR SALAS
SERGIO CORTÉS.-
Antonio Tapia está convencido de que el Málaga no jugará hoy con los suplentes. Efectivamente recurrirá en el estreno de la Copa con el Mallorca (ida de los dieciseisavos de final) a los futbolistas menos habituales, a los que necesitan minutos, pero el alto nivel a diario en las sesiones de entrenamiento le hace sentirse seguro de que el rendimiento del equipo apenas bajará.
La Copa del Rey siempre alimenta el debate: ¿Es mejor afrontarla con la intención de llegar lejos e incluso soñar con el éxito o es más conveniente arriesgar lo mínimo y superar el trámite sin lesiones ni contratiempos? Cada tesis tiene sus partidarios y detractores. Un éxito en este torneo en su primera etapa en el Mallorca catapultó a Gregorio Manzano y confirmó al Getafe como un equipo de postín. Pero en el fondo casi todos los profesionales del fútbol -desde los presidentes a los utileros- son conscientes de que la flauta suena sólo una vez y que el sueño de enfrentarse a un equipo 'grande' -con la consiguiente repercusión mediática y el beneficio económico- rara vez se produce.
La Liga, prioritaria
No es cuestión de despreciar la Copa del Rey. Es simplemente que en la Liga todos se juegan mucho. Llegar hasta el final del torneo del k.o. puede abrir la puerta a una competición continental (la UEFA, a partir de la próxima temporada con otra denominación) que encima suele ser deficitaria mientras que un despiste en el campeonato puede pagarse con un descenso. Y eso conlleva, como primera consecuencia, pasar de cobrar 10, 12 o 15 millones por la venta de los derechos televisivos a sólo uno. Esa es la realidad. Y para un equipo como el Málaga, condicionado durante un lustro por los efectos del proceso concursal, es más evidente.
Antonio Tapia, como la gran mayoría de los entrenadores de Primera, antepone la Liga. Igual ocurre, sin ir más lejos, en otros equipos inmersos en la UEFA. Lo que manda es el torneo de la regularidad. Ahí los puntos sí cotizan. La prioridad del Málaga es la permanencia, no perpetuarse en la Copa un par de rondas con las correspondientes apreturas en el calendario. Otra cuestión es que a nadie le desagrade dar un paso más y tener la opción de soñar. Pero además el fuengiroleño sabe, como todos sus colegas, que mantener el ritmo de dos partidos por semana es insufrible. A medio plazo la fatiga pasa factura. De ahí que las rotaciones sean moneda común para todos, desde los dos 'grandes' a los más modestos de Primera.
El técnico malaguista tiene previsto recurrir esta noche a un conjunto plagado de no habituales. Conviene dejarlo todo en cuarentena, con una interrogante, porque el equipo se ejercita esta misma mañana en La Rosaleda para ultimar la preparación de este encuentro. Hablar de convocatoria, y no ya de alineación, es una mera elucubración, un gran riesgo. Tapia esperará para ver la evolución de algunos futbolistas con problemas físicos y hasta conversará con otros para comprobar si tienen buenas sensaciones. El caso más llamativo tiene como protagonista al centrocampista Pere Martí, con el que se pretende arriesgar lo mínimo. Probablemente sea el propio futbolista el que tenga este mediodía la última palabra.
Decisiones cantadas
Hablar de menos habituales implica por ejemplo hablar de una pareja en ataque formada por Fernando y Alberto Luque que para sí quisieran algunos equipos de la máxima categoría. La presencia de ambos y la inclusión de Goitia como guardamenta en el lugar de Arnau (titular en la Liga) se antojan las decisiones más cantadas.
Por lo demás, no es un secreto que futbolistas como Manolo, Cuadrado, Lolo, De Barros, Cheli -que se encuentra en una situación parecida a Pere Martí, recién recuperado de sus problemas físicos- o José Juan Luque también pueden tener su oportunidad. Con esta media docena de nombres y los tres referidos anteriormente casi se completaría la alineación. Tal vez la décima plaza sea para el polivalente Nacho. Más complicado parece adivinir dónde jugará el malagueño. Puede hacerlo como lateral izquierdo o como medio centro, opción esta última que permitiría apostar en el centro de la defensa por Lolo y Cuadrado, con lo que Hélder Rosário y Weligton no se verían obligados a participar.
Tapia también medita incluir a algún jugador del filial en la convocatoria. La brillante temporada del Málaga B abre la puerta del primer equipo a varios futbolistas, pero no es un secreto que el lateral izquierdo Manu se ha ganado en los entrenamientos una muestra de confianza. No puede descartarse que otro malagueño ocupe plaza en el equipo titular.