El máximo dirigente del club se muestra optimista, pero pide más tranquilidad: «La afición irradia alegría, pero hay que ser prudentes»

Fernando Sanz ya no es el presidente novato que acaba de colgar las botas. Sus tres años en el cargo le han enseñado mucho, sobre todo por las dificultades que ha tenido que superar el club. Su mayor apuesta de esta temporada quizás se centró en mantener la paciencia y darle continuidad al entrenador cuando las circunstancias eran más adversas. Ahora, con la ventaja de conocer cómo se han desarrollado los acontecimientos, la perspectiva es distinta y esa tranquilidad se observa desde la afición como un gran logro del presidente. Admite las dificultades sufridas en su momento, pero insiste en que el trabajo se estaba haciendo bien y existía el compromiso, por lo que no había razones para hacer cambios. Este asunto le ha curtido aún más tras los dos años en Segunda División, en los que aprendió a marchas forzadas por la acumulación de problemas.

Sanz no quiere hacer ruido. Cree que el Málaga es un club humilde y que nunca puede lanzar las campañas al vuelo. La recuperación advertida en las últimas jornadas coloca al equipo algo más lejos del descenso, pero el presidente entiende que es imprescindible mantener la tranquilidad algún tiempo más. Intenta evitar que la euforia traspase los muros del vestuario y distraiga al equipo. Igual que ocurre con el director deportivo, Ricardo Rodríguez, que puede abandonar el club de inmediato.

-Cerca de seis meses después del arranque del campeonato, ahora comienza a llegar la tranquilidad en la clasificación.

-A nivel de la tabla clasificatoria es cierto, porque es el momento en que estamos más lejos del descenso, pero aquí siempre ha habido tranquilidad. Los únicos problemas han estado relacionados con los resultados. Desde el club siempre se intentó transmitir calma, pese a que la situación fuese complicada. Queríamos que existiera confianza en el trabajo de los profesionales. Intento poner en marcha un lema que me gusta mucho y que funciona bien: 'Trabajo duro, éxito seguro'. De esta forma siempre hay un alto porcentaje de posibilidades de que las cosas mejoren.

-Al equipo, sin embargo, le ha costado mucho alcanzar el nivel actual. ¿Por qué ha ocurrido esto?

-Ahora hablo como ex futbolista. El equipo comenzó muy bien, con un triunfo vistoso ante el Atlético, pero luego llegaron reveses en algunos casos por la mala suerte, como fue ante el Deportivo en la primera vuelta. Tuvimos oportunidades y no las transformamos, mientras que ellos, en un disparo lejano, se llevaron el partido. En otros siete encuentros ocurrió algo parecido, pues todos se rompieron por mínimos detalles, y siempre en contra. Esto generó cierta ansiedad. Los jugadores necesitaban resultados positivos. No ha habido ningún equipo que nos haya hecho más de dos goles. Creo que el punto de inflexión se dio contra el Madrid, donde el equipo, pese a perder, funcionó bien. Ahora no sólo se mantiene el trabajo, sino que el juego vuelve a ser vistoso.

-Lo más complicado para usted quizás fue soportar la presión de los malos resultados y mantener en el puesto al entrenador. No fue fácil, pero posiblemente ahora se sienta contento y reconfortado.

-Me alegro por la situación que atraviesa ahora el equipo, pero es verdad que han existido momentos difíciles. Ver el estadio pidiendo la marcha del técnico no es del agrado de nadie, sobre todo porque ves cómo trabaja el equipo y lo involucrados que están todos entre sí y con el club. La llegada de la recuperación sólo era cuestión de tiempo. Es cierto que yo pensé que la adaptación de todo el mundo, en cuanto a los resultados, iba a ser mucho más rápida. Los buenos marcadores han llegado más tarde, pero hemos aguantado bien. Era necesario tener sentido común y paciencia para esperar los resultados del trabajo que se estaba haciendo. Ahora estoy contento por la situación del club, el entorno y la afición. Todo el mundo irradia alegría, pero hay que ser prudentes porque queda un mundo por recorrer.

-Pero la persistencia de los malos resultados le habría llevado a destituir al técnico, pese a que fuese contra su voluntad.

-Sí, pero de esta situación hablamos algunas veces el entrenador y yo en su momento. Él lo entendía, porque es una persona del mundo del fútbol y sabe cómo funciona esto. El entorno era muy complicado y esa dinámica podía llevarnos a que el equipo no pudiera remontar nunca. Pero Muñiz ha hecho un gran trabajo y también ha sabido apretar los dientes, igual que los demás, incluido yo. Está claro que el técnico y yo sabíamos que podía haber un punto de no retorno.

-Pero no hay mal que por bien no venga. La necesidad obligó al entrenador a aumentar la colaboración del filial, lo que ha derivado en el descubrimiento de varios jugadores con gran futuro.

-Yo creo que nunca ha habido un entrenador que haya sacado tantos jugadores de la cantera, tanto en esta etapa como en la anterior de Muñiz. Pocos habrá que miren tanto a los jóvenes. Y mando un aviso a los canteranos: tienen una oportunidad única porque el técnico mira mucho hacia abajo. Ahora el tren lo han cogido varios jugadores, hasta diez que han debutado.

-El éxito de los canteranos obligará ahora al club a replantearse el próximo proyecto, pues muchos de los jugadores con los que ha contado Muñiz seguirán en el primer equipo.

-Sin lugar a dudas. Somos conscientes de que algunos de ellos pasarán a formar parte del primer equipo y estarán entre los veinticinco de la plantilla profesional. Es un motivo de satisfacción.

-En el club sólo se quiere mirar hacia esta campaña para no distraer a la plantilla, pero el futuro del director deportivo es un asunto controvertido que quiere resolver de inmediato.

-Tuve una conversación privada con Ricardo Rodríguez, en la que me comunicó que quería entrenar la próxima temporada. Lo entiendo, él sabrá lo que quiere. Esto ha trascendido públicamente y, teniendo en cuenta cuál es su cargo, la relación de Ricardo con el Málaga ahora es una tontería. Porque deberá estar más pendiente de buscarse algún equipo que de encontrar jugadores para nuestro equipo. Lo mejor y más cómodo para todos es que rompa la relación con el club y que otra persona se encargue de este trabajo cara a la próxima temporada. Esta situación la ha propiciado él, y tenemos que resolverla.

-Muñiz, Sandro, otro componente del club. ¿Quién será el nuevo director deportivo?

-Esta decisión la tomaremos en la intimidad, porque es una función muy importante para el club. El trabajo del director deportivo afectará a mucha gente, por lo que hay que pensarlo bien para acertar. El club está inmerso en un presente complicado, porque todavía no tenemos hechos los deberes. Nos quedan todavía quince jornadas para conseguir el objetivo, con lo que hay que estar pendientes del presente y trabajar para el futuro, pero en la intimidad.

-Un amplio sector de la afición cree que la planificación no ha sido acertada. ¿Usted qué piensa?

-No estoy de acuerdo, pero por el concepto de planificación. Esto es una cosa y otra diferente el éxito que se pueda obtener con los fichajes. Creo que se hizo bien, porque los jugadores llegaron con tiempo suficiente para prepararse cara al campeonato. Es verdad que se retrasó la pretemporada porque el míster quería disponer de la mayor parte de los fichajes. Tuvimos muchas incorporaciones, casi todas en la concentración. Esto era casi un mes antes del campeonato. Se hizo bien y a tiempo. En cuanto al acierto, pues con unos sí lo hubo y con otro, no, como ocurre siempre. En algunos casos estamos viendo ahora, como Mtiliga o Stepanov, que sí pueden funcionar. En el otro extremo quizás estuviera Edinho, que apostamos por él y al final se ha tenido que marchar. Ha funcionado en cuanto a goles conseguidos, pero no en lo relativo a la participación en el equipo. En este caso intentamos revertir la situación, pues si el PAOK se lo quedara ganaríamos dinero. Creo que se ha trabajado bien, aunque siempre se puede mejorar.

-¿El triunfo ante el Espanyol supone media permanencia?

-Creo que todavía no. Quedan quince partidos. Son muchos y puede ocurrir de todo. Hay que sufrir bastante y espero que también disfrutemos. Si ganamos al Xerez daremos otro gran paso adelante, pero todavía es pronto para pensar en soluciones definitivas.

-Del club y de la economía hay poco de qué hablar. Todo continúa sobre ruedas, sin sobresaltos.

-Es una maravilla. Que la primera pregunta de la entrevista no sea sobre los problemas económicos, la verdad es que resulta reconfortante. Después de lo que hemos vivido en temporadas atrás, creo que es lo más importante y satisfactorio para todo el mundo. Cumplimos con nuestros acreedores, pero sobre todo con los empleados y la plantilla. Siempre estamos al día. En realidad sólo hacemos una cosa sencilla y elemental: gastamos lo que tenemos, nada más. Trabajamos como las hormiguitas, con montones para ir pagando la deuda y otros asuntos. El objetivo es el saneamiento total, y trabajamos para ello. El Málaga se autofinancia, paga y guarda para la deuda. Es la primera vez que ocurre. Por encima de todo siempre ponemos el club. No es tan difícil, sólo hay que tenerle cariño a la entidad, pero hay que prescindir de algunas cosas.

-Hay una ampliación de capital en marcha, la Fundación sigue tomando cuerpo, se ha inaugurado el museo. La entidad está inmersa en un proceso de transformación de gran calado.

-Desde que entramos nosotros está en marcha este gran proyecto. Todas las promesas que hicimos se están cumpliendo. Daremos a los malagueños la oportunidad de que se integren en el club con las nuevas acciones y, a través de la Fundación, gestionaremos la nueva Ciudad Deportiva del club.

-Siguen los retrasos para disponer de los terrenos para las nuevas instalaciones. ¿Solicitará una demora en la entrega de El Viso, prevista para el mes de junio?

-No, porque nos hemos encontrado con la Federación Malagueña, que nos está ayudando mucho, con su presidente al frente, Miguel Sánchez. Nos ceden sus campos para la cantera. Igual que otros clubes de la ciudad, donde se entrenan y juegan sus partidos muchos equipos. No es plato de buen gusto estar en esa situación, con un grupo en cada campo. Con todo y con eso tenemos unas categorías inferiores muy fuertes. Creo que disponemos de una de las mejores canteras de España. Este año ha sido la mejor, sin duda, porque han debutado en el primer equipo nada menos que diez jóvenes. Cuando tengamos una Ciudad Deportiva espero y deseo que seamos la mejor cantera del mundo.


http://malagacf.sur.es/noticias/2010-02-24/fernando-sanz-presidente-malaga-20100224.html

Ojala logremos estar al cien por cien saneado que salga bien la ampliacion de capital y a ver si de una jodida vez tenemos la ciudad deportiva k merece malaga. Se que se va a conseguir todo, poco a poco.

Espero certificar pronto la permanencia en 1ª.

grande presi

paso a paso solo ahi que mirar como estaba el club cuando lo cogio el y como esta ahora se ha avanzado muchisimo y se ha creado una estructura en todos los ambitos muy solida