· Su costosa indemnización frena por ahora el despido del técnico madrileño

Pepu Hernández es el principal candidato a ocupar el banquillo del Unicaja si los malagueños no detienen de forma inminente una hemorragia —acumulan el peor arranque liguero de su historia (0-5)—, que puede dejarles fuera de la fase final de la Copa del Rey y amenaza con llevarse por delante a Aíto García Reneses. El madrileño tiene contrato hasta junio de 2011 y cobra en torno a 1,2 millones brutos por temporada. Su costosa indemnización —unos 2,4 millones— ha hecho que los rectores del club malagueño se lo piensen dos veces antes de acometer un posible despido de su actual técnico.

Carlos Jiménez
"No es cuestión de dudar de unos u otros"
Sin embargo, tienen presente que en el deporte profesional los resultados mandan y han proyectado un hipotético plan ‘B’ que ejecutarían sólo si su equipo sigue en caída libre en Liga. Éste pasaría por cesar a Aíto y fichar a Pepu Hernández, un técnico que gusta mucho al club malagueño, que ya estuvo a punto de cerrar su contratación en 2007, tras la salida de Scariolo.

El ex seleccionador español, solución de emergencia en caso de que el Unicaja quedase fuera de la Copa y entrase en coma liguero, está en paro desde mayo de 2008, pero ya ha reiterado su deseo de volver a los banquillos. Le gustaría hacerlo en algún club desde principios de temporada, pero una buena oferta de los malagueños podría hacerle cambiar de opinión.

Berni Rodríguez
"Ni es cosa nuestra ni tenemos que estar pensando en eso"
Pepu Hernández podría reencontrarse en Málaga con Carlos Jiménez, su hijo pródigo y su prolongación en la cancha tanto en el Estudiantes como en la selección española. El alero tiene una química indiscutible con su ex técnico, pero prefiere no contemplar por ahora un hipotético relevo en el banquillo cajista: “No es cuestión de dudar de unos u otros. En el entorno se pueden generar comentarios, pero nosotros tenemos que mantener la confianza intacta porque es la forma de salir de este tipo de situaciones”.

Tampoco Berni Rodríguez quiere elucubrar sobre un posible cambio de técnico: “Ni es cosa nuestra ni tenemos que estar pensando en eso. Sólo debemos centrarnos en el próximo partido. Bastante tenemos con lo nuestro como para estar pensando en temas que no nos conciernen”. El capitán del Unicaja apela a la unidad: “No hay dos formas de salir de esto, sólo hay una, que es ir todos juntos en la misma dirección. Esta situación no es culpa de un solo jugador ni de un solo factor. Hay que ser más regulares. Tenemos que ser positivos”.

http://www.marca.com/2009/11/03/baloncesto/acb/1257256782.html

Echar a Aito sería ya la puntilla al Unicaja, entonces sí que seriamos el nuevo Cajasol de la ACB.

Desde luego. Aíto es el tío más válido que tiene el Unicaja y el baloncesto no es como el fútbol. Trayendo un base cambiaría mucho el equipo y en mitad de temporada se pueden fichar jugadores.