El Málaga ha tocado fondo. Es último de la clasificación en la octava jornada, con sólo cuatro puntos y la visita del Valencia a la vista
Juan Antonio Morgado, SÍ
AUNQUE la grave situación por la que atraviesa el Málaga, último de la clasificación, lleve a pensar lo contrario, el equipo está capacitado para revertirla. Funcionemos con lógica: peor no puede ir. A partir de ahora, con Apoño recuperado, el conjunto blanquiazul tiene que ir para arriba por fuerza. Además, también ha vuelto Stepanov, con lo que la defensa ganará enteros casi con toda seguridad, porque otra cosa a esperar es la mejoría de Weligton, que esta temporada no es el que era. A propósito, tampoco Luque ni Duda ni Baha están ni mucho menos en la misma línea de la campaña pasada. Todos deben mejorar, porque de un día para otro no se les puede olvidar el fútbol que llevan en sus botas. A otro que se le espera es a Valdo, que no es el que fue en el Osasuna, donde rindió a buen nivel, sobre todo el último año. Por eso, no resulta aventurado pensar que todos estos futbolistas se superarán de ahora en adelante, sobre todo porque al técnico no le queda más remedio que obligarlos a ponerse las pilas. El Málaga, que dada su trayectoria de este año echa en falta a Eliseu, Goitia, Lolo y Salva, está llamado a sumar puntos a marchas forzadas; sin más demora, en el próximo partido, por mucho que el rival sea el poderoso Valencia. El equipo blanquiazul sólo tiene en contra ahora el puesto que ocupa. Si la plantilla supera el pernicioso efecto psicológico que supone verse último, el Málaga remontará escalones en la tabla.
Sergio Cortés, NO
OJALÁ me equivoque, pero mi duda es la que ya tenía en pretemporada: ¿cuál es la capacidad ofensiva del Málaga? No es nuevo que le falta velocidad. Se habla mucho de Eliseu, pero nadie cae en la cuenta de que la movilidad de Adrián arriba mantuvo al equipo con todas las aspiraciones hasta que él se lesionó. En el último tercio ya fue todo mucho más previsible. En la planificación se echa en falta un delantero centro (ojo, Edinho no jugaba en ese puesto en su anterior equipo en una Liga menor) y desborde por las bandas. Valdo (suplente en el casi desahuciado Espanyol que luego se salvó), Luque, Duda, la opción de Fernando... Tienen otras virtudes... pero con más ritmo. La única esperanza es que con Apoño el equipo mejore, pero la planificación fue tardía (muy tardía) y basada en extranjeros. Un riesgo. Obinna venìa de no jugar, Forestieri está muy verde, Edinho no ofrece desmarques y es un rematador sólo en determinados movimientos, y Benachour llega con el ritmo de Qatar. Al final, el Málaga no parece tener (en fútbol nunca conviene ser concluyente) ni un &lsquonueve&rsquo al estilo de Salva ni otro al estilo de Adrián. Fichajes como los de Juanma Ortiz, Miguel de las Cuevas o Diego Costa tenían que haberse cerrado. Sin velocidad ni gol, sólo queda tener el balón. Si Apoño esquiva una recaída, tal vez sea un punto de partida, pero en todos los equipos hay o velocidad (el Xerez, con Momo y Carlos Calvo) o gol (el Tenerife, con Nino).
http://malagacf.sur.es/noticias/2009-10-27/mimbres-para-salir-atolladero-20091027.html