El técnico asturiano confía en que con el trabajo y el esfuerzo de todos se pueda cumplir el objetivo de la permanencia
Juan Ramón López Muñiz encara su segunda etapa en Málaga, tras un año de ´exilio´ en Santander. El técnico asturiano enfila la última etapa de las vacaciones pegado al móvil. Pendiente de salidas, de llegadas y de trasladar su casa otra vez a la Costa del Sol.
–¿Es usted de los que piensa que segundas partes sí son buenas?
–Yo no lo tomo ni como una primera ni como una segunda. Es un año nuevo en el que vamos con la misma ilusión que siempre y en el que intentaremos que todo vaya bien. Tenemos que trabajar duro.
–Son apenas horas lo que lleva en el club, pero ¿ha encontrado cambios un año después de su salida?
–Encontré muchos cambios positivos. El club está sufriendo una transformación importante. Sufrimos unos momentos muy difíciles y ahora ya se respira tranquilidad.
–¿Es una ventaja no tener que conocer de primeras a la gente con la que va a trabajar?
–Es una ventaja porque cuando llegas ya estás integrado. Conoces a todo el mundo y todos te conocen a ti. Y eso es bueno.
–¿Cuándo surgió la posibilidad de regresar al Málaga?
– Hace poco. Cuando Antonio Tapia comunicó que no seguía, pues diez días después. Tampoco hablamos mucho más porque yo aún tenía contrato en vigor.
–¿Quién ha llegado a Málaga esta vez el Muñiz entrenador-director deportivo o sólo el técnico?
–No, la dirección deportiva está ocupada por Sandro y Ricardo y lo que haremos será compartir opiniones y consensuar. Además, ellos lo están haciendo bien. Por lo tanto, mi misión será únicamente entrenar.
–Pero la opinión del entrenador siempre tiene peso en las decisiones del equipo...
–Somos tres personas que nos conocemos desde hace mucho tiempo y se consensúa todo. Todo se habla entre nosotros y más gente. Sabemos que tenemos que trabajar para el club y que todo lo que hagamos tiene que ser muy meditado.
–En su presentación dijo que tenía intención de contar con la cantera. ¿Le ha supuesto muchos problemas que el filial no haya subido de categoría?
–No. Lo que tenemos que ir viendo es si la gente está preparada para subir a jugar a Primera. Si están preparados, pues les iremos dando minutos. Pero sobre todo para que la gente vaya entrenando con nosotros y que se vaya viendo que entrenan con el primer equipo. Lo que tienen es que hacerlo bien en su equipo para pedir paso en la primera plantilla.
–¿Sintió que dejaba un proyecto a medias cuando salió del Málaga tras el ascenso?
–No. Ahora empieza otro con nuevas incorporaciones y con gente diferente, porque como ya sabe la afición hubo muchos que se fueron. Y hay que empezar otra vez. Los jugadores y los entrenadores se marchan, pero el club se mantiene.
–¿Sufrió mucho al final de aquella temporada en Segunda pese al ascenso?
–Se sufre siempre, en todas las categorías y en todos los equipos. El fútbol al final son resultados. Hasta que no consigues los puntos necesarios para conseguir el objetivo establecido, se sufre. Siempre habrá sufrimiento porque el Barça sólo hay uno y todos los demás a sufrir.
–No hay duda de que el objetivo esta temporada es la permanencia, ¿no?
–Sí, además el presidente ha sido el primero también en comentarlo. Pero lo importante es que todos vayamos juntos al objetivo, que sea claro y común. Y que intentemos conseguirlo entre todos, como el ascenso. Sabemos que una parte muy importante de los logros llega gracias a la afición y sabemos que es muy importante sentir el calor. Cuando tú vienes a estadios como La Rosaleda, El Calderón o El Molinón, sales del campo pensando que ese equipo no baja porque tiene algo muy importante que es el ambiente que hay en su grada. Por suerte eso lo tenemos en Málaga y esperamos seguir contando con ello la próxima temporada.
– En Santander no cuajó su trabajo porque vivió a la sombra una gran temporada anterior. Ahora en Málaga ocurre en cierta medida lo mismo tras cosechar el año pasado uno de los mejores cursos de la historia en Primera. ¿Teme que la exigencia sea máxima?
–No. Allí conseguimos los objetivos que el club marcó antes de ir. Si el club nos hubiera marcado otros objetivos lo hubiera pensado mucho el ir porque sabía lo que tenían previsto con traspasos, bajas, salidas y presupuesto limitado. Entonces conseguimos lo que nos pidieron. Estoy muy satisfecho del resultado de Santander.
– Y la afición, que vive expectante estos días de pretemporada con los fichajes. ¿Qué se le puede decir de la planificación?
–Decirles que hay personas trabajando en ese aspecto y que intentarán hacerlo lo mejor posible. Dentro de nuestras posibilidades, intentaremos que la afición quede satisfecha con el juego del equipo.
–¿Se espera algún fichaje de campanillas este verano?
–Lo que se espera es que con el presupuesto que nos marca el club, hacer el mejor equipo posible. Los fichajes poco a poco van saliendo. Cada uno tiene un presupuesto y sabe a lo que puede aspirar.
–Y los descartes, ¿habrá alguna salida antes de verlos en acción en la Copa de la Paz?
–No lo sé. Iremos viendo los entrenamientos y la dirección deportiva también nos dirá en ese aspecto.
–Pero le viene bien jugar partidos de nivel como los que se jugarán en la Copa de la Paz para probar a algunos jugadores...
–Nos viene bien como cualquier partido de pretemporada. Pero sí es cierto que jugaremos partidos importantes, que la ciudad podrá disfrutar de un evento importante y que el club va a poder participar en él. Pero de cara al entrenador, serán tan importantes como otros partidos de pretemporada.
–¿Es tan buen la relación con Fernando Sanz como parece?
–Siempre fue muy buena, desde el primer día. Él me trajo del Marbella y luego tuvimos que vivir muchas horas juntos. Tuvo que tomar decisiones muy difíciles y siempre demostró plena confianza en mí. A partir de entonces hicimos una amistad muy grande. Pasamos muchas horas juntos y eran tiempos duros en los que el entrenador tenía que estar al lado del presidente y el presidente demostró también un gran apoyo al entrenador. La amistad es grande y la verdad es que en ningún momento tuvimos ningún tipo de problema.
–¿Tiene ya ganas de enfundarse el chándal o necesita un descanso después de tanto ajetreo?
–Siempre viene bien un poco de descanso para estar con la familia, pero ahora llega un periodo en el que el teléfono tiene que estar siempre conectado y funcionando.
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