Pese a que en la segunda vuelta ha bajado su nivel, el Málaga tiene a tiro acabar como el sexto mejor equipo en ataque de la Liga
El Málaga lleva siete goles menos que en la primera vuelta. Aun así, está a un paso de acabar la Liga como el sexto mejor equipo en ataque, algo impensable después del desastroso balance -ni un solo tanto- en las cuatro primeras jornadas. La conclusión es significativa: ha marcado más que el Sevilla.
No es cuestión de aludir a la rivalidad entre ambos clubes y aficiones. Simplemente es un dato que refleja el inesperado nivel ofensivo del Málaga esta temporada. El Sevilla cuenta en su plantel con un arsenal ofensivo de primer nivel, encabezado por su pareja de delanteros (Luis Fabiano y Kanouté), y con elementos desequilibrantes en la segunda línea (Jesús Navas, Capel, Renato, Perotti, Adriano...). Pero está por debajo, a tres goles.
Salvo sorpresa, el Málaga acabará la temporada en la sexta posición en el capítulo ofensivo, la prueba más palpable de la filosofía que quiso implantar desde el primer día Antonio Tapia con aquel mensaje de que su primer objetivo era «hacer que el público se divierta».
El bajón en la segunda vuelta va a impedir, a menos que se produzca una casi imposible goleada en Montjuic, batir el récord histórico de los 60 tantos de la temporada 2000-2001, entonces con Joaquín Peiró en el banquillo. Los treinta y uno de la primera parte del campeonato invitaban a pensar en un nuevo registro, más aún ante la perspectiva de que el mejor rematador del grupo (Salva) estuviera disponible en el último tercio del campeonato.
Papel anecdótico
Sin embargo, al Málaga le ha costado mucho más ver puerta una vez superado el ecuador de la Liga. La cifra se ha reducido 'sólo' a veinticuatro, con un papel casi anecdótico para la pareja de delanteros titulares en la primera vuelta, Adrián y Baha (ninguno el asturiano y uno el francomarroquí).
Al menos, ha quedado compensado con la aparición estelar de Luque, el futbolista en mejor forma en el último tramo de la Liga y probablemente el que ha sostenido al equipo en ataque para contar con opciones de clasificación para Europa hasta la penúltima jornada. El catalán ha brillado con su media docena de dianas y semejante acierto puede resultar curiosamente perjudicial para los deseos del club y del propio futbolista en el afán de que pueda desvincularse del Ajax holandés.
Igual que el Málaga cuenta con una clara ventaja sobre el Sevilla para no perder esa sexta posición en ataque, también se antoja realmente complicado subir algún peldaño. Por delante se encuentran el Barcelona, con 104 (a tres del récord que posee el Real Madrid); el conjunto del Bernabéu, con 82; el Atlético de Madrid, con 77; el Valencia, con 66, y el Villarreal, con 58. Como en el capítulo clasificatorio, el equipo blanquiazul llegó incluso a soñar con acabar cuarto. Otra muestra más de una temporada brillante.
www.diariosur.com
El Málaga lleva siete goles menos que en la primera vuelta. Aun así, está a un paso de acabar la Liga como el sexto mejor equipo en ataque, algo impensable después del desastroso balance -ni un solo tanto- en las cuatro primeras jornadas. La conclusión es significativa: ha marcado más que el Sevilla.
No es cuestión de aludir a la rivalidad entre ambos clubes y aficiones. Simplemente es un dato que refleja el inesperado nivel ofensivo del Málaga esta temporada. El Sevilla cuenta en su plantel con un arsenal ofensivo de primer nivel, encabezado por su pareja de delanteros (Luis Fabiano y Kanouté), y con elementos desequilibrantes en la segunda línea (Jesús Navas, Capel, Renato, Perotti, Adriano...). Pero está por debajo, a tres goles.
Salvo sorpresa, el Málaga acabará la temporada en la sexta posición en el capítulo ofensivo, la prueba más palpable de la filosofía que quiso implantar desde el primer día Antonio Tapia con aquel mensaje de que su primer objetivo era «hacer que el público se divierta».
El bajón en la segunda vuelta va a impedir, a menos que se produzca una casi imposible goleada en Montjuic, batir el récord histórico de los 60 tantos de la temporada 2000-2001, entonces con Joaquín Peiró en el banquillo. Los treinta y uno de la primera parte del campeonato invitaban a pensar en un nuevo registro, más aún ante la perspectiva de que el mejor rematador del grupo (Salva) estuviera disponible en el último tercio del campeonato.
Papel anecdótico
Sin embargo, al Málaga le ha costado mucho más ver puerta una vez superado el ecuador de la Liga. La cifra se ha reducido 'sólo' a veinticuatro, con un papel casi anecdótico para la pareja de delanteros titulares en la primera vuelta, Adrián y Baha (ninguno el asturiano y uno el francomarroquí).
Al menos, ha quedado compensado con la aparición estelar de Luque, el futbolista en mejor forma en el último tramo de la Liga y probablemente el que ha sostenido al equipo en ataque para contar con opciones de clasificación para Europa hasta la penúltima jornada. El catalán ha brillado con su media docena de dianas y semejante acierto puede resultar curiosamente perjudicial para los deseos del club y del propio futbolista en el afán de que pueda desvincularse del Ajax holandés.
Igual que el Málaga cuenta con una clara ventaja sobre el Sevilla para no perder esa sexta posición en ataque, también se antoja realmente complicado subir algún peldaño. Por delante se encuentran el Barcelona, con 104 (a tres del récord que posee el Real Madrid); el conjunto del Bernabéu, con 82; el Atlético de Madrid, con 77; el Valencia, con 66, y el Villarreal, con 58. Como en el capítulo clasificatorio, el equipo blanquiazul llegó incluso a soñar con acabar cuarto. Otra muestra más de una temporada brillante.
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