Acechaba a mujeres para hurtarles el bolso. Su objetivo no era el dinero o las joyas, sino el DNI. Luego, usaba el carné para disfrazarse de sus víctimas y estafarlas
Unos la describieron como una chica rubia con el brazo en cabestrillo. Otros vieron a una mujer pelirroja y con extensiones. Unas veces era flaca y otras, regordeta. Según el día, tenía mucho o poco pecho, llevaba gafas correctoras o de sol. Podía parecerse a cualquiera. La policía ha detenido en Málaga a la ladrona de los mil rostros.
Su extraordinaria capacidad para disfrazarse supuso un auténtico reto para los investigadores, que se encontraron con más de veinte imágenes captadas por las cámaras de seguridad de los establecimientos en las que aparecían mujeres diferentes. Tras varios días escudriñando fotogramas, llegaron a la conclusión de que eran la misma persona, según dijeron fuentes cercanas al caso.
La habilidad de la detenida para meterse en la piel de sus víctimas, a las que supuestamente estafaba, recordó a los agentes a Frank W. Abagnale, un famoso impostor, especialista en falsificar cheques, que durante cinco años puso en jaque al FBI, allá por la década de los 60. Su vida fue llevada al cine por Steven Spielberg en la película 'Atrápame si puedes', en la que Leonardo Di Caprio encarna el personaje de Abagnale perseguido hasta la saciedad por el detective Sean O'Riley, interpretado por Tom Hanks.
Salvando las distancias, los paralelismos entre el impostor norteamericano y la sospechosa de los mil rostros a la que investigaban los agentes hizo a la policía bautizar la operación con el curioso nombre de 'Abagnale'.
Hurtos al descuido
El modus operandi de la mujer, que fue detenida junto a su novio -aunque ella está considerada por la policía como la cabecilla-, era cuando menos curioso. Según la investigación, primero se dedicaban supuestamente a hurtar al descuido en establecimientos comerciales o restaurantes.
Los arrestados acechaban generalmente a mujeres, con frecuencia turistas, que colgaban sus bolsos de una silla o lo llevaban entreabierto bajo el brazo. Pero su objetivo no era el dinero ni las joyas, sino, curiosamente, el carné de identidad, explican las fuentes.
La foto del DNI servía a la mujer de espejo para su trabajo de mimetismo. Los agentes han llegado a la conclusión de la detenida se disfrazaba para parecerse a la dueña del documento. Usaba pelucas de colores, extensiones, gafas correctoras o de sol, rellenos corporales de pecho y de trasero.
Con estos complementos conseguía asemejarse casi a cualquier persona. Cuentan las fuentes que, una vez disfrazada para la ocasión, acudía al banco y, haciéndose pasar por su víctima, entregaba el DNI para pedir un extracto de la cuenta bancaria. Si veía que el empleado no sospechaba nada, presuntamente le solicitaba hacer un reintegro de dos o tres mil euros.
En otros casos, según relataron las fuentes, efectuaban cargos en la cuenta de la afectada mediante la adquisición de tarjetas de regalo, haciendo compras o efectuando recargas de móviles.
La acumulación de denuncias similares permitió a la policía seguir el rastro de la sospechosa. La mayoría de los casos se produjeron en un mismo radio de acción: el distrito Centro. Los investigadores de esta comisaría llegaron tras varias semanas de vigilancia hasta la pareja, que fue detenida en la zona.
En la 'operación Abagnale', los agentes han recuperado unos 40 bolsos supuestamente sustraídos. En total, imputaron a los detenidos más de 20 hurtos, además de, en el caso de la mujer, presuntos delitos de estafa y usurpación de estado civil. Él quedó en libertad, mientras que ella ingresó en prisión.
http://www.diariosur.es/20090517/malaga/ladrona-caras-20090517.html
Unos la describieron como una chica rubia con el brazo en cabestrillo. Otros vieron a una mujer pelirroja y con extensiones. Unas veces era flaca y otras, regordeta. Según el día, tenía mucho o poco pecho, llevaba gafas correctoras o de sol. Podía parecerse a cualquiera. La policía ha detenido en Málaga a la ladrona de los mil rostros.
Su extraordinaria capacidad para disfrazarse supuso un auténtico reto para los investigadores, que se encontraron con más de veinte imágenes captadas por las cámaras de seguridad de los establecimientos en las que aparecían mujeres diferentes. Tras varios días escudriñando fotogramas, llegaron a la conclusión de que eran la misma persona, según dijeron fuentes cercanas al caso.
La habilidad de la detenida para meterse en la piel de sus víctimas, a las que supuestamente estafaba, recordó a los agentes a Frank W. Abagnale, un famoso impostor, especialista en falsificar cheques, que durante cinco años puso en jaque al FBI, allá por la década de los 60. Su vida fue llevada al cine por Steven Spielberg en la película 'Atrápame si puedes', en la que Leonardo Di Caprio encarna el personaje de Abagnale perseguido hasta la saciedad por el detective Sean O'Riley, interpretado por Tom Hanks.
Salvando las distancias, los paralelismos entre el impostor norteamericano y la sospechosa de los mil rostros a la que investigaban los agentes hizo a la policía bautizar la operación con el curioso nombre de 'Abagnale'.
Hurtos al descuido
El modus operandi de la mujer, que fue detenida junto a su novio -aunque ella está considerada por la policía como la cabecilla-, era cuando menos curioso. Según la investigación, primero se dedicaban supuestamente a hurtar al descuido en establecimientos comerciales o restaurantes.
Los arrestados acechaban generalmente a mujeres, con frecuencia turistas, que colgaban sus bolsos de una silla o lo llevaban entreabierto bajo el brazo. Pero su objetivo no era el dinero ni las joyas, sino, curiosamente, el carné de identidad, explican las fuentes.
La foto del DNI servía a la mujer de espejo para su trabajo de mimetismo. Los agentes han llegado a la conclusión de la detenida se disfrazaba para parecerse a la dueña del documento. Usaba pelucas de colores, extensiones, gafas correctoras o de sol, rellenos corporales de pecho y de trasero.
Con estos complementos conseguía asemejarse casi a cualquier persona. Cuentan las fuentes que, una vez disfrazada para la ocasión, acudía al banco y, haciéndose pasar por su víctima, entregaba el DNI para pedir un extracto de la cuenta bancaria. Si veía que el empleado no sospechaba nada, presuntamente le solicitaba hacer un reintegro de dos o tres mil euros.
En otros casos, según relataron las fuentes, efectuaban cargos en la cuenta de la afectada mediante la adquisición de tarjetas de regalo, haciendo compras o efectuando recargas de móviles.
La acumulación de denuncias similares permitió a la policía seguir el rastro de la sospechosa. La mayoría de los casos se produjeron en un mismo radio de acción: el distrito Centro. Los investigadores de esta comisaría llegaron tras varias semanas de vigilancia hasta la pareja, que fue detenida en la zona.
En la 'operación Abagnale', los agentes han recuperado unos 40 bolsos supuestamente sustraídos. En total, imputaron a los detenidos más de 20 hurtos, además de, en el caso de la mujer, presuntos delitos de estafa y usurpación de estado civil. Él quedó en libertad, mientras que ella ingresó en prisión.
http://www.diariosur.es/20090517/malaga/ladrona-caras-20090517.html