La asociación de vecinos Torrijos quiere fomentar la lectura en el barrio. Por ello, para celebrar el Día del Libro, regaló ayer más de 2.300 obras donadas por los propios residentes
Las personas que acudieron ayer el mercado de Huelin regresaron a casa con un libro debajo del brazo. Gracias a la iniciativa desarrollada por la asociación de vecinos Torrijos, el recinto se convirtió durante unas horas en una biblioteca ambulante donde se regalaron libros a todos los vecinos.
La actividad, que se celebra desde hace cinco años para conmemorar el Día del Libro, permitió repartir más de 2.300 ejemplares que estaban en poder de la asociación gracias a las donaciones. La vicepresidenta del colectivo, Mª Paz Osorio, explicó que la mayoría de los libros son de los propios vecinos, que los llevan a la asociación cuando ya los han leído. También había ejemplares donados por la Diputación, Unicaja y la biblioteca María Zambrano.
La idea es que esos libros pasen a otras manos cuando sean leídos, creando así una amplia red de distribución entre particulares. De hecho, los ejemplares llevan una pegatina con el lema 'léelo y pásalo'. Según afirmó Osorio, esta iniciativa se desarrolla para «acercar la cultura a los vecinos y conseguir que no crean que la asociación sólo está para denunciar cosas».
Vecinos encantados
Los vecinos que consiguieron alguno de los títulos se mostraron encantados. Gabriel Gálvez, un jubilado que se declara «lector empedernido» consideró que iniciativas de este tipo fomentan la lectura y ayudan a que «las personas del barrio conozcan algo más».
Algo parecido opinó Pepa Lauri, de 63 años, que se llevó varios libros para que los lean sus hijos. «A las personas que tienen mucho tiempo libre les gusta leer porque así se entretienen». Esta mujer, que acudía a hacer la compra cuando se topó con el expositor, reconoció: «Me encanta leer cuando estoy tranquila en casa».
http://www.diariosur.es/20090424/malaga/huelin-presta-libros-20090424.html
Las personas que acudieron ayer el mercado de Huelin regresaron a casa con un libro debajo del brazo. Gracias a la iniciativa desarrollada por la asociación de vecinos Torrijos, el recinto se convirtió durante unas horas en una biblioteca ambulante donde se regalaron libros a todos los vecinos.
La actividad, que se celebra desde hace cinco años para conmemorar el Día del Libro, permitió repartir más de 2.300 ejemplares que estaban en poder de la asociación gracias a las donaciones. La vicepresidenta del colectivo, Mª Paz Osorio, explicó que la mayoría de los libros son de los propios vecinos, que los llevan a la asociación cuando ya los han leído. También había ejemplares donados por la Diputación, Unicaja y la biblioteca María Zambrano.
La idea es que esos libros pasen a otras manos cuando sean leídos, creando así una amplia red de distribución entre particulares. De hecho, los ejemplares llevan una pegatina con el lema 'léelo y pásalo'. Según afirmó Osorio, esta iniciativa se desarrolla para «acercar la cultura a los vecinos y conseguir que no crean que la asociación sólo está para denunciar cosas».
Vecinos encantados
Los vecinos que consiguieron alguno de los títulos se mostraron encantados. Gabriel Gálvez, un jubilado que se declara «lector empedernido» consideró que iniciativas de este tipo fomentan la lectura y ayudan a que «las personas del barrio conozcan algo más».
Algo parecido opinó Pepa Lauri, de 63 años, que se llevó varios libros para que los lean sus hijos. «A las personas que tienen mucho tiempo libre les gusta leer porque así se entretienen». Esta mujer, que acudía a hacer la compra cuando se topó con el expositor, reconoció: «Me encanta leer cuando estoy tranquila en casa».
http://www.diariosur.es/20090424/malaga/huelin-presta-libros-20090424.html