La comunidad de propietarios y familiares piden ahora ayuda a los servicios sociales para valorar el estado mental de la afectada
Agentes de la Policía Local y trabajadores del Centro Zoosanitario Municipal desalojaron ayer los quince perros que una vecina de la calle Barca mantenía en su piso en pésimas condiciones y que ha mantenido en jaque a la comunidad de propietarios del edificio durante más de seis años.
El operativo acudió por segundo día a la casa con una orden judicial para llevarse los animales. El martes, nadie abrió la puerta. Ayer, con los bomberos avisados, tenían órdenes de echar la puerta abajo, aunque finalmente no fue necesario. La dueña de las mascotas abrió y los servicios procedieron a llevarse uno a uno a los perros, ante las lágrimas desconsoladas de su propietaria. «Yo no puedo vivir sin mis perros y me los han quitado», decía. Según la concejala de Medio Ambiente, Araceli González, cinco de los canes tenían chip y cartilla, y ahora se procede a la revisión veterinaria de todos los animales.
Pero muerto el perro no se acabó la rabia. Los vecinos creen que se ha dado el primer paso con la retirada de los animales, pero que todavía queda la cuestión de fondo. «Esta señora no está bien y queremos ayudarla porque no sabemos si mañana va a empezar a recoger más perros y el problema va a volver a empezar», dice el presidente de la comunidad, quien añade que el piso sigue despidiendo olores.
Las propias hijas de la dueña de los animales piden desesperadamente ayuda para su madre. «Tiene un problema y ya no se da cuenta de que no puede vivir en las condiciones en las que vive, y nosotras no podemos hacerle entrar en razón», explica una de ellas. «Necesitamos que vengan los servicios sociales, que nos ayuden a limpiar el piso y a desinfectarlo, y que valoren si puede seguir viviendo sola», añade.
Se han marchado los perros, pero el olor persiste. Los vecinos dicen que los efectivos que se llevaron a los animales dijeron que nunca habían visto una casa en tan mal estado. Muebles, baños, colchones, paredes... los excrementos de los animales están por todas partes y el piso sigue siendo un foco de infección. Pero los vecinos de la calle Barca ya ven la luz al final del túnel.
http://www.diariosur.es/20090423/malaga/intervenidos-quince-perros-vivian-20090423.html
Agentes de la Policía Local y trabajadores del Centro Zoosanitario Municipal desalojaron ayer los quince perros que una vecina de la calle Barca mantenía en su piso en pésimas condiciones y que ha mantenido en jaque a la comunidad de propietarios del edificio durante más de seis años.
El operativo acudió por segundo día a la casa con una orden judicial para llevarse los animales. El martes, nadie abrió la puerta. Ayer, con los bomberos avisados, tenían órdenes de echar la puerta abajo, aunque finalmente no fue necesario. La dueña de las mascotas abrió y los servicios procedieron a llevarse uno a uno a los perros, ante las lágrimas desconsoladas de su propietaria. «Yo no puedo vivir sin mis perros y me los han quitado», decía. Según la concejala de Medio Ambiente, Araceli González, cinco de los canes tenían chip y cartilla, y ahora se procede a la revisión veterinaria de todos los animales.
Pero muerto el perro no se acabó la rabia. Los vecinos creen que se ha dado el primer paso con la retirada de los animales, pero que todavía queda la cuestión de fondo. «Esta señora no está bien y queremos ayudarla porque no sabemos si mañana va a empezar a recoger más perros y el problema va a volver a empezar», dice el presidente de la comunidad, quien añade que el piso sigue despidiendo olores.
Las propias hijas de la dueña de los animales piden desesperadamente ayuda para su madre. «Tiene un problema y ya no se da cuenta de que no puede vivir en las condiciones en las que vive, y nosotras no podemos hacerle entrar en razón», explica una de ellas. «Necesitamos que vengan los servicios sociales, que nos ayuden a limpiar el piso y a desinfectarlo, y que valoren si puede seguir viviendo sola», añade.
Se han marchado los perros, pero el olor persiste. Los vecinos dicen que los efectivos que se llevaron a los animales dijeron que nunca habían visto una casa en tan mal estado. Muebles, baños, colchones, paredes... los excrementos de los animales están por todas partes y el piso sigue siendo un foco de infección. Pero los vecinos de la calle Barca ya ven la luz al final del túnel.
http://www.diariosur.es/20090423/malaga/intervenidos-quince-perros-vivian-20090423.html