La liquidez es a día de hoy la única ventaja con la que cuenta el Villarreal respecto al Valencia para hacerse con los servicios de Apoño la próxima temporada. Ambos clubes son los que pujan más en serio por el centrocampista malagueño, por el que también muestran interés conjuntos de la Premier League.
Apoño es una de las joyas del mercado. Su irrupción ha sorprendido a los directores deportivos de numerosos clubes, tanto en España como en el extranjero. Quedan atrás los movimientos a finales de agosto para cederlo al Alavés o al Xerez. El futbolista de La Palmilla ha confirmado las expectativas depositadas en él por Juan Ramón Muñiz cuando lo reclutó del Marbella. «En cuanto le coja el aire a las categorías llamará mucho la atención», pronosticó hace dos años por estas fechas, cuando aún no había debutado en el Málaga.
La cláusula de rescisión de Apoño es de sólo cinco millones de euros, lo que lo convierte en un futbolista muy apetecible. El interés es en particular de dos conjuntos que asistieron en su feudo a una exhibición del malagueño. Tanto el Valencia como el Villarreal pudieron comprobar de primera mano no hace mucho -en ambos casos, partidos disputados esta segunda vuelta- su capacidad para manejar el balón con criterio y con varios cambios de orientación.
Más llamativo
El Valencia es un conjunto más llamativo que el Villarreal para cualquier futbolista, pero en la actualidad la situación económica del primero de ellos es muy complicada. Aunque no lo aparenta, tampoco está boyante el cuadro castellonense, pero su deuda no es tan galopante y tan difícilmente asumible como sucede en Mestalla a pesar de que el nuevo contrato televisivo ha supuesto un respiro.
La diferencia entre uno y otro no es sólo su capacidad económica. En estos momentos el Valencia no puede invertir, porque antes debe ingresar una importante cantidad de dinero para disponer de liquidez. Su futuro depende en un elevado porcentaje del traspaso de alguna de sus estrellas, Silva o Villa, aunque es este último el que le puede reportar un cuantioso ingreso.
El Valencia pretende configurar una plantilla de 'perfil bajo'; es decir, integrada por futbolistas sin excesivo renombre, con ansias de triunfar y, sobre todo, con fichas acordes a la situación actual no ya del conjunto levantino, sino a nivel mundial. Conviene recordar que el presupuesto actual destinado a los jugadores es desorbitado.
Frente a ello, el Villarreal sí parece tener capacidad para abonar los cinco millones (el Málaga no está dispuesto a rebajar un solo euro de la cláusula de rescisión fijada en el contrato) y cuenta además con la ventaja de que puede aportar futbolistas cedidos al proyecto blanquiazul de la campaña venidera.
Pereira, Bruno...
No es un secreto que al Málaga le seduce la idea de tener prioridad con Valencia y Villarreal a la hora de hacerse con posibles cesiones, pero hay que hacer hincapié en un detalle: las fichas de posibles incorporaciones del equipo castellonense son más asumibles (Bruno, Jonathan Pereira o Marcos) que las del conjunto de Mestalla (Zigic o algunos otros de la amplia lista de descartes). Tampoco la situación de este último está para prestar a un futbolista y hacerse cargo del 60 o el 65 por ciento de sus emolumentos.
Si hace mes y medio en el Málaga ya estaban al tanto de la marcha de Eliseu (debido a su baja cláusula, 600.000 euros) y del enorme interés de varios equipos por Jesús Gámez, ahora también existe la convicción de que será muy complicada la continuidad de Apoño. Es más, no debe descartarse que estos dos últimos figuren en un lote por el que pujen el Valencia o el Atlético de Madrid. El club de la capital es otro de los que cuentan con informes favorables sobre el futbolista de La Palmilla, al margen de que Maniche no continuará y Banega, cedido por el Valencia, no ha convencido.
Pereira
http://malagacf.sur.es/noticias/2009-04-27/liquidez-ventaja-villarreal-sobre-20090427.html
Apoño es una de las joyas del mercado. Su irrupción ha sorprendido a los directores deportivos de numerosos clubes, tanto en España como en el extranjero. Quedan atrás los movimientos a finales de agosto para cederlo al Alavés o al Xerez. El futbolista de La Palmilla ha confirmado las expectativas depositadas en él por Juan Ramón Muñiz cuando lo reclutó del Marbella. «En cuanto le coja el aire a las categorías llamará mucho la atención», pronosticó hace dos años por estas fechas, cuando aún no había debutado en el Málaga.
La cláusula de rescisión de Apoño es de sólo cinco millones de euros, lo que lo convierte en un futbolista muy apetecible. El interés es en particular de dos conjuntos que asistieron en su feudo a una exhibición del malagueño. Tanto el Valencia como el Villarreal pudieron comprobar de primera mano no hace mucho -en ambos casos, partidos disputados esta segunda vuelta- su capacidad para manejar el balón con criterio y con varios cambios de orientación.
Más llamativo
El Valencia es un conjunto más llamativo que el Villarreal para cualquier futbolista, pero en la actualidad la situación económica del primero de ellos es muy complicada. Aunque no lo aparenta, tampoco está boyante el cuadro castellonense, pero su deuda no es tan galopante y tan difícilmente asumible como sucede en Mestalla a pesar de que el nuevo contrato televisivo ha supuesto un respiro.
La diferencia entre uno y otro no es sólo su capacidad económica. En estos momentos el Valencia no puede invertir, porque antes debe ingresar una importante cantidad de dinero para disponer de liquidez. Su futuro depende en un elevado porcentaje del traspaso de alguna de sus estrellas, Silva o Villa, aunque es este último el que le puede reportar un cuantioso ingreso.
El Valencia pretende configurar una plantilla de 'perfil bajo'; es decir, integrada por futbolistas sin excesivo renombre, con ansias de triunfar y, sobre todo, con fichas acordes a la situación actual no ya del conjunto levantino, sino a nivel mundial. Conviene recordar que el presupuesto actual destinado a los jugadores es desorbitado.
Frente a ello, el Villarreal sí parece tener capacidad para abonar los cinco millones (el Málaga no está dispuesto a rebajar un solo euro de la cláusula de rescisión fijada en el contrato) y cuenta además con la ventaja de que puede aportar futbolistas cedidos al proyecto blanquiazul de la campaña venidera.
Pereira, Bruno...
No es un secreto que al Málaga le seduce la idea de tener prioridad con Valencia y Villarreal a la hora de hacerse con posibles cesiones, pero hay que hacer hincapié en un detalle: las fichas de posibles incorporaciones del equipo castellonense son más asumibles (Bruno, Jonathan Pereira o Marcos) que las del conjunto de Mestalla (Zigic o algunos otros de la amplia lista de descartes). Tampoco la situación de este último está para prestar a un futbolista y hacerse cargo del 60 o el 65 por ciento de sus emolumentos.
Si hace mes y medio en el Málaga ya estaban al tanto de la marcha de Eliseu (debido a su baja cláusula, 600.000 euros) y del enorme interés de varios equipos por Jesús Gámez, ahora también existe la convicción de que será muy complicada la continuidad de Apoño. Es más, no debe descartarse que estos dos últimos figuren en un lote por el que pujen el Valencia o el Atlético de Madrid. El club de la capital es otro de los que cuentan con informes favorables sobre el futbolista de La Palmilla, al margen de que Maniche no continuará y Banega, cedido por el Valencia, no ha convencido.
Pereira
http://malagacf.sur.es/noticias/2009-04-27/liquidez-ventaja-villarreal-sobre-20090427.html