Las comparaciones son odiosas
El Málaga de Gracia se mide a su pasado más reciente, el de Schuster, y suma en once jornadas todo lo que sumó el curso pasado en veinte – Los blanquiazules consiguen la mitad de los puntos para la salvación y vuelven a puesto europeo año y medio después
El Málaga CF de Javi Gracia que escribe con letra firme y recta su brillante historia nada tiene que envidar al mejor Málaga CF de todos los tiempos. Las comparaciones siempre han sido odiosas y comparar equipos, temporadas, entrenadores y jugadores enmarcados en otros proyectos con otras realidades es un ejercicio habitual en el periodismo. Los números, fríos y a la vez incontestables amplían el escenario de una gesta o de una crisis. Y en este sentido, el actual camino del conjunto blanquiazul acapara elogios por voluntad propia.
Sin embargo, al echar la vista atrás hace apenas un año, los síntomas son bien diferentes. En la comparativa del Málaga de Javi Gracia con el de Schuster, el alemán sale mal parado. Con una plantilla previsiblemente mejor tras los coletazos de la Champions, y con un técnico que se presumía tener más caché y más currículum, el Málaga a estas alturas de Liga –jornada once– estaba decimoquinto, sólo un punto por encima del descenso (10) y con malas sensaciones generales. Nada que ver con la plácida campaña que vive el equipo ahora con 21 puntos, sexto y con 12 puntos sobre el descenso.
Y es que el Málaga de Schuster tuvo que llegar a la primera jornada de la segunda vuelta (jornada 20) para alcanzar los 21 puntos que ahora suma el conjunto blanquiazul. Es decir, toda una vuelta para alcanzar la mitad del camino que se le pide al plantel malaguista: la salvación.
Y es que la permanencia matemática suele rondar los 42 puntos. Y el Málaga ya alcanza la mitad de esa cifra tras haber consumido poco más de un cuarto de competición, lo que incita a pensar en cotas más elevadas.
Unas cotas que no son extrañas para el Málaga CF, ya que durante dos campañas seguidas fue asiduo a ocupar puestos europeos. Sin embargo, hay que remontarse a casi año y medio atrás para ver al Málaga en posición europea. Fue en el último año de Manuel Pellegrini, donde el conjunto blanquiazul ocupó 36 de 38 jornadas en puestos europeos, además de llegar hasta cuartos de final de la Liga de Campeones. Pero desde el pasado uno de junio de 2013, el Málaga no ocupaba una posición de tanto privilegio.
Ahora el club debe defender esa plaza para intentar regresar a Europa el año que viene.
El Málaga de Gracia se mide a su pasado más reciente, el de Schuster, y suma en once jornadas todo lo que sumó el curso pasado en veinte – Los blanquiazules consiguen la mitad de los puntos para la salvación y vuelven a puesto europeo año y medio después
El Málaga CF de Javi Gracia que escribe con letra firme y recta su brillante historia nada tiene que envidar al mejor Málaga CF de todos los tiempos. Las comparaciones siempre han sido odiosas y comparar equipos, temporadas, entrenadores y jugadores enmarcados en otros proyectos con otras realidades es un ejercicio habitual en el periodismo. Los números, fríos y a la vez incontestables amplían el escenario de una gesta o de una crisis. Y en este sentido, el actual camino del conjunto blanquiazul acapara elogios por voluntad propia.
Sin embargo, al echar la vista atrás hace apenas un año, los síntomas son bien diferentes. En la comparativa del Málaga de Javi Gracia con el de Schuster, el alemán sale mal parado. Con una plantilla previsiblemente mejor tras los coletazos de la Champions, y con un técnico que se presumía tener más caché y más currículum, el Málaga a estas alturas de Liga –jornada once– estaba decimoquinto, sólo un punto por encima del descenso (10) y con malas sensaciones generales. Nada que ver con la plácida campaña que vive el equipo ahora con 21 puntos, sexto y con 12 puntos sobre el descenso.
Y es que el Málaga de Schuster tuvo que llegar a la primera jornada de la segunda vuelta (jornada 20) para alcanzar los 21 puntos que ahora suma el conjunto blanquiazul. Es decir, toda una vuelta para alcanzar la mitad del camino que se le pide al plantel malaguista: la salvación.
Y es que la permanencia matemática suele rondar los 42 puntos. Y el Málaga ya alcanza la mitad de esa cifra tras haber consumido poco más de un cuarto de competición, lo que incita a pensar en cotas más elevadas.
Unas cotas que no son extrañas para el Málaga CF, ya que durante dos campañas seguidas fue asiduo a ocupar puestos europeos. Sin embargo, hay que remontarse a casi año y medio atrás para ver al Málaga en posición europea. Fue en el último año de Manuel Pellegrini, donde el conjunto blanquiazul ocupó 36 de 38 jornadas en puestos europeos, además de llegar hasta cuartos de final de la Liga de Campeones. Pero desde el pasado uno de junio de 2013, el Málaga no ocupaba una posición de tanto privilegio.
Ahora el club debe defender esa plaza para intentar regresar a Europa el año que viene.