El Ayuntamiento acepta analizar esta opción para que el Málaga C.F. mejore sus ingresos mediante la explotación del estadio
La posibilidad de que el estadio de La Rosaleda albergue usos comerciales y de restauración está sobre la mesa. La vía quedó abierta semanas atrás en los últimos contactos mantenidos por los responsables del Málaga C.F. y del Ayuntamiento de la ciudad en la búsqueda de acuerdos que permitan al club de Martiricos seguir haciendo uso las instalaciones sin coste alguno para sus arcas y, al tiempo, formular mecanismos de explotación con los que incentivar sus ingresos.
En esta senda, una de las opciones que gana enteros es la de autorizar usos complementarios a los estrictamente deportivos dentro del propio campo. Un extremo confirmado ayer tanto por el alcalde, Francisco de la Torre, como por el concejal de Deportes, Damián Caneda. El primero, en la Cadena Ser, expuso que en los encuentros mantenidos se ha propuesto al club que comunique cuáles son los proyectos que a su juicio pueden tener encaje en esta hoja de ruta, quedando dispuesto el Consistorio a analizar las posibilidades urbanísticas de los mismos.
"Por nuestra parte no habría ningún problema", vino a indicar el regidor, que, no obstante, reconoció que cualquier avance en esta línea debería contar con la aceptación de los otros dos propietarios del estadio, la Junta de Andalucía y la Diputación provincial.
En la misma línea se pronunció Caneda. "Les animamos a que planteasen usos posibles dentro del estadio, algo que se le reiteró hace unos quince días", comentó. Una vez superada esta fase previa, el equipo de gobierno está a la espera de que por parte de la entidad de Martiricos se hagan las aportaciones correspondientes. "Si quieren hacer algo lo que tienen es que decirlo con un boceto y ver si puede encajar", insistió.
De acuerdo con las palabras del edil del PP, la posición municipal será la de analizar las ideas "con todo el cariño". "De lo que se trata es de no crearle ningún tipo de gasto al Málaga y ayudarle en lo que se pueda", abundó. No obstante, Caneda comentó la posibilidad de que cualquier avance en este línea vaya acompañado de mejoras urbanísticas en el estadio.
Lo que sí se descarta por completo es la senda que el propio alcalde abrió a mediados del año pasado para vender al club el estadio. Al respecto, De la Torre apuntaba que se trata de una posibilidad de la que no se habla en la entidad en los últimos meses. Algo que puede estar relacionado con su incapacidad económica para hacer frente incluso a un valor muy inferior a la tasación que estipulan las tres administraciones propietarias y que ronda los 40 millones de euros.
Cercenado este camino, el vínculo del Málaga y La Rosaleda se prevé que siga siendo el de la explotación a coste cero. A cambio, como insistió ayer el alcalde, se plantea la firma de un convenio de colaboración en materia de promoción. "Estamos dispuestos a que el Málaga no pague nada por el uso de La Rosaleda a cambio de publicidad", comentó. No es la primera ocasión en la que se pone sobre la mesa esta alternativa, aunque la realidad es que sigue sin cerrarse el acuerdo final en esta materia.
Sobre lo que de momento no parece haber excesiva novedad es sobre el proyecto de la ciudad deportiva en Arraijanal. Si en cuestiones urbanísticas el Ayuntamiento está a la espera de unos últimos informes y de remitir el plan especial del sector en un mes a la Junta, el Málaga sigue sin aportar luz a la financiación de una intervención que podría rondar los 15 millones de euros.
Al respecto, De la Torre aludió a que el club, en la última reunión, vio con buenos ojos la posibilidad de recibir a cambio de los suelos permutados en la zona de ampliación del campus de Teatinos otros de uso empresarial en la zona de Haza de la Cruz. Un terreno cuya venta, según el alcalde, podría reportar a la entidad entre tres y cuatro millones de euros.
http://www.malagahoy.es/article/malaga/1706802/alcalde/estudiara/la/rosaleda/acoja/uso/comercial/y/restauracion.html