El hijo de una mujer de 83 años, María García Blanco, muerta el pasado 27 de febrero en el Hospital Clínico Universitario, acudirá a la vía judicial contra el Servicio Provincial de Urgencias y Emergencias 061, el 112 y el coordinador médico del 061 que decidió qué ambulancia enviar y cuándo hacerlo. Constantino Crespo, hijo de la fallecida, considera que los cincuenta minutos que tardó la ambulancia en llegar al domicilio donde estaba su madre fueron excesivos, a pesar de que se hicieron varias llamadas alertando del empeoramiento progresivo de la paciente. La mujer, finalmente, fue traslada al Clínico Universitario, donde falleció al poco tiempo de ingresar. La paciente sufría microinfartos cerebrales.
El caso ha llegado hasta el Defensor del Pueblo Andaluz tras la reclamación presentada por Constantino Crespo. El Defensor estudiará el asunto e investigará si la actuación del 061 fue la correcta o hubo algún tipo de negligencia.
La familia también ha presentado reclamaciones ante el 061 y el 112. «Solo nos ha contestado el Defensor del Pueblo Andaluz. No hemos tenido respuesta del 061 ni del 112», afirmó ayer a este periódico Crespo. El hijo de la difunda explicó que se va a reunir con el abogado Francisco Damián Vázquez para aportarle toda la documentación e ir por la vía judicial.
A las 14.35 horas del 27 de febrero la mujer sufrió un síncope. La familia, al ver que no se recuperaba, llamó al 061 a las 14.40. «Viendo que mi madre iba a peor y que no llegaba la ambulancia, volvimos a llamar al 061. La primera vez nos dijeron que el servicio venía de camino y en la segunda que no había ambulancias disponibles», relata el hijo de la fallecida. Tanto él como su hermana recalcan que la ambulancia tardó 50 minutos en acudir. Ante esa demora, la familia llamó a la Policía Local para que levantara acta de los hechos.
Constantino Crespo también se queja de que la ambulancia se entretuvo en el traslado de su madre hasta el Clínico. «Mi hermana y yo llegamos al hospital antes que mi madre. Algo sucedió en ese traslado», subrayó. La muejr murió poco tiempo después.
Por su parte, la dirección del 061 aseguró en una nota que, una vez recibida la llamada, y ante la información inicial aportada por la familia, se consideró que la paciente sufría una agudización de sus procesos crónicos y se le asignó una unidad de urgencia para que pudiera atenderla en su domicilio. «Desde la sala de coordinación, en los contactos posteriores con los familiares, tras detectar un cambio en su situación, se decide priorizar su asistencia por los equipos de urgencias, asignándole el caso al primer equipo disponible», se dice en la nota. Y se añade: «Finalmente, acude al lugar de la asistencia una ambulancia medicalizada de urgencias, dotada de médico, enfermero y conductor, asistiendo a la paciente en su domicilio y trasladándola al hospital clínico, donde falleció».
El caso ha llegado hasta el Defensor del Pueblo Andaluz tras la reclamación presentada por Constantino Crespo. El Defensor estudiará el asunto e investigará si la actuación del 061 fue la correcta o hubo algún tipo de negligencia.
La familia también ha presentado reclamaciones ante el 061 y el 112. «Solo nos ha contestado el Defensor del Pueblo Andaluz. No hemos tenido respuesta del 061 ni del 112», afirmó ayer a este periódico Crespo. El hijo de la difunda explicó que se va a reunir con el abogado Francisco Damián Vázquez para aportarle toda la documentación e ir por la vía judicial.
A las 14.35 horas del 27 de febrero la mujer sufrió un síncope. La familia, al ver que no se recuperaba, llamó al 061 a las 14.40. «Viendo que mi madre iba a peor y que no llegaba la ambulancia, volvimos a llamar al 061. La primera vez nos dijeron que el servicio venía de camino y en la segunda que no había ambulancias disponibles», relata el hijo de la fallecida. Tanto él como su hermana recalcan que la ambulancia tardó 50 minutos en acudir. Ante esa demora, la familia llamó a la Policía Local para que levantara acta de los hechos.
Constantino Crespo también se queja de que la ambulancia se entretuvo en el traslado de su madre hasta el Clínico. «Mi hermana y yo llegamos al hospital antes que mi madre. Algo sucedió en ese traslado», subrayó. La muejr murió poco tiempo después.
Por su parte, la dirección del 061 aseguró en una nota que, una vez recibida la llamada, y ante la información inicial aportada por la familia, se consideró que la paciente sufría una agudización de sus procesos crónicos y se le asignó una unidad de urgencia para que pudiera atenderla en su domicilio. «Desde la sala de coordinación, en los contactos posteriores con los familiares, tras detectar un cambio en su situación, se decide priorizar su asistencia por los equipos de urgencias, asignándole el caso al primer equipo disponible», se dice en la nota. Y se añade: «Finalmente, acude al lugar de la asistencia una ambulancia medicalizada de urgencias, dotada de médico, enfermero y conductor, asistiendo a la paciente en su domicilio y trasladándola al hospital clínico, donde falleció».