El Unicaja de Repesa está muy cerca de ser lo que su entrenador pretende: un equipo rocoso atrás y que juegue un baloncesto dinámico y alegre. Vamos, que guste a sus aficionados. El encuentro de ayer es un buen ejemplo de ello. Su juego ante el Assignia Manresa fue brillante durante 25 minutos, con un repertorio ofensivo variado con el que entusiasmó a los poco más de 5.000 espectadores -dato preocupante- que acudieron al Palacio de los Deportes. Luego se dejó ir y a punto estuvo de costarle un disgusto. Algo hasta casi entendible por el esfuerzo que había realizado un día antes en la Euroliga ante el Siena y porque a los 25 minutos ganaba por 27 puntos (67-40). Hasta ese momento, el Unicaja no tuvo problemas para arrollar a un rival que cada temporada hace magia para hacer un papel más que digno en la Liga ACB.
La mejor noticia del encuentro ante el conjunto catalán es que el juego del Unicaja sigue en clara progresión y por momentos fue casi automático. Pero, claro, cuando todo se respalda con una defensa que a los seis minutos solo ha permitido al rival anotar dos puntos, el objetivo es mucho más fácil (21-2). Con semejante parcial, el equipo de Repesa se movió a sus anchas, perfectamente dirigido por Calloway y con Urtasun y Dragic como brazos ejecutores.
Urtasun es hasta el momento el fichaje más sólido que ha realizado hasta el momento el Unicaja se mire por donde se mire. Conocimiento del juego y recursos ofensivos de gran nivel. Dragic es otra historia. Ayer comenzó en el quinteto titular para tratar de frenar al excajista Troy DeVries, que llegaba al partido como cuarto máximo anotador del campeonato. Zoric no solo cumplió con ese cometido, sino que una vez más sacó partido de esa intensidad y actitud que imprime a todas sus acciones. Cuajó un partido excelente con 20 puntos y cinco rebotes, cuatro de ellos en ataque. Y aunque el tiro no es su fuerte, anotó cuatro triples de cinco intentos. 'Zoki', como lo apodan en el vestuario, es una esponja en manos de Repesa y no para de mejorar.
Perovic y Fran Vázquez
Con el partido controlado (30-16, minuto 10), Repesa le dio muchos minutos antes del descanso a Perovic en un escenario perfecto para que dominase y mejorase su autoestima. El serbio los aprovechó a medias, pues todavía sigue lejos de su mejor nivel. No le fueron mejor las cosas a Vázquez, que sufrió ante Arteaga y Asselin y al que Repesa sentó en el banco no sin antes abroncarlo públicamente. La actuación de los dos 'cincos' fue lo más preocupante de una primera parte excelente del Unicaja, en el que Lima brilló ante los ojeadores de la NBA que acudieron al Palacio y en la que Williams volvió a meterse a los aficionados en el bolsillo con varias acciones de auténtico genio. El 55-36 al descanso mostraba las diferencias entre los dos equipos después de 20 minutos.
Relajación
La inspiración le duró al Unicaja justo cinco minutos más, lo suficiente para darle la estocada a su rival. Fueron instantes de una presión y una agresividad defensiva enormes que Urtasun, Dragic y Zoric certificaron en ataque para disparar al Unicaja en el marcador (67-40, minuto 25).
En ese momento, el Unicaja pareció irse del partido. Bajó los brazos pensando que el rival estaba noqueado. Pero el Manresa es un equipo con orgullo y, aunque modesto, tiene buenos jugadores, la mayoría repescados de la LEB Oro. Arco, Arteaga y Hanga lideraron la reacción catalana con un parcial de 7-28 (76-68). Repesa abroncó a los suyos, volvió la seriedad en defensa, y de nuevo, los mismos actores, Williams, Zoric, Urtasun y Dragic, se encargaron de cortar la reacción visitante.
La mejor noticia del encuentro ante el conjunto catalán es que el juego del Unicaja sigue en clara progresión y por momentos fue casi automático. Pero, claro, cuando todo se respalda con una defensa que a los seis minutos solo ha permitido al rival anotar dos puntos, el objetivo es mucho más fácil (21-2). Con semejante parcial, el equipo de Repesa se movió a sus anchas, perfectamente dirigido por Calloway y con Urtasun y Dragic como brazos ejecutores.
Urtasun es hasta el momento el fichaje más sólido que ha realizado hasta el momento el Unicaja se mire por donde se mire. Conocimiento del juego y recursos ofensivos de gran nivel. Dragic es otra historia. Ayer comenzó en el quinteto titular para tratar de frenar al excajista Troy DeVries, que llegaba al partido como cuarto máximo anotador del campeonato. Zoric no solo cumplió con ese cometido, sino que una vez más sacó partido de esa intensidad y actitud que imprime a todas sus acciones. Cuajó un partido excelente con 20 puntos y cinco rebotes, cuatro de ellos en ataque. Y aunque el tiro no es su fuerte, anotó cuatro triples de cinco intentos. 'Zoki', como lo apodan en el vestuario, es una esponja en manos de Repesa y no para de mejorar.
Perovic y Fran Vázquez
Con el partido controlado (30-16, minuto 10), Repesa le dio muchos minutos antes del descanso a Perovic en un escenario perfecto para que dominase y mejorase su autoestima. El serbio los aprovechó a medias, pues todavía sigue lejos de su mejor nivel. No le fueron mejor las cosas a Vázquez, que sufrió ante Arteaga y Asselin y al que Repesa sentó en el banco no sin antes abroncarlo públicamente. La actuación de los dos 'cincos' fue lo más preocupante de una primera parte excelente del Unicaja, en el que Lima brilló ante los ojeadores de la NBA que acudieron al Palacio y en la que Williams volvió a meterse a los aficionados en el bolsillo con varias acciones de auténtico genio. El 55-36 al descanso mostraba las diferencias entre los dos equipos después de 20 minutos.
Relajación
La inspiración le duró al Unicaja justo cinco minutos más, lo suficiente para darle la estocada a su rival. Fueron instantes de una presión y una agresividad defensiva enormes que Urtasun, Dragic y Zoric certificaron en ataque para disparar al Unicaja en el marcador (67-40, minuto 25).
En ese momento, el Unicaja pareció irse del partido. Bajó los brazos pensando que el rival estaba noqueado. Pero el Manresa es un equipo con orgullo y, aunque modesto, tiene buenos jugadores, la mayoría repescados de la LEB Oro. Arco, Arteaga y Hanga lideraron la reacción catalana con un parcial de 7-28 (76-68). Repesa abroncó a los suyos, volvió la seriedad en defensa, y de nuevo, los mismos actores, Williams, Zoric, Urtasun y Dragic, se encargaron de cortar la reacción visitante.