Con la llegada del estadounidense Onyewu, del chileno Iturra y del paraguayo Santa Cruz, el equipo blanquiazul tiene diez nacionalidades diferentes entre todos sus jugadores, cuando la media de los clubes españoles es de siete.
Tras España, Argentina es la nación con más representantes en la plantilla blanquiazul, cuatro, y con dos están Portugal, Brasil y Camerún
Hicieron la maleta el venezolano Salomón Rondón, los holandeses Ruud van Nistelrooy y Joris Mathijsen y el italiano Enzo Maresca, pero han llegado el chileno Manuel Rolando Iturra, el paraguayo Roque Santa Cruz y el estadounidense (de origen nigeriano) Oguchi Onyewu. El Málaga CF es la «ONU» del fútbol español, con un total de diez nacionalidades distintas en su plantilla de jugadores, cuando la media de Primera División es de siete por cada club.
El conjunto blanquiazul es una especie de torre de Babel, aunque el idioma mayoritario es el español al contar con diez jugadores nacionales: los canteranos Jesús Gámez, Portillo, Recio y Juanmi, el también malagueño Isco, el portero Pol (gerundense, pero también de La Academia), así como el catalán-andaluz Sergio Sánchez, el gaditano Joaquín, el navarro Monreal y el aragonés y «hermano» de éste, Camacho.
Otros siete futbolistas también hablan español, pero pertenecen a países sudamericanos. Después de España, el país más representado en la plantilla es Argentina, con cuatro jugadores: Willy Caballero, Demichelis, Buonanotte y Saviola. Los otros tres son el uruguayo Sebas Fernández, el chileno Manuel Iturra y el paraguayo Roque Santa Cruz.
Los demás jugadores de distintas nacionalidades son el francés Jeremy Toulalan, los brasileños Weligton y Julio Baptista, los portugueses Eliseu y Duda, los cameruneses Kameni y Fabrice y el último en llegar: el norteamericano Oguchi Onyewu. De esta manera, tan sólo ocho ocho jugadores de la plantilla no tienen el español como primer idioma.
El chileno Manuel Pellegrini y su segundo, el argentino Rubén Cousillas, sólo necesitarían a un jugador de un país distinto para constituir una alineación formada por once futbolistas de distintos países u once extranjeros, como ocurrió con el Atlético de Madrid que se enfrentó al bloque blanquiazul en la primera jornada de la temporada 2008/2009.
Y es que 15 de los 25 de la plantilla son extranjeros, aunque sólo hay un extracomunitario: el brasileño Weligton. Tanto Willy Caballero como Sebas Fernández, Saviola, Baptista y Santa Cruz tienen pasaporte español, Kameni francés, Demichelis, Iturra y Buonanotte italiano y Onyewu belga. En el caso de Fabrice, puede jugar sin considerarse extracomunitario gracias al acuerdo de Cotonou.
Además, uno de los últimos refuerzos para el organigrama del club de Martiricos ha sido el argentino Mario Husillos (director deportivo), aunque lleva tanto tiempo en España, en general, y en Málaga, en particular, que es prácticamente malagueño.
Argentina está muy bien representada en la actualidad. Años atrás fue Portugal la nación que iba por detrás de España en número de elementos, ya que además de Duda y Eliseu, estaban Hélder, Edinho y, durante algunos meses, el entrenador Jesualdo Ferreira.
Este Málaga CF es un ejemplo de lo que simboliza la ciudad de Málaga, caracterizada siempre por su hospitalidad (así está escrito en uno de los títulos otorgados) y, de este modo, su capaciadad para acoger a gente de todas las nacionalidades.
Y el conjunto albiceleste no lo es menos. Junto al Málaga CF, los otros equipos de Primera División con mayor número de nacionalidades diferentes son el Sevilla y el Granada (diez también, cada uno de ellos), curiosamente otros dos conjuntos andaluces, mientras que en el plano opuesto se encuentran el Getafe, con sólo cuatro países distintos representados y el Athletic de Bilbao, que tiene sólo a españoles y al venezolano Amorebieta.
Más nacionalidades aún en las oficinas. Si la plantilla se caracteriza por la gran cantidad de países distintos que están representados, en las oficinas del club de Martiricos no se quedan atrás. El dueño y presidente del Málaga CF, Abdullah Al-Thani, es catarí, y sus dos hombres de confianza, tanto Abdullah Ghubn como Moayad Shatat son jordanos.
Uno de los nuevos consejeros consultivos, Abdallah Ben Barek, es marroquí. Además, están los ya citados Manuel Pellegrini (chileno), Rubén Cousillas y Mario Husillos (argentinos), Hazel Gormley Leahy, que es la directora de Marketing (irlandesa), la speaker inglesa en los goles, que es la hindú Mercy Chapman, así como, entre otros, las traductoras de árabe y de chino, la marroquí Mouna Aboussi y la china Viviana Ma, respectivamente.
http://www.laopiniondemalaga.es/malagacf/2012/09/07/malaga-onu/532088.html