Lo veremos por Canal sur 2

La situación del Unicaja respecto a la pasada temporada ha cambiado como de la noche al día. Después de nueve jornadas y a falta de ocho para el final de la primera vuelta, el conjunto malagueño está virtualmente clasificado para la Copa del Rey, un torneo que no disputó en las dos últimas ediciones, algo que supuso uno de los mayores descalabros de su historia reciente. Su siguiente objetivo es llegar a la cita de Barcelona como uno de los cuatro mejores de la primera vuelta, como cabeza de serie.

La victoria del sábado frente al Caja Laboral tuvo un importante valor moral para el equipo, pero también un impacto directo en la clasificación al dejar al cuadro malagueño tercero en solitario. De este modo, el Valencia cuenta con una victoria menos, mientras que el Caja Laboral ya tendría que sumar dos. El pasado jueves la Liga ACB publicó un informe en el que recalcaba la ventajosa situación del Unicaja, pues nunca un equipo con siete triunfos se había quedado fuera de la Copa del Rey en las últimas diez temporadas.

Con el respaldo de la historia y tras haber completado dos meses de competición realmente sensacionales, el objetivo se torna ahora más ambicioso: llegar a la jornada 17, la que marca el corte de los equipos que jugarán la Copa, entre los cuatro primeros. Esto le permitiría evitar a los otros tres equipos en mejor forma; previsiblemente, dos de ellos serán el Real Madrid y el Barcelona Regal. En términos competitivos esto representa, a priori, una ventaja, aunque el carácter particular de un torneo como la Copa del Rey lo deja todo en el aire.

Calendario complicado

Pero no será fácil. Hasta esa decimoséptima jornada el Unicaja tiene un camino ciertamente complicado. Especialmente duro será el mes de diciembre, en el que tratará de consolidar ese objetivo frente a rivales de entidad como el Estudiantes, Barcelona, Joventut y Cajasol, con el condicionante de que los dos primeros encuentros serán a domicilio de forma consecutiva. Ya en enero el calendario será más benévolo con partidos ante el Bilbao, Fuenlabrada, Murcia y Manresa.

Tampoco conviene perder de vista otro factor que puede resultar clave cara al futuro, y es el importante 'basket average' a favor que acumula el Unicaja de más 80 puntos. Este granero almacenado casi doblega al del Valencia (+47) y duplica al del Caja Laboral (+40), sus más directos rivales por ese objetivo de ser cabezas de serie. Solo el Barcelona Regal (+109) y el Real Madrid (+102), primero y segundo clasificados de la Liga Endesa, mejoran el balance del equipo que dirige Chus Mateo.

Aunque a día de hoy tanto el equipo valenciano como el vitoriano son los rivales más directos, tampoco conviene perder de vista cómo responderá el Real Madrid ahora que va a perder a Rudy Fernández e Ibaka, por no hablar de un Caja Laboral que tendrá que realizar hasta tres modificaciones en su plantilla, una vez que se ha resuelto el conflicto laboral que mantenía suspendida la temporada en la NBA.

En este sentido, el Unicaja parte con ventaja. Su plantilla está perfectamente asentada y con los roles definidos. El ambiente en el vestuario es excelente, como lo demuestra el hecho que todos los jugadores celebraron tras el partido la victoria ante el Caja Laboral en un conocido restaurante. En breve contará con un elemento más en el juego interior con la incorporación de Lima. Definitivamente, la tendencia del equipo es muy al alza. Algo de lo que no pueden presumir otros equipos.

A por ellos Málaga.

ojalá consigamos la victoria mañana

El pasado verano, cuando se asoció el nombre de Tremmell Darden con el del Unicaja, los aficionados se sorprendieron. No era un jugador de primer nivel europeo, al menos por nombre, y tampoco había jugado en la NBA. ¿A quién había fichado el Unicaja? Chus Mateo y Manolo Rubia, entrenador y director deportivo, respectivamente, sí lo sabían. Ambos viajaron casi en secreto a Francia en dos ocasiones para verlo en directo. Hasta ese momento solo tenían referencias numéricas y algunos vídeos. Poco más. Hoy, cinco meses después de su fichaje, es el único jugador de la plantilla que ha formado parte del quinteto titular en todos los partidos que ha jugado el equipo hasta el momento (15). Pero además es el que más minutos disputa. Es decir, es básico para Chus Mateo.

El alero ha hecho pleno en la Liga Endesa (9) y en la Euroliga (6). En la competición española comparte liderato con el croata Zoric, mientras que Freeland es tercero (7). En Europa, solo el pívot inglés y Darden son indiscutibles en los planteamientos de Chus Mateo. En cualquier caso, el quinteto tipo del Unicaja cuando lo han respetado las lesiones ha sido el formado por Rowland, Fitch, Darden, Freeland y Zoric. Entre Liga y Euroliga, Darden es el que más minutos acumula en la pista, con una media de 27:19, poco más que Freeland (26:54).

Sin ser una estrella ni destacar en alguna faceta concreta del juego, este alero 'pequeño' de 1,94 metros y 29 años es una de las sensaciones de la Liga. Siempre regular, tiene e encantados a los técnicos y ha logrado integrarse perfectamente en el vestuario. El segundo entrenador del Unicaja, Paco Aurioles y el preparador físico del equipo, son conscientes de que nada en el juego de Darden es casualidad. Los dos explican algunas de las claves del hombre de confianza de Chus Mateo.

Lo primero que llama la atención de Darden es su físico. Sin ser muy alto para la posición de alero es capaz de jugar en posiciones interiores. El estadounidense es consciente de que para aprovechar cualquier ventaja en la pista debe estar siempre al cien por cien, por eso sigue una severa línea de trabajo. «Es evidente que estamos ante un jugador muy atlético, pero la clave es que tiene un cuerpo trabajado -explica Enrique Salinas-. Darden sigue un protocolo de preparación física diario y nunca lo descuida. Para él tiene una importancia vital. Llega una hora antes de cada entrenamiento para empezar y, cuando acabamos, el se queda una hora más. Es decir que si nosotros hacemos dos sesiones de trabajo físico a la semana, él hace el doble, cuatro. Eso es una gran diferencia respecto al resto. Hasta ahora solo ha tenido una lesión en la temporada, en el aductor, y nos sorprendió porque es una zona que trabaja casi a diario», afirma el preparador físico del equipo.

Pero si su capacidad física salta a la vista, de hecho es raro que algunas de sus jugadas no sean elegidas cada semana entre las mejores de la Liga Endesa y la Euroliga, no menos importante es su presencia táctica en cada partido y su aportación al juego del equipo, algo que conoce bien Paco Aurioles, segundo de Chus Mateo. «La verdad es que no lo conocíamos mucho porque el único que lo había visto jugar era Chus. Lo que más me llama la atención es lo eficaz que es en todo lo que hace. Me atrevería a decir que busca la excelencia tanto física como táctica. Todo lo hace al cien por cien. Cuando llega comienza a calentar siempre con dos balones y cuando acabamos, independientemente de que hagamos tiro o no, el realiza una rutina de lanzamientos. Primero más cerca del aro, luego en movimiento, tiro con bote, luego en movimiento hacía atrás para lanzar de tres y jugadas al poste bajo. Trabajar tanto y hacerlo siempre al máximo le lleva a cometer muy pocos errores en los partidos. Ese alto grado de exigencia lo lleva a ser más eficaz. De hecho, tira mejor en los partidos, que en los entrenamientos, y es así porque siempre esta concentrado al cien por cien. Luego sube y baja el campo igual de rápido, tanto si tiene el balón como si no. Por otro lado, es un tío muy humilde que no necesita ser el centro de atención. Se ha integrado perfectamente», valora el segundo técnico del Unicaja.

Como se puede comprobar, todo son parabienes para este jugador nacido en Inglewood California, de profundas convicciones religiosas y que ya es uno de los ídolos de la afición.

EMILIO FERNÁNDEZ El impresionante Zalgirio Arena, con capacidad para más de 15.000 espectadores, espera mañana la visita del Unicaja, que se estrena en este moderna instalación en la que la España de Sergio Scariolo y Pau Gasol se proclamó campeona de Europa el pasado verano.

Inaugurado el pasado 18 de agosto con un amistoso entre Lituania y la propia selección española, el que pasa por ser uno de los mejores pabellones de Europa sustituye al vetusto Darius y Girenas, con capacidad para poco más de 5.000 espectadores, cancha hasta esta temporada del Zalgiris en la máxima competición continental.

El Zalgirio Arena es el pabellón deportivo más grande tanto de Lituania como de los tres países bálticos, con un aforo exacto para partidos de baloncesto de 15.442 espectadores, que para conciertos puede aumentar hasta 17.500 y que para partidos de voleibol, balonmano y hockey supera ampliamente los 13.000.

El impresionante pabellón precisó tres años de obras, una inversión de 50 millones de euros y está construido en una isla sobre el río Neman (Nemuna), muy cerca del centro de la ciudad báltica. A pesar de que el pabellón acaba de inaugurarse, está prevista una ampliación en zonas superiores que podría llevar la capacidad hasta 17.500 plazas para choques de básket.

El Zalgirio Arena es «hermano» del pabellón en el que juega sus partidos de la NBA Detroit Pistons. El arquitecto jefe del proyecto fue Eugenijus Miliunas­, pero el diseñador del espacio y mano derecha de Miliunas es Algimantas Bublys, arquitecto lituano residente en EEUU y con estudio en Michigan, que diseñó el Palace de Auburn Hills: la amenazante caldera de los Pistons. Bublys proyectó el Zalgiris Arena como un hermano más joven de la cancha de Detroit, abierta en 1988 y con capacidad para 21.454 espectadores.

Kaunas, la segunda ciudad del país

Con 400 mil habitantes, Kaunas es la segunda ciudad más grande Lituania, tras su capital, Vilnius. Está situada en la confluencia de los ríos Nemunas y Neris. De todos los países bálticos, Kaunas es la ciudad que más porcentaje de habitantes locales tiene (93 %). Más que la capital, Vilnius. Y tiene más lituanos que letones tiene Riga, capital de Letonia.

El Unicaja estrena cancha, pero es ya un clásico en las visitas a Kaunas, ciudad en la que ya ha jugado en cuatro ocasiones, con un balance de tres derrotas y una sola victoria. El 9 de marzo de 2006, el Unicaja ganó al Zalgiris por 66-79. De aquella tarde de hace ya casi cinco años sólo sobreviven en el equipo Berni Rodríguez y Jorge Garbajosa, que firmó un espectacular 37 de valoración después de anotar 22 puntos, capturar 11 rebotes y recibir 8 faltas personales.

Kaunas es famosa por su casco histórico. Aunque a nivel económico es más pobre que Vilnius, se caracteriza por tener un ambiente más universitario ya que hay cinco universidades. Actualmente Kaunas posee más de 30 museos y algunos son de los más heterodoxos, como el Museo del Diablo, que reúne más de 3.000 estatuillas y caretas con la imagen de diablillos.

Uno de los medios de transporte público es la conservación del funicular del siglo pasado. Además de los económicos trolebuses, autobuses y taxis. La ciudad tiene una infraestructura de servicios bastante desarrollada: hoteles y albergues, cafeterías y diversos espacios para el ocio.

Lástima que no se ganó los otros dias. Hay que echar el resto allí jejejejeje

Es un partido muy muy importante, siempre me gustó el Zalguiris porque siempre he sido fan super ultra de Sabonis.

a ver que hacemos esta tarde

Sin Rowland, Chus Mateo ha tirado del norteamericano Mark Payne del equipo filial. Mateo tratará de aprovechar el esterlar momento de ‘CurroValters de Letonia’. El base letón alterna momentos increíbles con decisiones arriesgadas. Será el faro malagueño en la casa de Sabonis.

Atajar camino hacia el Top 16 o abonarse a un sufrido tramo final de primera fase. Básicamente esa es la elección que el Unicaja debe tomar esta tarde en Kaunas (18:45, Canal 2 Andalucía). Ganar en casa del Zalgiris significaría poner pie y medio en la segunda ronda y acercarse así al objetivo en la máxima competición europea. Perder obligaría a un apretado sprint final.

Los enfrentamientos que depara esta séptima jornada ayudan a convertirla en trascendente. Los dos perseguidores del equipo malagueño, Brose Baskets (cuarto) y KK Zagreb (quinto), que se encuentran a un sólo triunfo, se miden a los dos gallitos del grupo (CSKA y Panathinaikos, respectivamente), por lo que un triunfo cajista unido a sendas derrotas alemana y croata otorgaría un colchón de dos triunfos a falta de tres jornadas.

Pero nada de lo que suceda, también esta tarde-noche, en Bamberg (20:45) y Atenas (21:00) está en manos del Unicaja. Los de Chus Mateo tienen bastante con saltar al parqué del suntuoso Zalgirio Arena y lidiar con el campeón lituano. El Zalgiris es el colista del grupo B y, con los números en la mano, uno de los tres peores equipos de la Euroliga (el Asseco Prokom aún no ha ganado y el Belgacom Spirou iguala su pobre balance de 1-5), pero no hay que engañarse. Su plantilla está hecha para entrar en el Top 16 y, quizá, para algo más. Acudió, de hecho, a Málaga hace varias semanas como uno de los mejores Zalgiris de los últimos años y obligó a los malagueños a ir hasta la prórroga antes de ser derrotado. El calendario no le ha ayudado, con sólo dos encuentros en casa en las seis primeras jornadas, y el de hoy será el primero de los tres partidos que disputará en el Zalgirio Arena en las cuatro últimas jornadas. El serbio Aleksandar Trifunovic ejerce desde hace días como nuevo técnico, contará con Dejuan Collins, que se ha recuperado a tiempo de una lesión, y dispondrá por última vez de Ty Lawson antes de que el norteamericano regrese a la NBA.

El escenario donde la selección española se proclamó campeona de Europa hace un par de meses recibe, sin embargo, a un Unicaja en proceso de autoafirmación. Las dudas estivales han dado paso a un equipo extremadamente competitivo, capaz de ganar con solvencia a domicilio, de poner contra las cuerdas al campeón de Europa y de batir a rivales de primer nivel. Mateo y sus ayudantes están consiguiendo exprimir al máximo el potencial que tienen en sus manos bajo la ley del compromiso y el esfuerzo. La plantilla se lo está creyendo y este exigente último tramo de competición ha demostrado que se puede pelear de tú a tú con los mejores.

Habrá que luchar de nuevo con la baja de Earl Rowland, en Málaga recuperándose de su lesión muscular en el psoas de la pierna derecha, lo que supone un gran inconveniente ante el peligroso juego exterior lituano (Popovic, Lawson, Delininkaitis, Kalnietis...). Ahí estarán Valters y Berni, brillantes la semana pasada, para que no se note. Zoric está en su mejor momento desde su llegada a Málaga, Fitch comienza a ofrecer síntomas claros de recuperación y a Freeland, que comenzó la temporada como un tiro, le toca una buena actuación después de varios partidos por debajo de nivel. Hay argumentos suficientes como para pensar que el Unicaja elegirá el atajo que conduce hacia el Top 16.

RAFAEL M. GUERRA 10.000 pies de altura. 840 km/h. Centro de Europa. Eduardo García, acostumbrado a dar la cara en las «maduras», habla también cuando el viento sopla de cara. Y que dure...

¿Cuál es el actual estado de salud del Unicaja Baloncesto?

En la vertiente deportiva estamos muy contentos con los resultados del primer equipo y ni mucho menos estamos frustrados por la situación del equipo de LEB Oro. Son niños que acaban de salir de edad júnior o que aún lo son, y es muy difícil, pero se irán formando. En la cantera estamos haciendo un trabajo encomiable. Y en la vertiente económica acabamos de acometer unas obras importantes en Los Guindos, adecuando el gimnasio y los vestuarios a la modernidad. Ahora son unas instalaciones acorde a la importancia de Unicaja.

15 partidos disputados ya, con 10 triunfos y 5 derrotas. Si lo deportivo va bien, como así es, se dice que el resto marcha sobre ruedas...
Hasta ahora estamos muy contentos. La ilusión de los aficionados se ha trasladado a la pista. Los jugadores son los grandes protagonistas y están muy implicados en el club y en nuestro proyecto.

La Copa del Rey es una espina que se ha clavado en los dos últimos años y que ahora está a tiro de una o dos victorias.

El primer objetivo era estar en la Copa del Rey y parece, si no hay ninguna cosa rara que nos pueda apartar, que podemos estar ahí. Estamos haciendo todos los méritos para estar. Y ésa es nuestra obligación.

¿Pasa el acceso al Top 16 de la Euroliga por ganar en Kaunas o piensa que quedan balas guardadas antes Brose o en Zagreb?

Nuestro objetivo es estar al menos en el Top 16, igual que estar en la Copa del Rey, al menos; y estar en los play off de la Liga, al menos. De ahí para arriba todos son objetivos difíciles, pero alcanzables para nuestro equipo.

¿Le ha dado el anunciado comienzo de la NBA la razón al club en el tema del lockout y la negativa a fichar a jugadores temporales procedentes de la NBA?

Teníamos las ideas muy claras: hemos hecho un equipo donde todos son importantes y juegan sus minutos, con un ambiente perfecto entre todos los jugadores. Traer ahora a un NBA por 15 días únicamente nos llevaba a distorsionar el vestuario y su dinámica. Por eso tomamos la decisión de no hacerlo. Si no se hubiese levantado el cierre patronal, en ese caso, sí nos lo habríamos planteado en su tiempo. Pero ahora no era el momento. Nos lo planteamos, como todo en este club. Nosotros estudiamos cada opción, casa posibilidad, en jugadores, entrenadores, situaciones económicas... y luego adoptamos el criterio que creemos más prudente y racional. Y actuamos sin ninguna fisura en el tema del lockout porque fue lo más racional.

En caso de que haya alguna lesión importante o un problema de bajo rendimiento de algún jugador del plantel, ¿saldría el club al mercado?

Nunca se sabe lo que puede ocurrir, pero nosotros tenemos una plantilla de 24 jugadores. Yo sé que estas cosas no le gustan mucho a nuestro entrenador, pero tenemos un equipo en LEB Oro que es profesional, aunque sea de chavales jóvenes, pero con futuro.

La renovación de Sinanovic es uno de los temas candentes. ¿Cómo marcha la negociación?

Sinanovic es un jugador de la casa y él se siente de la casa, me consta. Su trabajo es el que vale y hay que reconocérselo. También es verdad que nosotros le hemos apoyado en todo momento, cuando era un jugador que estaba en mercado. El entrenador, el director deportivo y yo personalmente hemos apostado por él. Hoy día está en el nivel que está y se lo merece. Tenemos interés en que siga con nosotros. Estas cosas siempre van para largo plazo, aunque esperamos culminarla pronto, pero no depende sólo de nosotros.

¿Qué pasa con Tripkovic?

Tiene una lesión congénita, no producida por la práctica en nuestro club, que se agravó con su estancia en la selección, y eso es una apreciación mía. Y en este momento no encaja por cuestión de cupos y por la estructura del equipo. Su agente nos propuso una salida del club, una rescisión de contrato. Ellos hicieron una oferta y nosotros una contraoferta y seguimos sin contestación. Su lesión es similar a la de McIntyre y puede llegar a los 34 años, como él, sin operarse. Los médicos deben valorarlo. Pero éste no es el momento de decir si tiene o no que pasar por el quirófano, porque hoy mismo podría recibir el alta. Él tiene que cumplir unas normas que están recogidas en su contrato. Le estamos respetando su contrato y él debe cumplirlo. Y nada más. Si él quiere llegar a un acuerdo, como nos propusieron, se llegará, y si no, pues nada.

Ha vuelto la comunión al Carpena, pero sigue sin llenarse a pesar de las numerosas campañas promocionales. ¿Preocupado?

Estamos poniendo todos los granitos de arena para que el Palacio esté lleno, tanto el club como el equipo: los resultados y el juego están ahí, y hemos lanzado campañas y promociones de abonos. Ya sólo falta que nuestro público vuelva a asistir al Carpena con la ilusión de siempre. Hemos tenido críticas, pero le hemos dado un giro al equipo. El 90 por ciento de la gente, incluidos grandes entendidos de la materia, creían que no habíamos hecho un buen equipo. Pero parece que los resultados no les están dando la razón y sí a nuestros técnicos y profesionales que han hecho posible este equipo, con este juego colectivo tan competitivo, con garra, con hombres y no nombres.

El entrenador del Unicaja, Chus Mateo, quiso ser cauto en su análisis previo del partido, pese a que el cuadro malagueño parte como favorito esta tarde ante el Zalguiris. «Es un equipo con mucha calidad, con muy buenos jugadores, cuentan con dos exNBA, Weems, que permanecerá aunque haya acabado el 'lockout' y Lawson, que aún jugará contra nosotros, y luego tiene lituanos de muchísima calidad como Javtokas, Kalnietis, Jankunas. o también tienen a Popovic, que genera mucho», sostuvo el madrileño.

«Tiene un equipo realmente peligroso -continuó su argumentación-. Hasta ahora solo lleva una victoria, y entiendo que quiere hacer algo más de lo que está haciendo hasta ahora, así que no va a ser un partido ni mucho menos fácil, en una cancha que los lituanos abarrotan con quince mil espectadores».

Valters completó en Málaga ante el Zalguiris su mejor anotación con la camiseta del Unicaja, veinte puntos, y en los últimos partidos se ha mostrado a un gran nivel, lo que admitió ayer Mateo: «Estoy muy contento con todos (los jugadores), aunque hay algunos que efectivamente están teniendo un protagonismo grande en los últimos días, entre ellos Valters».

Por su parte, el alero de la plantilla Saúl Blanco se pronunció en una línea parecida a la de su entrenador. «Podemos dar un paso adelante y estar un poco más cerca del 'Top 16'. La idea es seguir en Kaunas en la línea de la última semana, en la que hicimos dos buenos partidos, con una victoria importante ante el Caja Laboral y una derrota ante el Panathinaikos que nos dolió solo por la forma en que se produjo».

Finalmente, el entrenador del Zalguiris, Aleksandar Trifunovic, declaró: «Estamos ante un partido muy importante. Ganar nos dejaría en el camino hacia el 'Top 16' sin tener que depender aún de otros equipos». Respecto al Unicaja, dijo que es «un buen equipo, con una amplia rotación y que lo está haciendo realmente bien en su torneo local, pero que no ha asegurado aún su clasificación para la siguiente fase».

PEDRO LUIS ALONSO plalonso@diariosur.es | MÁLAGA..-

El Unicaja puede adquirir esta tarde en Kaunas tres cuartas partes del billete para su acceso al 'Top 16' de la Euroliga, la cita ineludible con la aristocracia europea. Un hipotético triunfo en tierras lituanas, unido a las factibles derrotas del Brose Baskets y del KK Zagreb en sus respectivos partidos de hoy, dejaría al conjunto entrenado por Chus Mateo con dos triunfos de margen a falta de tres jornadas. Es decir, con pie y medio en la siguiente fase de la competición.

Sin embargo, haría bien el conjunto malagueño en aparcar las cuentas de la lechera, porque tiene argumentos para ello. Para empezar, el choque disputado en el Palacio de los Deportes frente al Zalguiris, que de momento es el más débil del grupo (un balance de 1-5), se le atragantó sobremanera. Tuvo que reponerse de una desventaja que llegó a ser de hasta once puntos en el primer tiempo. Incluso, hubo que pasar por un periodo añadido para sentenciar un triunfo con un tanteo engañoso (85-75).

La desesperada situación del Zalguiris esta tarde, ya a las órdenes de Aleksandar Trifunovic, lo convierte en un rival especialmente peligroso, obligado a agarrarse a un clavo ardiendo. Sus remotas opciones de clasificación pasan por ganar hoy, sin el concurso de su escolta DeJuan Collins. Tampoco es muy halagüeño su futuro a corto plazo ante la inminente marcha de Law-son a la NBA por el comienzo de la temporada. Al menos, su máximo anotador (17,8 puntos de media), Sonny Weems, firmó un contrato garantizado por un millón de euros y seguirá en la entidad que preside Arvydas Sabonis.

En todo caso, el Unicaja confía en ser fiel a la evolución de los resultados en un grupo, el C, que está ofreciendo pocas sorpresas en las seis jornadas disputadas. Con dos claros candidatos a la 'Final Four', el CSKA de Moscú y el vigente campeón, el Panathinaikos, situados en un nivel superior, y el cuadro cajistacomo el tercero en discordia. De hecho, solo en una ocasión alguno de estos tres conjuntos ha sufrido la derrota ante cualquiera de los otros, cuando el Panathinaikos cedió en Alemania ante el Brose Baskets.

Jugando en tres canchas

Fiel a estos precedentes, cabe pensar que horas después del final del partido en Kaunas se dé la victoria del CSKA en territorio teutón y el del Panathinaikos en Atenas ante el KK Zagreb. Esto podría dejar al Unicaja con cuatro triunfos, dos más que los cuadros alemán y croata y tres más que el lituano con tres jornadas por disputarse, dos de ellas con partidos en Málaga.

Las cuentas del Unicaja pasan en todo caso por imponer esta tarde su mejor batería interior, y se espera a un Freeland en mejores condiciones físicas que la semana pasada. El cuadro máximo reboteador de la Euroliga (37,8 rechaces por partido) debe hacer valer su autoridad bajo la canasta. Otra cosa es el poderío exterior local, con excelentes tiradores como Delininkaitis, el croata Marko Popovic o los mencionados norteamericanos Lawson y Weems.

Será una tarde especial para Valters, en un gran momento de juego y obligado a asumir más responsabilidad ante la ausencia de Rowland. El entorno familiar del letón y muchos amigos harán el trayecto desde Riga (su ciudad natal) hasta Kaunas, poco más de 200 kilómetros, para seguirle in situ en el coqueto Zalguirio Arena. Asimismo, Garbajosa está a solo cuatro rebotes de sumar 800 en la competición continental.

La expedición del Unicaja partió ayer al mediodía en un vuelo chárter, la primera vez que opta por esta fórmula de viaje en la presente Euroliga, y se quedó en el hotel Best Western Santaka de Kaunas. Entre los concentrados figura el jugador del Clínicas Rincón Mark Payne, que aún no ha debutado oficialmente en la competición pero ya es su segunda convocatoria. Será el tercer choque sin Rowland.

Ya ha empezado el duelo jejejeje

Hemos palmado por 67-65

una pena

no pudo ser... un mal partido pero tenemos opciones todavía.

con que hubiéramos estado un poquito más acertados en ataque ganamos tranquilamente

Qué partido tan malo. Qué derrota tan hiriente. Qué oportunidad desperdiciada para haber puesto pie y medio en el Top 16. Qué indulgente el Unicaja, que dio vida a un Zalgiris moribundo que ya se veía fuera de la Euroliga. Qué temple para mantener el tipo en un encuentro horrendo y no perder la fe en la victoria. Qué reacción en los últimos minutos para dar la vuelta al marcador y ponerse por delante por primera vez en el partido. Qué mal desenlace, fallando una canasta bajo el aro en la penúltima posesión y eligiendo la peor opción en la última.

La mejor versión del Unicaja, la que dio la cara en Moscú, se exhibió en Alicante, puso contra las cuerdas al campeón de Europa y tumbó al Baskonia, no compareció en el Zalgiris Arena de Kaunas. Se quedó en Málaga y mandó en su lugar a su peor versión de la temporada. Un Unicaja errático, incapaz de aprovechar las dudas de un equipo atenazado por los nervios que afrontaba su última oportunidad para engancharse a la Euroliga. Un Unicaja que peleó casi todo el partido sin Freeland, otra vez muy por debajo de su nivel, y que, por primera vez este año, no tuvo el sostén que supone Darden (sorprendente -7 de valoración). Tampoco contó con Sinanovic (sólo dos minutos y medio de juego tras cargarse con faltas). Y esta vez, ni Berni ni Peric acudieron al rescate. Se salvó Zoric, otra vez Zoric, al que sin embargo Chus Mateo relegó al banco en el último cuarto, un emergente Fitch y momentos puntuales de Valters.

Con tal panorama, lo lógico hubiese sido haber encajado una derrota mayúscula, pero los malagueños se toparon con el peor Zalgiris que se ha visto en años. Un duelo en el que se trataba de dilucidar quién era el menos malo. El majestuoso Zalgirio Arena y los 12.400 lituanos que poblaban la grada se frotaron, sin embargo, las manos ante el avasallador comienzo de los suyos. Parecía solucionado el mal endémico de las puestas en escena. No sucedió, salvo ante el PAO, en los últimos partidos, pero lo de ayer recuerda que sigue sin superarse. En 4 minutos y 40 segundos, el Unicaja encajó un imperdonable parcial de 10-0 que obligó a Mateo a parar el partido después de ver cómo su equipo desperdiciaba sus primeras nueve posesiones. Era justo lo que no había que hacer ante un equipo desesperado.

Mateo cambió en un instante el cinco en pista y el Unicaja comenzó a meterse en el partido. Poco a poco, de la mano de Valters y las primeras canastas de Freeland, fue metiéndose en el encuentro (27-22). Tuvo opciones ahí de igualarlo del todo y ponerse por delante, lo que seguramente hubiese servido para comenzar a ganar la batalla anímica. Pero perdonó y el Zalgiris revivió con una nuevo parcial, este de 8-0, que le llevó hasta los 13 de diferencia antes del descanso (35-22).

La desventaja se fue pronto hasta los 14 (40-26) y ahí comenzó el equipo malagueño su particular escalada. Punto a punto, comenzó a creer de verdad que podía llevarse el triunfo cuando Garbajosa acertó de tres en la primera acción del último periodo (50-45). Weems, imparable ayer tanto para Darden como para Peric, obligaba a un nuevo esfuerzo (60-50), y el Unicaja respondió con sus mejores minutos ofensivos. Recobró, por un momento, la inspiración, movió bien el balón y encontró un par de tiros abiertos de Fitch y Valters que remató Freeland con un mate en carrera (60-58). El Zalgiris era un flan. El inglés, que apareció al final, dio la primera ventaja visitante (63-65) y Popovic igualó desde la línea de tiros libres (65-65).

Ahí encalló definitivamente el Unicaja. Tuvo medio partido en su mano Peric, que falló debajo del aro a poco más de un minuto y que en la siguiente jugada no pudo evitar que anotara Weems. Y no supo rematar esta vez Valters. El letón erró un triple en la siguiente acción y fue el encargado de decidir en la última posesión. Mateo quería castigar la defensa de Popovic y se quedó en el bloqueo con Javtokas. Le encaró, le fintó el tiró, penetró y se jugó un tiro muy forzado que no entró. Quizá, el Unicaja no se merecía otra cosa que salvar el average particular con los lituanos.

RAFAEL MOLINA GUERRA Chus Mateo estaba ayer triste. Y lo admitió. No es fácil que un entrenador transmita públicamente esa frustración. Hay siempre mil excusas, mil palabras para despejar preguntas incómodas. Pero el madrileño admitió ayer el equipo no estuvo fino, que fue «muy blando», que no se pasó el balón, pero que a pesar de todo se le «dio la vuelta al partido».

«Deportivamente sacar el average es un punto a favor, pero nosotros deportivamente siempre aspiramos a ganar. Cuando íbamos 14 abajo pues perder por dos y sacar el average no estaba mal. Pero no nos conformamos y tuvimos la opción de la victoria, y la hemos dejado escapar. Por eso estamos tristes, por el resultado final, pero no lo estamos porque sacamos el orgullo, en un campo que no es fácil para nadie. Esto es Euroliga, un partido de la máxima disputa y ellos se han llevado el gato al agua, pero tuvimos nuestra opción. Y lo importante es que sigamos teniendo esas opciones al final de lograr la victoria», resumió el preparador verde.

«Saco positivo, además del average, el orgullo que ha mostrado el equipo, que ha peleado en unas condiciones realmente complicadas y adversas, y hemos vuelto al partido, incluso dándole la vuelta por completo. Hemos fallado alguna canasta de bajo al final que podía haber sido decisiva. Pero sabíamos que esto iba a ser duro. Y lo está siendo más si cabe, porque las últimas derrotas en la Euroliga han sido en las últimas jugadas y por muy poca diferencia y sólo podemos seguir trabajando».

La última jugada del partido, como frente al Panathinaikos, volvió a ser clave. Mateo ideó una jugada para Valters, en la que podían darse múltiples escenarios: «Hemos diseñado una jugada en la que generábamos una ventaja y desde ahí podíamos pasar, hacer una continuación, finalizar debajo del aro, tirar de tres... la lectura quizá no haya sido la mejor, pero es una jugada más del partido. Hay que tener valentía y osadía y tener la clarividencia justa para elegir lo mejor».

Mateo entonó el mea culpa porque el equipo firmó una primera mitad horrible. «A veces los partidos no son tan brillantes ni bonitos como nosotros quisiéramos y éste comenzó mal, estuvimos muy blandos, y esa desventaja nos hizo pelear muchísimo para entrar en el partido».
El técnico hizo autocrítica: «Hemos de ser duros y tenemos que luchar más en un campo de Euroliga fuera de casa, porque no acabábamos contra lo que supuestamente pensábamos que era contacto, que podía ser falta, pero que no te van a pitar nunca en un campo de Euroliga. Debemos ser más duros, saber jugar estos partidos fuera de casa. Sólo jugamos bien al final y antes dimos demasiadas ventajas».