EFE La Policía Nacional ha detenido en Málaga a siete miembros de un grupo organizado, que ha permitido esclarecer una veintena de robos en vehículos, domicilios y hurtos en la costa mediterránea.
Esta organización estaba especializada en robos en carreteras por el método del pinchazo, que consistía en manipular las ruedas de los coches que se encontraban estacionados en las áreas de servicio de las autopistas para posteriormente salir tras ellos e indicarles la incidencia, según una nota de la Policía Nacional.
De esta forma, engañaban a los conductores para que detuvieran sus vehículos y se bajaran a comprobar el pinchazo con el objetivo de aprovechar ese momento para cometer los robos.
Además, son presuntos autores de otros delitos como robos con fuerza en domicilios -en ausencia de sus moradores-, hurtos, receptaciones, estafas y blanqueo.
Los arrestos se han producido dentro de la operación denominada "Pinchazo", que en una primera fase supuso la detención a finales de septiembre de dieciocho personas en Alicante a las que se les imputaron cuarenta delitos.
En esta segunda fase, la Policía ha realizado en Málaga siete nuevos arrestos de seis personas de nacionalidad rumana y un italiano.
Los agentes también han registrado tres domicilios en los que han intervenido 3.000 euros en efectivo, 1.000 libras esterlinas, 1.000 dólares, numerosas joyas, veintidós relojes de diversas marcas y más de una veintena de teléfonos móviles, además de gafas y complementos.
Los componentes del grupo desarticulado trabajaban en "brigadas" distribuidas por diferentes zonas y se asentaban en zonas marginales en la localidad de Catral, en la ciudad de Alicante y en la provincia de Málaga.
En algunas ocasiones, fracturaban directamente las ventanillas de los vehículos estacionados en las zonas de descanso con objetos contundentes para utilizarlos contra las víctimas en el caso de ser sorprendidos.
El grupo actuaba fundamentalmente por la noche, utilizaba vehículos de alquiler o previamente sustraídos para evitar ser identificados y sus principales objetivos eran turistas extranjeros.
La operación ha sido desarrollada por agentes del Grupo de Robos de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central; del Grupo I de Crimen Organizado de la Unidad de Delincuencia y Crimen Organizado (UDYCO) de Alicante; del Grupo de Robos de la UDEV de Málaga, de la Brigada Local de Policía Judicial de Denia y de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana y Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de Alicante
Esta organización estaba especializada en robos en carreteras por el método del pinchazo, que consistía en manipular las ruedas de los coches que se encontraban estacionados en las áreas de servicio de las autopistas para posteriormente salir tras ellos e indicarles la incidencia, según una nota de la Policía Nacional.
De esta forma, engañaban a los conductores para que detuvieran sus vehículos y se bajaran a comprobar el pinchazo con el objetivo de aprovechar ese momento para cometer los robos.
Además, son presuntos autores de otros delitos como robos con fuerza en domicilios -en ausencia de sus moradores-, hurtos, receptaciones, estafas y blanqueo.
Los arrestos se han producido dentro de la operación denominada "Pinchazo", que en una primera fase supuso la detención a finales de septiembre de dieciocho personas en Alicante a las que se les imputaron cuarenta delitos.
En esta segunda fase, la Policía ha realizado en Málaga siete nuevos arrestos de seis personas de nacionalidad rumana y un italiano.
Los agentes también han registrado tres domicilios en los que han intervenido 3.000 euros en efectivo, 1.000 libras esterlinas, 1.000 dólares, numerosas joyas, veintidós relojes de diversas marcas y más de una veintena de teléfonos móviles, además de gafas y complementos.
Los componentes del grupo desarticulado trabajaban en "brigadas" distribuidas por diferentes zonas y se asentaban en zonas marginales en la localidad de Catral, en la ciudad de Alicante y en la provincia de Málaga.
En algunas ocasiones, fracturaban directamente las ventanillas de los vehículos estacionados en las zonas de descanso con objetos contundentes para utilizarlos contra las víctimas en el caso de ser sorprendidos.
El grupo actuaba fundamentalmente por la noche, utilizaba vehículos de alquiler o previamente sustraídos para evitar ser identificados y sus principales objetivos eran turistas extranjeros.
La operación ha sido desarrollada por agentes del Grupo de Robos de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central; del Grupo I de Crimen Organizado de la Unidad de Delincuencia y Crimen Organizado (UDYCO) de Alicante; del Grupo de Robos de la UDEV de Málaga, de la Brigada Local de Policía Judicial de Denia y de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana y Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de Alicante