Los de Pellegrini están destrozando los registros de Ferreira con 13 puntos sumados por los 7 del año pasado
Cualquier tiempo pasado no fue mejor en el Málaga. Y a las pruebas nos remitimos. Se viven días de vino y rosas en la Costa del Sol. Alegría, euforia y felicidad. El Málaga se codea con la élite de España, a expensas de hacerlo en un futuro no muy lejano con la jet set internacional. Navega por posiciones europeas con aplomo y acomodado. Y afronta el parón liguero en la cuarta posición de la clasificación, que acredita a disputar el curso que viene la previa de la Liga de Campeones.
Ésas son las sensaciones, pero lo cierto es que el conjunto blanquiazul está batiendo todos los registros habidos y por haber en su corta historia como Málaga CF. Y también está pulverizando los recuerdos del extinto CD Málaga. Su arranque de Liga ha sido fulgurante y nada tiene que ver con las anteriores épocas malaguistas.
Dicen que las comparaciones son odiosas y no sería justo medir con el mismo baremo al Málaga de Tapia o de Muñiz que al nuevo club gestado tras la llegada del jeque y su inversión, que a la postre ha servido para jugar un papel decisivo en la historia malaguista.
La comparativa o la puesta en marcha del cuentakilómetros se inició cuando Jesualdo Ferreira se puso al volante de la nave blanquiazul tras una primera inversión inicial considerable y muy superior a lo vivido por Martiricos en todos los tiempos. A partir de entonces, el Málaga potencialmente era un equipo nuevo, pero arrastraba los males del pasado.
Es por eso que los frutos han tardado en verse hasta casi un año después. La comparativa con el curso pasado es todo un reflejo de cómo ha evolucionado el nuevo Málaga, que arrastra la dinámica ganadora del final de temporada anterior y ya ha olvidado la herencia de sus penurias económicas.
Así, el Málaga de Pellegrini en apenas seis partidos –el pasado fin de semana se disputó la jornada siete, pero el primer encuentro de Liga fue retrasado por la huelga de los jugadores- ha conseguido igualar el número de puntos cosechados el curso pasado en catorce jornadas. Es decir, que el Málaga 2.0 ha necesitado menos de la mitad de partidos para hacer los mismos puntos que el Málaga 1.0.
Es más, el curso pasado, el Málaga cosechó 17 puntos en la primera vuelta, por lo que el actual conjunto de Pellegrini ya ha sumado el 76 por ciento de los puntos logrados la edición anterior en los primeros 19 partidos de Liga.
Las conclusiones en ese aspecto son claras y es que el Málaga se sale este curso. La temporada pasada, durante los seis primeros partidos de Liga, los de Jesualdo Ferreira habían cosechado 7 puntos, pero habían denotado carencias en su juego y, sobre todo, en el aspecto defensivo. El Málaga del portugués se había mostrado inoperante en casa, donde sólo había cosechado derrotas contra Valencia (1-3), Sevilla (1-2) y Villarreal (2-3). El camino totalmente opuesto al que ahora ha recorrido con tres victorias en los tres duelos de casa.
Aquel Málaga de Ferreira tampoco estaba tan alejado en la clasificación, pese a sus limitaciones. El equipo era décimo tras la disputa de la sexta jornada, aunque comenzaba su cuesta abajo hasta las posiciones más difíciles y bajas de Primera División.
Sólo hay un aspecto en el que el Málaga de Ferreira superase en sus inicios al de ahora de Pellegrini. Fue en la faceta goleadora. En los primeros seis encuentros, el equipo del luso había marcado hasta 12 goles, consiguiendo el segundo mejor arranque goleador hasta la fecha del Málaga CF tras el de Peiró en la 2002/2003 (13 goles). La verticalidad y velocidad que los blanquiazules ofrecían en el ataque les valió para cosechar muchos goles a favor, pero también para encajar demasiados tantos.
Y es que esa diferencia entre el Málaga de Ferreira y el de Pellegrini es palpable. El arranque del curso pasado se saldó con doce goles en contra, que comparados con los cuatro de este curso deja en evidencia el sistema defensivo empleado del luso.
Estrellas estelares
Claro que el nuevo Málaga también tiene a dónde agarrarse. Los fichajes de este curso son el mejor flotador para Pellegrini, al que también le costó arrancar cuando cogió al equipo a mediados del año pasado tras la destitución del técnico luso.
Los Cazorla, Van Nistelrooy, Baptista, Joaquín, Toulalan, Demichelis y demás caras nuevas son el mejor aval para el nuevo Málaga, que acabó la temporada pasada con 46 puntos. Por lo tanto, el Málaga ya suma algo más de un cuarto de puntos de los logrados el curso pasado. Parece evidente que el objetivo es algo más que la permanencia.
Van Nistelrooy se estrenó con el Málaga con un gol de auténtico ´killer
http://www.laopiniondemalaga.es/malagacf/2011/10/04/doble-puntos-curso-pasado/454512.html