El elevado nivel de las incorporaciones del Málaga hace peligrar la titularidad de Jesús Gámez, Weligton, Apoño y Duda, supervivientes del plantel de Tapia y pilares en las últimas temporadas
"Ficharemos a dos, a lo sumo tres. Entre siete y ocho fichajes está la cifra que manejamos desde que terminó la competición", decía Antonio Fernández, director deportivo del Málaga, horas antes de que se produjese el fichaje de Jeremy Toulalan. Todavía quedan puestos por cubrir, como el lateral derecho, sin recambio tras la salida de Manolo, o el extremo diestro, para el que se quiere a Joaquín. Ya son blanquiazules Diego Buonanotte, Ruud Van Nistelrooy, Nacho Monreal, Joris Mathijsen y el citado Toulalan. Internacionales que vienen a rivalizar con futbolistas clave en la marcha del Málaga en los últimos años, todos ellos supervivientes de la era Antonio Tapia, como son Jesús Gámez, Weligton, Apoño y Duda. Cuatro pilares que ya no tienen tan asegurada la titularidad pese a su papel capital también en la pasada campaña. De intocables a expectantes. La competencia se multiplica en este Málaga.
Desde el último ascenso a Primera hace tres años, estos jugadores suman más de 80 partidos en Liga con el Málaga. De 114 posibles, los cuatro han disputado la gran mayoría. Una cifra que da cuenta de su importancia para el conjunto blanquiazul. Y no es superior por culpa de diversas lesiones musculares y óseas.
El que más minutos acumula es Jesús Gámez, con 97 encuentros ligueros en las últimas tres temporadas. Le sigue Duda, con 89. Muy cerca con 86 está Weligton. Con tres menos figura Apoño. El de La Palmilla ha sido más perjudicado por los problemas físicos. Hace dos años sufrió un calvario por culpa de las lesiones musculares. El año pasado empezó renqueante, pero acabó a gran nivel.
Cada caso es distinto, pero parece que serán pocos los que contarán con un puesto garantizado en el once. Willy Caballero, Julio Baptista o Martín Demichelis, por su condición de revulsivos tras fichar el pasado invierno, sí apuntan a ser fijos. La llegada de Van Nistelrooy pone en duda que hasta futbolistas importantes como Rondón o Seba Fernández sean de la partida al inicio del curso.
El que de momento no tiene rival en su demarcación es Jesús Gámez. Con la marcha de Manolo, el Málaga sólo tiene un lateral diestro, aunque busca uno de nivel que compita con el fuengiroleño. La intención es que el que venga haga que Gámez eleve sus prestaciones. Su temporada ha sido irregular, pero nunca ha dejado de ser indiscutible. El club preguntó en su día por Bosingwa. Azpilicueta, del Olympique de Lyon, también estaba en la agenda.
Weligton, por su parte, ve cómo tiene que competir por un puesto con un subcampeón del mundo como es Mathijsen. Kris, Malagueño y Helder no le hicieron sombra durante el curso, aunque su situación puede cambiar con el holandés. Su continuidad en el Málaga, como informó este periódico hace varias semanas, tampoco está plenamente garantizada.
Apoño es otro que ha disfrutado de la confianza de Tapia, Muñiz, Jesualdo y Pellegrini. No obstante, la incorporación de refuerzos de nivel como Toulalan, que ha costado en torno a 11 millones de euros más dos por objetivos, y la llegada de un centrocampista creador (Borja Valero o Lucho González han sonado como posibles opciones) rebajaría su condición de indiscutible. Parecida situación viviría Duda, cuyo estado físico ha perdido frescura desde el Mundial, y podría verse presionado por Ricky Álvarez, al que el club pretende, y Buonanotte.
Eliseu podría ser el quinto integrante de este grupo, pero su caso merece un asterisco, ya que el zurdo disputó la campaña 2009/2010 entre Lazio de Roma y Zaragoza. El portugués siempre ha sido un habitual en el once titular, aunque Monreal le resta opciones si Pellegrini mantiene su idea de colocarle de lateral.
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