Irradia saber estar Martín Gastón Demichelis (Córdoba, Argentina, 20/12/1980). Como a Julio Baptista, no le pesan los galones ni dentro ni fuera del verde. Habla con claridad, sabiéndose una de las voces autorizadas. No en vano la defensa ha mejorado, sin olvidar a Weligton y Kris y la buena evolución coral, desde que Manuel Pellegrini le reclamó de su suplencia en Múnich. Dejó en enero un gigante como el Bayern y no se arrepiente de ello. Asegura que todo lo contrario. En el Málaga, subraya, ha callado a los que dudaban de él.

-Lástima que la salvación aún no sea haya certificado.

-Sí, a pesar de los seis puntos de ventaja sobre el Zaragoza aún tenemos que respetar las matemáticas. Estamos tranquilos, si retrocedemos a hace dos meses nadie se imaginaría esta situación. No dependemos de nadie y estamos en una situación privilegiada comparándola a la de enero o febrero.

-¿Estuvo pendiente de los partidos de Osasuna o Real Sociedad?

-Todos de alguna manera estuvimos pendientes porque significaba festejar y desahogarnos el sufrimiento. Es importante no sentir que ya está asegurado y así ir a Bilbao para hacer un buen partido.

-Falta un poco, pero supongo que no piensan en que se escape.

-No. No cabe eso ahora y tampoco hace un tiempo atrás, por eso tuvimos esta racha positiva. El equipo se fue convirtiendo en un equipo ganador, pensando sólo en la victoria. Hay que mantener esa mentalidad en las dos jornadas estas para acabar bien.

-¿Cuál cree que son los motivos para esta gran racha?

-Siempre digo que no es fácil cuando se empieza un nuevo trabajo, con un nuevo entrenador, un nuevo presidente, que es nuevo en el fútbol, y después viene un cambio de entrenador y jugadores. Lo importante es haber creído siempre que estábamos en buen camino. Somos privilegiados, dependemos de nosotros y eso no tiene precio

-¿Temió bajar en algún momento?

-En lo personal temí después de peder ante Osasuna, cuando nos quedamos últimos con 23 puntos y teníamos que ir a jugar de visitante contra la Real, que estaba arriba. La de Osasuna fue derrota dolorosa, pero aprendimos a convivir en esa dura situación, en la que todos no salen adelante. Pero una de las virtudes de este equipo es que siempre fue optimista, no bajó los brazos, creyó y a la vista están los resultados.

-Resultados que han llegado jugando bien.

-Sí. Bueno, hubo partidos complicados, pero en las últimas dos jornadas hemos marcados cinco goles y uno se divierte en el campo. No fue fácil en el Calderón, donde estaban en buena racha, ante su afición. No encajamos tampoco e hicimos una gran tarea. Más allá de las ocasiones el otro día del Sporting, no recibimos gol y eso da confianza.

-¿Mejorar en defensa ha sido la gran clave para evitar el descenso?

-Manuel [Pellegrini] siempre insistió en eso. Consideraba obviamente que si queríamos la salvación teníamos que mejorar nuestra solidez defensiva. Hace mucho hincapié en eso y corrige errores. Gracias a Dios, los resultados están saliendo.

-Caballero tiene que ver en lo de recibir menos tantos.

-Willy llegó y enseguida se supo integrar al plantel. Es una excelente persona, un gran profesional y eso se refleja en el campo de juego. Brinda mucha seguridad desde atrás. Es importante.

-En invierno se decía que se el Málaga fichaba a gente de gran nivel que nunca había peleado por no bajar. ¿Se nota el cambio?

-Sí, y creo que tanto Julio [Baptista], Enzo [Maresca] o yo tuvimos que aprender a convivir con esa circunstancia porque es desesperante. No es fácil de llevar, es estresante y desgasta mucho. Aprendimos mucho de los chicos de acá, que nos daban calma y optimismo porque justamente tenían la experiencia de que todo puede cambiar muchísimo y se resuelle al final. Todos han sido importantes, más allá de los nombres. Siempre lo digo: no sólo he crecido en lo profesional, también en lo personal. Cuando un padre intenta enseñar cosas a su hijo. También me ha hecho crecer.

-Suele destacar al vestuario.

-Hasta en las peores circunstancias, estando últimos, este vestuario nunca tuvo una pelea, nunca estuvo dividido. Siempre tuvimos mucha fuerza.

-¿Se ve uno de los líderes dentro de la plantilla?

-Siempre trato de aportar mi experiencia tanto dentro como fuera. No me siento dueño del vestuario, pero por la edad, por lo que he vivido y mi trayectoria, me gusta hablar y aportar un poco más que los chicos que empiezan.

-Como Baptista.

-Por su trayectoria y lo que representa, es uno de los responsables de que hayamos salido de esta situación. Lo perdimos un tiempo importante. No esperábamos este regreso, esperamos que siga siempre sano [risas].

-¿Y la ha sorprendido una afición tan entregada?

-No la conocía y eso que siempre he seguido la Liga Española, que siempre me divirtió y me gustó. Los hinchas me sorprendieron para bien y, si hay alguien que se merece la permanencia, son justamente ellos. No es fácil ver a tu equipo tres meses y medio abajo y encima pagar por sufrir. Es de destacar, porque la afición nunca vino a insultar, sino a sufrir, a animar, a alentar. Esperamos que ante el Barcelona tenga su regalo

-Encima le hace caso: llenó La Rosaleda ante el Sporting cuando después de decir que no quería ver ni una butaca vacía.

- [Risas] Sí, por ahí recibí alguna que otra cargada [broma] con esa frase, me dijeron los chicos que no hacía falta, pero fue muy lindo ver el campo lleno ante un rival directo ante el que necesitábamos ganar para el objetivo. Sólo puedo darles las gracias.

-El Málaga tiene una opción de compra al Bayern por tres millones de euros si sigue en Primera.

-Sí, es así. Estoy orgulloso de que eso se produzca, no fue fácil decidirse a venir. Hace seis meses estaba en un equipo de Champions, con el que jugué la final, y también un Mundial y vine a pelear por la permanencia. Estoy orgulloso por haber venido porque hoy por hoy se han dado los resultados. Recibí muchas críticas porque quizá bajé un escalón al jugar en un club que, sin deshonrarlo, estaba a acostumbrado a pelear por no bajar. Muchos me dieron por muerto. Ojalá esto termine de la mejor manera porque quiero seguir triunfando y seguir demostrando cosas.

-Entonces, ¿se ve en el Málaga la temporada que viene?

-Sí, falta muy poquito, sólo cuestiones matemático. Estoy muy a gusto acá, me gustaría quedarme muchos años y triunfar.

-¿Sueña con el futuro? Hay una base, está Pellegrini y se prevé una fuerte inversión.

-Sí, no hay nada más lindo que soñar, pero hay que ser consciente de que el objetivo aún es la salvación. Estamos concentrados sólo para conseguir más puntos. Después, haremos autocrítica en las vacaciones y en lo individual y grupal plantear nuevos objetivos, pero iremos paso a paso.

-¿Qué diferencia hay entre un club grande como el Bayern y uno que quiere crecer como el Málaga?

-Cuando vine ya dije que pocos son los clubes que tienen las ganas, la mentalidad y las posibilidades de crecer como éste. Tenemos un presidente ganador, que puede invertir. Quiere ganar y los jugadores mejorar para poder lograrlo.

-El clima de la Costa del Sol le atraerá más que el de Múnich.

-No hay color. Si esto se convierte en algo grande, creo que será el lugar donde todos quieran venir. Hay una gran calidad de vida. Si se le une un equipo grande, esto sería un sueño.

-Debutó en la ida ante el Athletic. ¿Cuál es su balance?

-El balance es muy positivo, porque cuando empecé a jugar teníamos 16 puntos. Ahora tememos 45. Los números avalan el trabajo de todos. Me da tranquilidad en lo personal, pero me dan ganas de seguir creciendo. Tengo deseo de superación. Quiero lograr bien este objetivo y después poder hacer a gran nivel la siguiente temporada.

-Toca viajar a Bilbao.

-El Athletic no está quinto por casualidad. No será un partido fácil, pero de visitantes hemos hecho grandes partidos. Vamos por buen camino, podemos hacerles frente.

Ojala siga con conosotros durante muchisimo tiempo... Grande Demichelis