El técnico es consciente de que está en juego su prestigio después de seis años en el fútbol español, así como el crecimiento del club. El chileno está más motivado que nunca para sacar al Málaga de su comprometida situación
Aquí estamos, dispuestos a pelear hasta el final». Esa frase tan elocuente corresponde al saludo de Manuel Pellegrini el pasado sábado en la flamante terminal 3 del aeropuerto de Málaga, antes de embarcar en el chárter hacia Valencia en el arranque del viaje con destino Villarreal. El entrenador chileno se encuentra ante el reto más difícil de su carrera y se le ve más motivado que nunca para sacar al Málaga del atolladero, dispuesto a rescatar al equipo de una temporada sin el rumbo deseado después de unas expectativas sumamente optimistas y una planificación desastrosa en verano.
Extremadamente discreto, sumamente correcto y cordial en el trato, Pellegrini nunca ha sido un técnico mediático. Solo en el Real Madrid tuvo que transigir, por exigencias del guion, con entrevistas nocturnas en los programas radiofónicos. Como otros muchos entrenadores -entre ellos, su antecesor en el conjunto blanco, Juande Ramos-, considera que su función está centrada en el terreno de juego, día a día y luego los fines de semana, y no en las atalayas periodísticas. Esa actitud nunca le ha ido mal. Además, el chileno es un tipo blindado al entorno. Encaja las críticas (lógicamente las deportivas, no las personales) como un profesional, convencido de que en el mundillo del fútbol, como en cualquier otro ámbito de la vida, debe imperar la libertad de expresión.
'Enchufado'
A Pellegrini se le ve 'enchufado'. El que piense que Pellegrini no conocía la importancia de su fichaje por el Málaga o la preocupante situación del equipo está plenamente equivocado. Dicho en lenguaje coloquial, sabía dónde se metía. Asimismo, le sorprenden -aunque no lo exprese en público y tampoco en privado- los comentarios relativos a que está capacitado para plantillas con más altas miras, y no tanto para otras que, como en el caso actual, deben sufrir para obtener la permanencia.
«La presión me la marco yo», recalcó hace dos semanas. A estas alturas, a él ya no le mueven motivos económicos. De ser así, no habría venido a Málaga. Habría aceptado alguna que otra propuesta que le garantizaba percibir el triple. Nada más y nada menos. Pero él quería volver al fútbol español, con ese gusanillo del día a día que a veces le pasa factura a un entrenador cuando, por ejemplo, se convierte en seleccionador nacional. Más allá, evidentemente, del reto de protagonizar en primera persona el crecimiento del club y del equipo blanquiazul. Él sabe que no puede fallar porque el futuro sería esplendoroso.
Pellegrini, cuentan algunos de sus pupilos, «está a tope». Exigente, concentrado y siempre buscando el lado positivo. «Son situaciones del fútbol», se limita a decir sobre la plaga de ausencias de las últimas semanas. Primero, las expulsiones en Valencia; luego, la lesión de Jesús Gámez; después, Duda; ahora, Baptista... Poco se puede oponer cuando los problemas físicos no son musculares, sino en las articulaciones. Este aluvión de contratiempos también ha elevado la propia motivación del técnico chileno y la que transmite a sus jugadores.
Metido como está de lleno en el reto más difícil de su carrera -como él mismo sabe, aunque tampoco lo confiese-, huye de mirar hacia atrás, de una planificación errónea y con escaso criterio que exigía un cambio drástico en el mercado de invierno, con más incorporaciones de las realizadas. Pero tampoco Pellegrini quiso más. De lo contrario, el periodo de adaptación de los nuevos se habría alargado en exceso.
Acostumbrado a manejar todo tipo de situaciones en los últimos años, a Pellegrini no se le escuchará quejarse de aquí al final de Liga sobre las bajas, el nivel de la plantilla, las carencias, la falta de velocidad... Solo con un mensaje positivo, tanto para el grupo como cara al exterior, se puede afrontar con garantías un reto que para él es, sin duda, el más importante de su carrera. Su prestigio está en juego. Que nadie lo dude.
URL=https://2img.net/r/ihimizer/i/prensanoticias20110222f.jpg/][/URL]