La Guardia Civil ha detenido a tres personas en dos operaciones distintas desarrolladas en los últimos días cuando intentaban introducir hachís, a través de embarcaciones, en la Costa del Sol, habiendo intervenido más de tres toneladas de esta sustancia estupefaciente.

Una de las operaciones se realizó el sábado en Marbella y la otra se desarrolló en la madrugada del martes en la costa entre la playa del Padrón y la de Velerín donde una embarcación neumática tomó tierra y comenzó a desembarcar una serie de bultos de hachís.

Por otra parte, tres agentes de la Guardia Civil han sido detenidos y se encuentran en prisión provisional tras haber sido detenidos por sus propios compañeros en una operación antidroga. Los agentes fueron arrestados en dos fases distintas de la misma operación, el primero de ellos tras la captura por parte de la Benemérita de un alijo de droga en una playa de Marbella, mientras que los otros dos fueron arrestados en una nueva redada unos días después, en una operación que continúa abierta, según indicó ayer el subdelegado del Gobierno.

Doce personas han sido detenidas en la operación, de las que 10 se encuentran en prisión provisional. Además de los agentes de la Guardia Civil, dos abogadas han sido también arrestadas y se encuentran encarcelados.

Al estar implicados miembros de la Benemérita, la operación estuvo liderada por una unidad de Asuntos Internos de la Benemérita centralizada en Madrid. Fuentes de la Guardia Civil informaron de que la operación se ha dividido en dos fases.

Los primeros arrestos se produjeron a raíz de un alijo que tuvo lugar el 21 de septiembre en una playa de Marbella (Málaga), en el que los agentes interceptaron unos 1.400 kilos de hachís que una organización dedicada al narcotráfico pretendía introducir en España.

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