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Sábado, 16 de Octubre de 2010 02:07


Por Daniel Marín

‘Loli’ vive en Torremolinos. Cuenta con 83 años, tiene problemas de audición y se ayuda de su risueña mujer, María Rosa, para salir adelante. Ella está postrada en una silla de ruedas desde hace un año tras un inoportuno problema doméstico, pero salen adelante con adorable entereza. Tienen negocios en Torremolinos y son propietarios de la mítica papelería Góvez, en pleno centro de Málaga. En su casa amontona recuerdos de su infancia en Algeciras, de donde era natal, y de su carrera de futbolista. La memoria le falla a veces y, cuando el ánimo se lo permite, refresca sus tardes de gloria con aquellas fotografías teñidas de sepia en las que aparece vestido de corto. La actual, marcada por la visita del Madrid, es de esas semanas en las que le apetece quitarle arrugas a sus álbumes.

Aunque ‘Loli’ suena a apodo femenino, aquel centrocampista todoterreno que portó el escudo del Málaga a principios de los cincuenta se llama Manuel Gómez Domínguez. “Era un estilo a Apoño”, compara Antonio Benítez, “un futbolista de categoría”. Además, Loli es uno de los poquísimo supervivientes de aquel partido de ensueño enterrado con el paso de los años, aquel 6-0 al Madrid en 1953. El entrenador era entonces Helenio Herrera y sus once (y no diez) gladiadores de zamarra blanquiazul fueron capaces de endosarle seis clavos al mismísimo Real Madrid: Vera, Rubio, Méndez, Soto, Becerril, Loli, Estruch, Bazán, Galacho, Sergio Rodríguez y Mora. De todos, sólo Loli y Juan Mora (este muy aquejado por una horrible enfermedad) pueden contarlo. El resto han fallecido. El último, Juan Galacho, que murió no hace mucho en Toledo. De Estruch no existe constancia de que también lo haya hecho. El periodista Juan Cortés le perdió pista en la localidad valenciana de Sueca hace ya tiempo.

Loli fue el autor de los pases de los dos primeros goles del partido, obras de Bazán: “Entonces se jugaba con tres centrales y nuestro delantero, Galacho, tiraba desmarques para los costados dejando espacios que Bazán aprovechaba. Así, desde el centro del campo le di dos pases de gol. En 15 minutos ya íbamos dos a cero”. El propio Pedro Bazán, en otra ocasión, Sergio Rodríguez en dos y Cosme en propia puerta autografiaron los otros tantos. “Fue un partido muy especial y memorable porque el Madrid venía para ganar y ser campeón de Liga. Y le metimos seis”, recuerda Loli con nostalgia.

Entonces el fútbol era diferente, mucho más directo y con una peor preparación física. “Nuestro últimos entrenamientos antes del partidos solían ser los jueves. Eran sesiones sencillas y pobres. Hoy se entrena a diario y de una forma específica. Además, ahora el juego es más combinativo”, reconoce el algecireño. No obstante, Loli cree que repetir el 6-0 al Madrid “es muy difícil”, aunque no descarta que algún día pudiera ocurrir: “Hoy en día todos los equipos tienen una preparación suficiente para poder vencerle a cualquier otro. Mire el Hércules como ganó al Barcelona en su casa. La diferencia ahora la marca la calidad y la forma de jugar”.

Durante los últimos años siempre sale a escena el manido 6-2 al Madrid de hace 27 años. Algunos, los más viejos del lugar, recuerdan que tres décadas antes, el 15 de marzo de 1953, Loli y los otros diez de Helenio Herrera, lograron fabricar una goleada mucho más redonda, un ‘set en blanco’.