Marchena es un perro viejo en esto del fútbol (hizo de bueno), y Eliseu cometió un error de alevines (hizo de malo)... El portugués se encaró, el sevillano engañó al árbitro, y el colegiado Teixeira (el feo, por lo horroroso que estuvo) picó... Lo demás ya lo conocen. Lástima de derrota porque se perdió una oportunidad para subir más peldaños, pero en el fútbol de hoy jugar casi 50 minutos con uno menos es mucha ventaja para el rival, que, además, si dispone de jugadores de clase como Cazorla y Senna, necesita poco más. Desde luego, lo que no necesitaba el Villarreal era la ayuda arbitral, pero ocurre que al Málaga no le van a dar ni una. Vamos, que lo que se ganen los de Ferreira será siempre por su esfuerzo, no por factores externos, y si no al tiempo. Lo vamos a ver. Y lo advierto con conocimiento de causa: el Málaga no gusta en Madrid. No digo más, por ahora, pero ahí dejo la cosa...
Vamos al partido. Ya habrá tiempo de 'lo otro'. El Málaga comenzó espléndido, y el gran gol de Eliseu hacía presagiar lo mejor, pero de nuevo llegaron los errores defensivos por un centro del campo dislocado, con un Apoño que dista mucho de ser el que era y que fue responsable directo del empate que dio alas al equipo castellonense. El gol fue un mazazo para el Málaga, que segundos después encajaba otro tanto en medio de un desorden importante, pero una genialidad de Quincy permitió a Rondón ejercer de ariete total y elevar el 2-2 a las alturas. No bastaba. Este Málaga es una verbena defensivamente hablando, y el Villarreal se encontró con otro regalo. El 2-3, un marcador casi de balonmano, llegaba en el minuto 33, y todo hacía presagiar que la cosa iba a seguir así, con un despilfarro de goles, pero todo se fue al garete con la fatídica jugada que desvirtuó el partido pon la expulsión de Eliseu. A partir de ese momento, el Villarreal se dedicó al fútbol especulativo y contemplativo, y bien saben los dioses de la pelota que tanta tibieza hubiese merecido un disgusto: Ferreira lo intentó, y el Málaga también, pero era mucha la ventaja rival, excesiva incluso. De todas formas, la afición está con el equipo. Solo nos falta ganar en casa y tener un buen arbitraje.
http://malagacf.diariosur.es/noticias/2010-09-28/bueno-malo-20100928.html