Posteado Vie 21 Mayo 2010 - 8:58
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Más de un millar de funcionarios -hasta 3.000, según los convocantes-, acudieron ayer en Málaga a la primera cita que marca el calendario de movilizaciones contra las medidas de recorte del Gobierno y cuya agenda de movilizaciones desembocará, el próximo día 8 de junio, en una huelga del sector.
A partir de las 17,00 horas, las banderolas verdes de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) se hicieron notar a las puertas de Hacienda, lugar elegido para la concentración, que terminó con el corte del trafico de la Alameda Principal a la altura de este edificio y que se prolongó durante más de una hora. Ondearon junto a las de las dos grandes centrales -UGT y CC OO- y compartieron espacio con sindicatos policiales como el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión Federal de Policía (UFP), cuyo secretario en Málaga, Fernando Pérez, recordó que entre la subida del IRPF y esta bajada, «a un policía que ya está mal pagado le quitan casi 200 euros».
Ánimo caliente
Por su parte, el presidente del CSI, Joaquín Pérez, afirmó que «el ánimo de los funcionarios está caliente» y anunció que el sindicato al que representa seguirá con las movilizaciones aún después de la huelga: «continuaremos hasta que retiren el decreto», dijo.
Manuel Ferre, de UGT, afirmó que el Gobierno «ha tomado como conejos de Indias a los funcionarios» y recordó que muchos «no llegan a los 1.000 euros y soportan un alto índice de temporalidad». Por su parte, el secretario provincial de CC OO, Antonio Herrera, dijo que el Gobierno, con su actuación, «invita a las empresas privadas a romper los acuerdos alcanzados con los trabajadores, imponiendo la ley de la selva».
La próxima cita será el 2 de junio, día en el que se celebrará una asamblea, que ha sido convocada en el edificio de usos múltiples