Mientras al cuerpo técnico no le satisfacen su labor a diario ni su nivel físico, el jugador se siente infrautilizado
Hace un año el Málaga consiguió recuperar a un futbolista. Los tres goles de Luque en las primeras jornadas de la segunda vuelta sirvieron para reactivar el cariño de la grada hacia el jugador catalán. Meses después está en 'paradero conocido'. En la plantilla, pero apenas en las convocatorias. La pregunta está en el aire: ¿qué pasa con Luque? A juicio del cuerpo técnico, la respuesta se encuentra en el rendimiento del futbolista a diario -registrado a través del pulsómetro-, aunque al mismo tiempo el jugador se siente infrautilizado.
La relación entre Juan Ramón Muñiz y Luque no ha llegado a afianzarse durante estos meses. El origen parece estar en la pretemporada. Al entrenador no le agradó el estado de forma en que llegó el futbolista. Conviene recordar que el medio punta acusó primero la paternidad y luego su particular presión al Ajax para que lo liberara. Además, el catalán suele reconocer que siempre tarda en coger el ritmo adecuado.
Luque esperaba más. Muñiz, también. El técnico se sintió decepcionado con su rendimiento desde que llegó, sobre todo porque no veía clara la incorporación de Duda y consideraba que Luque debía estar en plenas condiciones para el estreno liguero. Después se apoyó en los datos del pulsómetro para no llevarlo al penúltimo amistoso, en Las Palmas -en el que utilizó a la base del equipo titular para el comienzo del campeonato-, y sí lo empleó con varios filiales en Benahavís frente al Cádiz. El asturiano estaba ansioso por la llegada de Duda, que además había exhibido en el Torneo Carranza una notable condición física. Y cuando se produjo, sólo tres días antes del encuentro con el Atlético de Madrid, ni se lo planteó: el luso fue el elegido.
Aquella decisión molestó sobremanera a Luque. Según fuentes cercanas a las partes, el jugador le expuso al técnico su decisión y este le recordó el nivel ofrecido durante la pretemporada. Los dos primeros meses sirvieron para comprobar las discrepancias. En privado el futbolista no estaba conforme con los minutos de los que disponía, y el técnico insistía en que su estado físico impedía alinearlo en la banda. El hecho de que el Racing actuara con un lateral derecho estrictamente defensivo llevó entonces al asturiano a situar juntos a Duda (como lateral) y al catalán. La prueba no fue satisfactoria.
Mejor actuación
La temporada avanzaba y llegó la mejor actuación de Luque. Fue en la Copa del Rey, en la segunda parte en Zaragoza. Aquella noche Muñiz decidió variar el sistema para que el catalán y Obinna, futbolista este muy anárquico tácticamente, tuvieran libertad de movimientos y no se vieran obligados a un excesivo trabajo en la presión.
Los problemas acusados por el equipo con el nuevo esquema desaconsejaron mantenerlo y perjudicaron notoriamente a Luque, al que se le veía con claras dificultades para desbordar a su par cuando actuaba pegado a la banda. La expulsión en Sevilla, a los pocos minutos del comienzo, llevó a Muñiz a buscar en la cantera (Javi López) para resolver los problemas.
Desde entonces Luque apenas ha entrado en las convocatorias. Muñiz sabe que necesita la mejor versión del futbolista y por eso no se conforma con lo que le ofrece en los entrenamientos. Le hizo un guiño al darle unos minutos en Santander, pero no le dio continuidad el domingo. El jugador espera más opciones.
http://malagacf.sur.es/noticias/2010-03-10/pasa-luque-20100310.html