Arnau, Weligton, Hélder Rosário y Baha son los únicos jugadores que con seguridad seguirán en la plantilla desde la primera etapa de Muñiz al frente del Málaga
Juan Ramón Muñiz nunca dejó de estar informado del Málaga desde la distancia. A través de algún amigo y en conversaciones frecuentes con el presidente, Fernando Sanz, tuvo detalle de la evolución de los jugadores que él condujo a la entidad y de otros ajenos a su gestión. Sin embargo, aunque apenas ha permanecido un año fuera del club, la plantilla que se va a encontrar guarda poco parecido con la que dejó. Hasta el punto de que a día de hoy sólo hay cuatro hombres de la de entonces que seguro que se mantendrán en el vestuario en el próximo ejercicio. Junto a ellos, el futuro de otros seis pende de un hilo.
Entre los fijos, la presencia de tres de los cuatro hay que atribuírselas a su hacer como director deportivo. En sus jornadas estajanovistas de trabajo hace dos años por estas fechas cerró la llegada de dos centrales que habían jugado en la liga portuguesa, aunque uno de ellos procediera de Suiza, su último destino. Hélder Rosário y Weligton, respectivamente, han sido la pareja habitual en el eje de la zaga en la campaña del ascenso y en muchos momentos de la que se acaba de cerrar, salvo cuando el primero de ellos no estuvo en su estado de forma adecuado.
La llegada de Nabil Baha también se decidió tras una conversación personal de Muñiz con el delantero francomarroquí, que había completado una brillante segunda vuelta en la Ponferradina, pero que disponía de otras propuestas de Segunda. El caché del atacante ha subido como la espuma desde entonces, aunque le cuesta mantener un rendimiento uniforme en el transcurso de toda la temporada y suele ir de más a menos en sus prestaciones realizadoras.
Antigüedad
El cuarto es Arnau, que sigue siendo el jugador con más antigüedad en el vestuario. En la próxima temporada cumple una década en el vestuario del conjunto de Martiricos, y lo que está por ver es si consigue la titularidad, ya que Muñiz le relegó en su momento en favor de Goitia en mitad de la temporada del ascenso.
Junto a estos nombres, otros seis pueden mantenerse en el equipo en relación a la anterior etapa en la entidad del asturiano. El problema es que sobre todos ellos se cierne la incertidumbre: Cheli acabó contrato, no cuenta y espera ofertas, y es dudoso que Rossato y Salva puedan continuar. La continuidad del brasileño va a estar en función de que se incorpore algún lateral izquierdo, y la del atacante, de que acepte la propuesta económica del Málaga, muy inferior a la que ha tenido en los últimos años.
Por último Jesús Gámez, Apoño y Eliseu están en el mercado. Por unas razones u otras son muy apetecibles, después de haber completado una gran temporada. Los tres tienen contrato, pero en el caso del último de ellos la cláusula de rescisión tiene un importe muy bajo, de 600.000 euros.
A los cuatro fijos (Arnau, Hélder Rosário, Weligton y Baha) y a los que sigan de los seis dudosos hay que añadir otros nombres que mantienen relación con Muñiz: por un lado, Pere Martí (que podría irse cedido) y Cuadrado, fichajes que dejó cerrados el gijonés antes de irse y, por otro, Antonio Hidalgo, que puede volver aunque tiene un año de contrato todavía con el Zaragoza.
http://malagacf.sur.es/noticias/2009-06-14/cuatro-diez-supervivientes-20090614.html