Jugará con El Palo ante el Huétor Tajar para subir a Tercera y convertirse en un caso inédito en el fútbol
Basti es uno de los futbolistas más atípicos que existen. Es de los pocos gitanos (si no el único) que no "sabe tocar las palmas", un paleño con una peña en Albacete y, en dos semanas, puede que sea el único futbolista de España que colecciona ascensos en todas las categorías, desde Primera División hasta Primera Andaluza. Y con el mérito de tener sólo 34 años.
Todo pasa por que este domingo y el próximo su actual equipo El Palo, derrote al Huétor Tajar en la eliminatoria de ascenso a Tercera. Sería la tercera militancia del equipo en dicha categoría: una a principios de los 80 y otra a finales jalonan el palmarés paleño. Suena a éxito tremendo, pero en la entidad malagueña se espera solo como un escalón intermedio hacia la Segunda B, el sueño de un loco del fútbol: Juan Godoy, su presidente. "Es nuestra ambición. Lo hablábamos el año pasado, cuando estábamos en Regional. El presi hizo un proyecto humilde pero ambicioso y ahora lo tenemos muy cerca. Si subimos, gente importante vendrá a traer dinero y hará un equipo grande", cuenta Basti.
De hecho, esa revolución ya ha empezado. El mítico San Ignacio de tierra ya está en obras. Al fin será de césped, se edificará sobre dos grandes aparcamiento y dará cabida a 2.000 espectadores -"ahora también caben esos, pero a empujones", aclara el delantero-. "Y ya podrá albergar hasta partidos de Segunda", sueña Basti y hace bien, pues por ejemplo Villarreal es más pequeño que El Palo y lleva años viendo fútbol de alto nivel.
Con el carisma de Basti y el afán triunfador de Godoy, hacía falta una figura intermedia capaz de convertir un club humilde en una estructura más profesionalizada. Una labor auspiciada por su actual técnico, Pepe Sánchez. Según Basti, "es como el Ferguson o el Wenger de El Palo". Su experiencia ha sido fundamental. Aquí todos alternan el fútbol con el trabajo, pero ha conseguido que entrenemos cuatro días a la semana, ha metido estrategia, ha mejorado el trabajo físico, ha organizado los viajes... ¡Hasta nos ha traído recogepelotas!", resalta Basti, y eso que el ex coordinador de las categorías inferiores del Málaga no llega a cobrar ni 1.000 euros por su labor.
El resultado de todo ello han sido un ascenso sobrado a Primera Andaluza (el año pasado) y una temporada fenomenal solo mejorada por el intratable Mancha Real. Desde que Basti llegó hace un año y medio, sólo el Torremolinos ha sido capaz de vencer en San Ignacio, donde este domingo a las 19:00 Basti espera un lleno para llevar buena renta para la vuelta en tierras granadinas: "Sólo son 5 euros la entrada, así que esperamos que vengan muchas personas. De la Axarquía lo harán, y de aquí seguro, pero espero que también de Málaga. Soy optimista y creo que hay muchas opciones de pasar. Ellos llegaron a sacar doce puntos al segundo en su grupo, pero se desinflaron y se clasificaron en un triple empate de puntos".
Estando en el San Fernando, Basti renunció a ofertas de Segunda B por volver a El Palo, a sus raíces. Coleccionaba dos ascensos a Primera, uno a Segunda y dos a Segunda B, sigue figurando como máximo goleador del Málaga CF en todas las categorías (55 goles, cinco más que Catanha) y apenas pasaba la treintena, pero dejó todo eso "por poder llevar a mi hija a la guardería". Ahora también disfruta de su retoño, "el extracomunitario" (es rubio con los ojos azules). Los rivales y los árbitros le respetan y es el más humilde en el vestuario de El Palo. Y disfruta aunque se está dejando las rodillas en el San Ignacio. "Aquí es como si fuera un partido de tu familia", relata. Y que haya vivido ascensos imposibles no le quita la ilusión: "Estoy nervioso, quiero que llegue ya el partido".
http://www.malagahoy.es/article/deportes/429913/basti/por/unico/ascenso/le/falta.html
Basti es uno de los futbolistas más atípicos que existen. Es de los pocos gitanos (si no el único) que no "sabe tocar las palmas", un paleño con una peña en Albacete y, en dos semanas, puede que sea el único futbolista de España que colecciona ascensos en todas las categorías, desde Primera División hasta Primera Andaluza. Y con el mérito de tener sólo 34 años.
Todo pasa por que este domingo y el próximo su actual equipo El Palo, derrote al Huétor Tajar en la eliminatoria de ascenso a Tercera. Sería la tercera militancia del equipo en dicha categoría: una a principios de los 80 y otra a finales jalonan el palmarés paleño. Suena a éxito tremendo, pero en la entidad malagueña se espera solo como un escalón intermedio hacia la Segunda B, el sueño de un loco del fútbol: Juan Godoy, su presidente. "Es nuestra ambición. Lo hablábamos el año pasado, cuando estábamos en Regional. El presi hizo un proyecto humilde pero ambicioso y ahora lo tenemos muy cerca. Si subimos, gente importante vendrá a traer dinero y hará un equipo grande", cuenta Basti.
De hecho, esa revolución ya ha empezado. El mítico San Ignacio de tierra ya está en obras. Al fin será de césped, se edificará sobre dos grandes aparcamiento y dará cabida a 2.000 espectadores -"ahora también caben esos, pero a empujones", aclara el delantero-. "Y ya podrá albergar hasta partidos de Segunda", sueña Basti y hace bien, pues por ejemplo Villarreal es más pequeño que El Palo y lleva años viendo fútbol de alto nivel.
Con el carisma de Basti y el afán triunfador de Godoy, hacía falta una figura intermedia capaz de convertir un club humilde en una estructura más profesionalizada. Una labor auspiciada por su actual técnico, Pepe Sánchez. Según Basti, "es como el Ferguson o el Wenger de El Palo". Su experiencia ha sido fundamental. Aquí todos alternan el fútbol con el trabajo, pero ha conseguido que entrenemos cuatro días a la semana, ha metido estrategia, ha mejorado el trabajo físico, ha organizado los viajes... ¡Hasta nos ha traído recogepelotas!", resalta Basti, y eso que el ex coordinador de las categorías inferiores del Málaga no llega a cobrar ni 1.000 euros por su labor.
El resultado de todo ello han sido un ascenso sobrado a Primera Andaluza (el año pasado) y una temporada fenomenal solo mejorada por el intratable Mancha Real. Desde que Basti llegó hace un año y medio, sólo el Torremolinos ha sido capaz de vencer en San Ignacio, donde este domingo a las 19:00 Basti espera un lleno para llevar buena renta para la vuelta en tierras granadinas: "Sólo son 5 euros la entrada, así que esperamos que vengan muchas personas. De la Axarquía lo harán, y de aquí seguro, pero espero que también de Málaga. Soy optimista y creo que hay muchas opciones de pasar. Ellos llegaron a sacar doce puntos al segundo en su grupo, pero se desinflaron y se clasificaron en un triple empate de puntos".
Estando en el San Fernando, Basti renunció a ofertas de Segunda B por volver a El Palo, a sus raíces. Coleccionaba dos ascensos a Primera, uno a Segunda y dos a Segunda B, sigue figurando como máximo goleador del Málaga CF en todas las categorías (55 goles, cinco más que Catanha) y apenas pasaba la treintena, pero dejó todo eso "por poder llevar a mi hija a la guardería". Ahora también disfruta de su retoño, "el extracomunitario" (es rubio con los ojos azules). Los rivales y los árbitros le respetan y es el más humilde en el vestuario de El Palo. Y disfruta aunque se está dejando las rodillas en el San Ignacio. "Aquí es como si fuera un partido de tu familia", relata. Y que haya vivido ascensos imposibles no le quita la ilusión: "Estoy nervioso, quiero que llegue ya el partido".
http://www.malagahoy.es/article/deportes/429913/basti/por/unico/ascenso/le/falta.html