Partido que se juega mañana y que será casi imposible ganar allí. Este año están muy bien y tienen un equipazo.

Manu Puga ­En tan sólo dos partidos con la camiseta verde de Unicaja y sin apenas haber completado más de dos entrenamientos con sus nuevos compañeros, Andy Panko (Harrisburg, EEUU, 29/11/1977) ha hecho olvidar al atlético y físico James Gist, que ahora ocupa su lugar en el Panathinaikos griego en el primer cambio de cromos del baloncesto europeo.

Sólo lleva dos partidos con el Unicaja, pero por su rendimiento parece que lleva jugando con sus compañeros desde la pretemporada. ¿Eso cómo se hace?
Antes de irme a Grecia llevaba 10 años en España, conozco el equipo, la cancha, al míster... No necesitaba mucho tiempo de adaptación. España es mi segunda casa y me siento muy a gusto en esta Liga. Además he podido comprobar que Málaga es una ciudad fantástica, estoy muy feliz.

Es cierto que se le ha visto muy cómodo...
Absolutamente. No era ningún secreto que mi primera opción al principio de temporada era jugar en el Unicaja. Es un gran equipo, un gran familia y eso es algo que me hace sentir muy confortable. Además, yo ya no soy un rookie, tengo 35 años y como te he dicho antes llevo ya 10 años en España. Conozco todo lo que rodea a la Liga.

¿Cómo vivió el traspaso de usted al Unicaja y Gist al Panathinaikos? Es algo novedoso aquí en Europa.
Sí, sí, creo que nunca se había hecho un traspaso de este tipo en el baloncesto europeo, pero creo que es bueno. Son dos equipos grandes que han decidido cambiar dos jugadores para mejorar. Seguro que sienta precedente y a partir de ahora esto se ve más por aquí. En la NBA es lo habitual, por lo que no me sorprendió tanto.

¿Es cierto que no le gusta nada la NBA?
Totalmente, nunca veo NBA, no me gusta. En la NBA no se defiende, no hay carácter competitivo... si pierdes 5, 6, 7 partidos seguidos no pasa nada, te vuelves a casa y listo. A mí me gusta el baloncesto europeo, donde hay que ser más inteligente y no sólo ser atlético.

¿Qué tal es jugar en un equipo tan grande como el Panathinaikos?
El Panathinikos es una enorme institución, con mucha tradición. Pero Grecia no es España y mi prioridad y la de mi familia siempre ha sido jugar aquí. Que nadie me malinterprete, no quiero decir nada malo del PAO, pero no es una gran familia como Unicaja.

De sus nuevos compañeros, ¿quién ha sido el que más le ha sorprendido?
Los conocía prácticamente a todos. Sergi (Vidal), Fran (Vázquez), Urtasun, Zoric... El que más me ha impactado ha sido Repesa. Es un entrenador espectacular. Me encanta cómo dirige los partidos, su experiencia, su trato con el jugador... Ya me habló muy bien de él Ukic en Atenas y no le faltaba razón. Espero poder hacer siempre lo que me pida en cancha.

Vuelve a coincidir con Vidal después de ser ambos MVP la pasada temporada.
Es fantástico. Sergi se merecía ser MVP porque jugó de manera espectacular. Siempre es bueno jugar con antiguos compañeros, pero sé que mi rol en el Unicaja será diferente que el año pasado. Aquí no voy a jugar 35 minutos por partido ni meter 30 puntos.

¿Cree que el Unicaja estará en la Copa del Rey?
Ese es el objetivo. El Unicaja tiene que estar en la Copa y vamos a luchar por ello. Ahora estamos dentro pero mañana tenemos un partido difícil en Valencia que creo que podemos ganar.

¿Qué le parece que vaya tan poca gente al Carpena?
Es raro, siempre he visto el Carpena lleno. Creo que la gente necesita que le demostremos que tenemos corazón y si lo hacemos estoy seguro que el público volverá a llenar el pabellón.

Examen de altura para el Unicaja. El conjunto malagueño afronta una dura prueba en su visita al Valencia. Si sale victorioso de la Fuente de San Luis, Repesa y los suyos habrán dado un paso de gigante para jugar la próxima edición de la Copa del Rey, en una jornada en la que sus rivales directos -Barcelona, CAI y Estudiantes- afrontan partidos complicados.

Sin mirar lo que suceda en otras canchas, el Unicaja debe cumplir con su parte del guión y tratar de derrotar a un Valencia my sólido y que solo ha perdido un partido como local en lo que va de temporada. El equipo que dirige Velimir Perasovic está realizando una temporada excelente, aunque llega al encuentro con bajas muy importantes. Por un lado, Faverani y Pau Ribas se pierden el choque por lesión, mientras que el francés Lauvergne ha sido dado de baja, pues ha fichado por el Partizán, y su puesto lo ocupará el ucraniano Lishchuk, recuperado de una lesión. Por contra, Perasovic podrá contar con el francés Gelabale, que ha jugado la primera parte de la temporada con el Cedevita y es un refuerzo importante para el Valencia. El Unicaja tendrá que poner especial atención sobre el galo, un jugador capaz de actuar en varias posiciones.

Dos amenazas

Aunque las bajas del Valencia en el juego interior son importantes, especialmente la de Faverani, cuenta con dos jugadores que están a un gran nivel y sí que serán una amenaza, ambos en la posición de ala-pívot. El primero es Doellman. El estadounidense tenía un acuerdo verbal para firmar por el Unicaja el pasado verano. Sin embargo, las dudas de Repesa, que quería esperar a encontrar a otro jugador, provocaron que acabase aceptando el ofrecimiento del Valencia. El de Cincinnati se está saliendo, con una media de 15 puntos por partido. Junto a él, el joven montenegrino Bojan Dubljevic, con 12,5 puntos. Forman una pareja de 'cuatros' excelente que alternan posiciones interiores con un buen lanzamiento de tres puntos.

De nuevo, el papel de Andy Panko o Lima será clave para minimizar el daño de estos dos jugadores, pues tanto Vázquez como Zoric tendrán problemas para defenderlos. En cualquier caso, la ventaja del Unicaja cerca del aro parece evidente, pero debe hacerla eficaz. Junto a ellos, el siempre peligroso Rafa Martínez y el polivalente Kelati, dos peligros desde la línea de tres puntos.

Después de los dos últimos partidos, las distancias en lo que a juego se refiere se han reducido bastante. El Unicaja está en una línea ascendente tras derrotar al Barcelona y al Brose Baskets, aunque el rival de hoy no le va a dar el mínimo respiro. Como en los últimos partidos, el estado de inspiración de Williams será determinante.

Rafael M. Guerra Tres triunfos consecutivos (Canarias, Barcelona y Brose) han acallado las críticas. Un «cambio de cromos» (Panko por Gist) ha devuelto la credibilidad del juego interior y ha servido para redondear la plantilla. Una nueva exhibición de Williams ha vuelto a hacer brotar la magia. Y un triunfo hoy en Valencia, ante el tercer equipo de la Liga Endesa, serviría para darle credibilidad al equipo, pondría al Unicaja a las puertas de la Copa del Rey y sería una prueba de madurez para el equipo. Y es que, a estas alturas de curso, el Unicaja aún no le ha ganado a ninguno de los ocho primeros de la competición, un dato que dejó de ser anecdótico para convertirse en un problema.

El Unicaja cayó en Madrid (líder) en el debut de la Liga Endesa, perdió en Vitoria ante un Caja Laboral (segundo) en horas bajas, también mordió el polvo en Bilabo (cuarto) y Zaragoza (sexo), y cayó en el Carpena ante el Obradoiro (octavo). Valencia (tercero) y Gran Canaria (quinto) son las siguientes piedras de toque, con Kaunas entre ambas citas.

Comienza el Unicaja, justo en Navidad, la hora de la verdad. Y ante rivales de caché, de prestigio. Debe sacar su orgullo y también su mejor balocesto, algo adormecido últimamente, que enseña sólo en contadas ocasiones. Los rivales también ven los partidos y saben que controlando el rebote del Unicaja e impidiéndole correr, el equipo de Jasmin Repesa sufre, porque el ataque estático no es su fuerte. La llegada de Panko debe comenzar a solucionar ese problema. Más balones dentro-fuera. Más espacios. Valencia es una pista estupenda para demostrar que comienza la reacción.

La expedición sufrió ayer un vuelo de lo más accidentado. Tenía previsto tomar el vuelo Málaga-Valencia a las 17.55, pero el avión que debía venir desde Madrid no lo hizo y hubo que espear una hora y media para tomar otro aeroplano de menor tamaño y llegar a la ciudad levantina a las 21.00. Tiempo de espera que cansa y desespera.

Delante habrá un equipo de muchísimo nivel. Junto a Caja Laboral y Bilbao, Valencia es el equipo –además del Unicaja– que deben encabezar la persecución al Real Madrid y al Barcelona (ahora en horas bajas). Hay una plantilla de gran nivel, aunque con muchos cambios debido a lesiones y bajos rendimiento. Velimir Perasovic recupera para la cita de hoy a las 12.00 horas en La Fuente de San Luis a Serhiy Lishchuk, recuperado tras un mes fuera, pero pierde al hombre que le sustituyó temporalmente y que anotó en Manresa, en el último duelo liguero, un triple ganador, el galo Joffrey Lauvergne, que se va al Partizán de Belgrado.

Quienes no estarán serán ni el excajista Vitor Faverani ni Pau Ribas, ambos lesionados, y que merman la rotación de Perasovic, a la que se acaba de incorporar el alero francés Gelabale. Ya ha jugado dos encuentros con el equipo valenciano aunque como visitante. En ambos, se ha mostrado como un refuerzo sólido, especialmente en ataque, ya que en defensa aún no tiene la intensidad de sus compañeros.

Las estadísticas no están muy a favor del Unicaja en una pista muy caliente como la de La Fuente de San Luis. Y es que los cajistas han caído en Valencia en sus cuatro últimas visitas, y el cuadro «taronja» sólo ha cedido en su pista en uno de sus partidos este curso.

La última victoria del equipo malagueño en la capital del Turia data del play off por el título de la temporada 2009/10, hace ya tres años, cuando el equipo dio la sorpresa en el primer partido de cuartos de final y asaltó La Fonteta. Después se han disputado otras cuatro citas, todas saldadas con derrotas.

Si se ganará hoy en Valencia sería practicamente definitivo el poder acceder a jugar la Copa Rey. Y si se pierde todavía quedarían opciones reales de poder entrar.

a ver si produce el milagro en valencia

de milagro nada, de momento perdemos 33-13

valiente paliza al descanso 39-16, increible vamos.se me quita las ganas de verlo.........

62-40 a falta 7 minutos que verguenza

Al final 82-64. Magnifico resultado para acabar el año. Este Unicaja no tiene remedio.

82-64

adios copa

No. Todavía no. Si gana los dos próximos encuentros se clasifica para la Copa. Pero hay que ganarlos.

yo lo vi por internet y me dio pena verlo, creo que el que falla es el entrenador

el equipo esta igual que el año pasado, de pena

en liga vamos mal pero en la euroliga vamos bien

vergonzoso

de verguenza.................y eso que para mi tiene mas equipo que el año pasado, mucho mas

Es que lo tiene papadi, hay plantilla para hacer mucho más.

Emilio Fernández Dos victorias o sólo una con una compleja carambola. Y si no, no habrá Copa del Rey. La derrota del Unicaja ayer en Valencia, unida a las victorias este fin de semana de todos los rivales directos, han vuelto a sacar al equipo verde de los ocho primeros puestos, a falta ya sólo de las dos últimas jornadas de la primera vuelta.

Viendo la clasificación y echando un ojo al calendario, parece evidente que el Unicaja deberá alcanzar los 10 triunfos si quiere estar en la cita copera de Vitoria. O sea, que deberá ganar la tarde del Día de Reyes en Las Palmas y también en la última jornada al Cajasol –en el Martín Carpena– para lograr el objetivo. Con una sola victoria, lo normal es que no valga.

La mejor noticia es que los verdes dependen de sí mismos. Y eso es una gran ventaja. El equipo de Los Guindos es noveno, pero en la última jornada hay un Estudiantes-Barcelona que favorece los intereses cajistas ya que el equipo que pierda ese partido como máximo llegará a 9 triunfos, uno menos de los que sumarían los verdes con sus dos hipotéticos triunfos en las dos jornadas que restan.

Está claro que los seis primeros que ahora mismo comandan la tabla estarán en la cita de febrero en Vitoria. O sea, que restan todavía dos plazas más por adjudicarse. Para estos dos billetes libres hay cuatro aspirantes, igualados a día de hoy en la tabla con 8 triunfos y 7 derrotas (Barcelona, Estudiantes, Unicaja y Blusens Obradoiro).

Veamos cada caso de forma particular. De momento, el séptimo es el FC Barcelona. A los culés les queda jugar en el Palau Blaugrana contra el Lagun Aro y acabar en ese partido fratricida en Madrid contra el «Estu». Su buen average les hace tener incluso opciones de meterse ganando sólo uno. Pero para estar seguros deberán sumar las dos victorias.

El octavo, ahora mismo, es el Asefa Estudiantes. Le quedan dos partidos en casa, pero sin embargo tienen el peor calendario de los cuatro aspirantes. Reciben la próxima semana al Caja Laboral y después al Barça. A los colegiales les pasa lo que al Unicaja, con una sola victoria lo normal es que se queden fuera. Necesitan ganar los dos. Y, sinceramente, parece imposible.

El noveno es el Unicaja. En el caso de los de Repesa, lo dicho: con dos victorias, pase seguro. Si sólo gana uno, deberá esperar una doble derrota del Estu (o que si pierde sólo uno, sea por mucha diferencia de puntos) y que el Obradoiro sólo gane también uno de los dos que le faltan.

Precisamente, el último aspirante es el equipo de Santiago de Compostela. El Blusens Monbus necesita ganar los dos partidos porque su average es el peor de los cuatro aspirantes, pero tiene un calendario bastante asequible. Los gallegos reciben al Valladolid y viajan la última jornada a Badalona. Es verdad que no es una pista cómoda la del Joventut –que también tiene opciones, aunque remotas, de jugar la Copa–, pero podrían dar la sorpresa.

Está claro que todavía habrá que echar muchos números en el comienzo de este inminente 2013. Sobre todo si el Unicaja falla en su viaje a Las Palmas. En ese hipotético caso, habría que echar mano de la calculadora en una última jornada de infarto. Una victoria en Las Palmas, eso sí, le colocaría con pie y medio en Vitoria.

Menuda papeleta de Unicaja por haber fallado tanto antes.

si nos quedamos otra vez sin copa menudo fracaso

Ocho partidos en el primer mes del año, a dos semanales, de los que solo tres se jugarán en el Palacio de los Deportes Martín Carpena... y dos consecutivos ante el mismo equipo, un Real Madrid que hasta este fin de semana se estaba mostrando intocable. Este es el programa que deberá afrontar el Unicaja durante enero. Un ritmo al que se ha tenido que habituar el equipo, pero que en este caso se endurece por unos compromisos que se presentan como decisivos unos y de máxima dificultad otros.

De momento, quizás los que más llamen la atención, por lo que está en juego, sean los de la competición nacional. Dos salidas en las que se decide el primer objetivo de la temporada, lograr la plaza para la Copa del Rey. Y sin opciones a fallar en ninguno de los dos partidos que quedan hasta llegar al corte. Primero será en la pista del Herbalife Gran Canaria, equipo que con un balance de 11-4 ya tiene asegurada su plaza para la esperada cita de Vitoria. Además, será solo dos días después de jugar en la pista del Zalguiris y con el lógico cansancio del partido y, sobre todo, del larguísimo desplazamiento. Después, el día 13, la visita del Cajasol sevillano para tratar de certificar el pasaporte copero, en el siempre esperado derbi andaluz de la élite baloncestística con el que concluirá la primera vuelta de la competición.

Además, con los participantes en la Copa del Rey ya decididos, el calendario de la Liga Endesa tiene preparados dos choques no menos complicados para el Unicaja: primero recibirá el día 20 al actual líder de la competición, el Real Madrid, en la repetición del encuentro de la Euroliga que se disputará en el mismo escenario dos días antes, para concluir el mes el día 27 en Badalona.

Rivales y desplazamientos

Pero si en la Liga esperan encuentros complicados, más aún sucede con la Euroliga, ya que los discípulos de Repesa deberán medir a los, a priori, cuatro rivales más complicadas del grupo E del 'Top-16' de la máxima competición continental: el Zalguiris, el Panathinaikos, el Real Madrid y el CSKA serán correlativamente los equipos que tenga enfrente. Y solo con los madridistas en casa.

Un mes de enero agotador, repleto de partidos ante potentes rivales... y de kilómetros, ya que deberá hacer los viajes más largos de la temporada. Con visitas a Las Palmas y Badalona, por un lado, y, sobre todo, a Moscú, Kaunas, y Atenas, por el otro. Además, con desplazamientos que enlazan partidos de Liga Endesa y Euroliga, que supondrán varios días fuera de Málaga y dejarán poco tiempo para prepararlos.

El mes no solo se presenta largo para los bolsillos de los ciudadanos. También para el Unicaja, en el que pueden decidirse buena parte de los objetivos de la temporada.