ANTONIO TAPIA ENTRENADOR DEL MÁLAGA
«¿Europa? Vamos a darlo todo e intentaremos no defraudar a nadie», dice, y se marca como reto lograr dos triunfos en las cuatro próximas citas
Antonio Tapia saca pecho. Llegó el momento de hacerlo. Con doce partidos de adelanto ya se ha cumplido el primer objetivo de la temporada, la permanencia, y toca hablar de Europa y de la atractiva gira inminente frente a los grandes. Es mediodía y el técnico del Málaga lleva al menos una hora sin parar de atender a los medios. Hasta en Televisa (México) le siguen la pista. En esto también se aprecia que algo ha cambiado en el club. Sin embargo, el entrenador responde con suma profesionalidad a todos y sin aparentar aburrimiento, pese a que las preguntas se repiten con asiduidad. Las más cansinas, las que insisten sobre su renovación. En esto prefiere echar balones fuera sin rodeos. A estas alturas parece sintomático que no se haya anunciado que seguirá.
¿Tiene que pellizcarse cuando se levanta cada mañana para poder creerse que el Málaga está donde está?
No, no he tenido que hacerlo. Llevo bastante tiempo entrenando y desde el punto de vista técnico he colaborado en conseguir metas más importantes que las de ahora. Técnicamente, es más difícil ascender al equipo filial de Segunda B a Segunda, o al Ejido de Tercera a Segunda. También colaboré en que el Málaga subiera de Segunda a Primera, en la mejor clasificación de la historia del Fuengirola o del Ejido, o en la mejor segunda vuelta del Málaga. Evidentemente, no tengo que pellizcarme.
Pero no puede negar que, a diferencia de otros equipos que ha nombrado, en el Málaga hay más presión en el entorno y cualquier error se magnifica.
Pero técnicamente para mí es más fácil dirigir en Primera División que en Segunda o en Segunda B. La capacidad de mis jugadores es mayor. Que ahora estemos quintos no me sorprende después de haber cogido a un Málaga con menos cuatro (se refiere a que estaba a cuatro puntos de salir de los puestos de descenso) hace tres temporadas y hacer un gran parcial con mis compañeros.
Parece una ironía del destino que ahora que están más arriba que nunca, quintos en la clasificación, se tengan que enfrentar a los cuatro primeros.
Afrontar estos próximos cuatro partidos con 42 puntos y el primer objetivo conseguido da tranquilidad. Desde el punto de vista anímico se encara el día a día sin una carga emocional que reste energía, que ahora se podrá gastar sólo en el partido. Afrontamos estos cuatro encuentros con tranquilidad, con ilusión, pero sabemos que ellos con muy poquito te pueden ganar el partido. Lo que está claro es que si no estamos a nuestro mejor nivel y el rival rinde a un tono muy alto será muy difícil sacar los choques adelante, porque tienen mucha pegada. Creo que, a la hora de marcarnos un objetivo claro, si vamos a luchar por una de las plazas europeas, va a ser muy importante ver dónde estamos después del partido contra el Villarreal.
¿Se marca como objetivo una cifra de puntos en estos cuatro próximos partidos?
Depende de lo que hagan el resto de rivales para hablar de puntos. Simplemente con que estemos a un punto o dos de esas seis primeras plazas, o en ellas, tendríamos muchas opciones en esas ocho últimas jornadas para optar a ello. Somos conscientes de la dificultad que conlleva esto, y lo han ratificado en vuestro medio entrenadores de la trayectoria de Joaquín Peiró o Gregorio Manzano. Tenemos por detrás a equipos como el Valencia o el Atlético de Madrid. Ya no hablo de presupuestos, sino de capacidad futbolística. El 'Dépor' mismo nos triplica en presupuesto. Evidentemente, no va a ser fácil, pero vamos a darlo todo e intentaremos no defraudar a nadie.
¿Es positivo que sigan en Europa compitiendo alguno de estos rivales?
Pues depende. Se puede hacer una lectura negativa, por la desilusión que supone para el club o los jugadores no seguir. O al revés, que el hecho de continuar en una competición solamente los va a hacer centrarse más. La clave es que nosotros ganemos partidos. Si queremos estar ahí tenemos que ganar dos de los cuatro próximos.
Las cuentas dictan que sacando todos los puntos de casa el equipo estará en Europa. Dicho así parece fácil...
Sí, pero para ello hay que ganarle al Sevilla el domingo, al Real Madrid, al Mallorca, al 'Dépor'. A equipos que van a venir necesitados. La competición esta ahora más igualada que nunca y lo que hay que hacer es mantener una regularidad. Y en los enfrentamientos directos, demostrar que tenemos potencial para estar en Europa. Hay que ganarle al Sevilla, al Villarreal, al Real Madrid aquí en casa e ir a Barcelona con intención de por lo menos empatar o ganar. Al menos con estos cuatro equipos no perder, porque estos son ahora nuestros rivales directos. Si en esos enfrentamientos no se pierde eso determinaría que vamos a estar peleando por Europa hasta el final.
¿De qué puntos de los que se han escapado se lamenta más en estos momentos?
De ninguno, porque también tuvimos partidos en los que también se tuvo la precisión o la suerte, como queramos denominarlo, que faltó en otros. Pongo ejemplos: se perdieron puntos en los últimos minutos, como en Bilbao, pero se ganaron puntos ante el Betis, allí. Nos han pitado penaltis a favor y en contra. Hubo errores arbitrales a favor y en contra. Estamos donde nos merecemos. Después de veintiséis jornadas ningún equipo puede decir que está en una clasificación por los árbitros o desgracias, sino en relación al rendimiento de un campeonato.
Si hay algo que destacaría del equipo ante todo, ¿sería su brillantez en ataque?
Hombre, el otro día, un ex futbolista, con el que juego en las peñas, me decía que se divierte más viendo al Málaga que al Real Madrid, que era su equipo. Este Málaga está hecho en base a la profundidad. Es un equipo con desborde, con velocidad, con llegada, incluso con pegada. Tenemos gol en ataque, pero tampoco es fruto de la casualidad....
Eso se trabaja.
Claro, desde que fichamos a los jugadores. A la hora de decidirnos con qué jugadores contar, si lo hacíamos con futbolistas con gol y se hace un buen trabajo, la capacidad realizadora se manifiesta en beneficio del equipo. Si se ficha a jugadores sin gol, lógicamente habrá más dificultad. Fue uno de los criterios que tuvimos en cuenta al fichar, además del compromiso y de la profesionalidad. Los jugadores que tenemos de medio campo para arriba, incluso los laterales, tienen capacidad ofensiva.
A estas alturas, ¿cree que hay cosas en las que puede mejorar el Málaga aún?
Siempre hay cosas que mejorar. El fútbol es un deporte de aciertos y errores. De un partido para otro hay cosas que te salen mejor que otras. En estos momentos tenemos que intentar ajustar un poco más el aspecto defensivo, sin perder esa capacidad ofensiva. Pero claro, la manta a veces se aparta y no se puede tapar todo. Pero si fuésemos capaces de estirarla...
El Zaragoza tiene problemas para ascender, y el Málaga lo hizo hace un año sin pagar traspasos y en este, de igual forma, lucha por Europa. ¿Sirve esto para relativizar que sea necesario gastar para aspirar a más?
No. yo entiendo que el tema económico es muy importante, pero no es lo variable que determina el éxito. Un presupuesto alto no garantiza ganar partidos. Ahora, si tú tienes muy buenos jugadores y, además, dinero, y si trabajas bien desde la secretaria técnica y el cuerpo técnico...
¿Va a seguir entrenando al Málaga?
Pienso que mi continuidad queda ahora en un segundo plano. Eso está en manos de mi representante y cuando haya que tomar la decisión se tomará.
La realidad apunta a que varios jugadores se pueden ir, entre los que acaban contrato y los numerosos cedidos. ¿Teme un desmantelamiento?
No pienso que se tenga que desmantelar. Si el año pasado, con pocos recursos, se tomaron buenas decisiones, ¿por qué no se van a tomar para la próxima temporada? Ese es mi punto de vista.
¿Sigue pensando que las cotas de más felicidad en el banquillo se las dio el ascenso a Segunda con el Málaga B?
Indudablemente. Aquello tuvo un mérito desde el punto de vista técnico, una mayor dificultad que la que tengo esta temporada. Y no se puede pasar por alto el punto de vista emotivo, por la implicación que tenía con estos chavales. Lógicamente, esta sensación es distinta a la de jugadores curtidos como los de ahora. Entonces se vivía cada partido con una ilusión distinta.
Hay quien piensa que clasificarse para una competición es un lastre económico y deportivo...
Hay dos objetivos. Uno es el clasificatorio. Eso te permite tener un enganche de la afición. Luego está lo que tú puedas hacer en el terreno de juego cara al seguidor, pero independientemente del resultado. Me gustaría entrar en Europa, pero por la puerta grande. Haciendo un juego que haga feliz al público. Eso es lo más importante, y cuando digo el aficionado me refiero a toda la provincia, porque muchas veces cuando vas por la calle te felicita gente que no va al campo y está disfrutando con su Málaga. También podemos quedar fuera de Europa y que de aquí al final de la Liga la gente disfrute con lo que estamos haciendo.
¿Ha habido un cambio en su discurso? Le vemos poner énfasis cada vez más en el espectáculo del juego, y eso se plasma en partidos como el disputado frente al Recreativo, cuando planteó el choque para ganar pese a una expulsión temprana de Lolo.
La experiencia te va marcando. Tuve la suerte de estar muchas etapas aquí y sé lo que quiere el aficionado malagueño y el andaluz, al que le gusta el fútbol. Esta temporada he podido participar de forma muy directa en la planificación de la plantilla, con los recursos económicos que tuvimos, y uno de los objetivos que nos pusimos era ganar jugando bien al fútbol. Cuando digo jugar bien al fútbol digo tener profundidad, asumir riesgos.
http://malagacf.sur.es/noticias/2009-03-12/estamos-donde-merecemos-20090312.html