Se jugará en tres fases con un máximo de 48 partidos, incluida la Copa • La jugarán los mayores de 16 años y menores de 23 • Cada equipo podrá inscribir 5 extranjeros
La reunión que mantuvieron el pasado 10 de diciembre Ángel María Villar y José Luis Astiazarán en la sede de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas sirvió para sentar las bases de la Liga de filiales, que se iniciará en el mes de septiembre de 2009. Los presidentes de la RFEF y la LFP sellaron un acuerdo que servirá para culminar el proyecto iniciado por Roberto Olabe y que ha terminado Ricardo Resta, tras diferentes reuniones con Fernando Hierro.
La que será primera Liga de filiales estará compuesta por los 42 equipos que forman la Liga BBVA y la Liga Adelante. Los dirigentes de la LFP han querido buscar un espacio para que los jugadores continúen su formación una vez que han teminado su etapa juvenil y no encuentran acomodo en los primeros equipos de sus respectivos clubes. El CSD también está al tanto del nacimiento de la competición.
Los 42 equipos se dividirán en tres grupos de 14 por proximidad geográfica. El torneo se disputará en tres fases. La primera se jugará a una sola vuelta y los cinco mejores de cada grupo y el mejor sexto se clasificarán para la Superliga, que se celebraría a doble vuelta, determinando el campeón.
Los otros grupos los formarían los peor clasificados. Los dos mejores de cada grupo tendrían como premio poder participar en la Copa, junto a los ocho primeros de la Superliga. La Copa se jugaría en sede única y a eliminatoria directa.
La idea es que puedan participar jugadores a partir de los 16 años y menores de 21, con un cupo de cinco con un máximo de 23 años. Sólo podrá haber cinco jugadores en la plantilla. Jugadores lesionados de larga duración de los primeros equipos también podrían participar para completar la recuperación.
Formación arbitral
La competición también servirá para que los árbitros desarrollen su formación, mientras que la LFP garantiza la divulgación de la misma a través de un canal de televisión, que servirá de principal fuente de ingresos para que la Liga tenga un coste cero.
Lo cierto es que, con el paso de los años, el peso de los equipos filiales en la competición ha ido desapareciendo hasta ser casi testimonial en estos momentos. Sólo el Sevilla mantiene un equipo dependiente en la LFP.
En Segunda B hay 16 equipos filiales, de los que tan sólo Murcia B, Villarreal B y Betis B se encuentran en posición de playoffs de ascenso. Por contra, hay cuatro en descenso: Sporting, Racing, Valladolid y Las Palmas. Depor y Atlético están en promoción de descenso.
El modelo español será diferente al de otros paises. En Francia los equipos dependientes juegan en cuarta categoría, sin ascensos; Inglaterra tiene una Liga auxiliar en la que se disputan 18 partidos para dar minutos a los que no juegan; Italia tiene la Liga primavera sub 19 y en Alemania los 12 equipos dependientes militan en Tercera llamada Oberliga y que mezcla formación y rendimiento.
http://www.marca.com/edicion/marca/futbol/1a_division/otras/es/desarrollo/1195040.html
La reunión que mantuvieron el pasado 10 de diciembre Ángel María Villar y José Luis Astiazarán en la sede de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas sirvió para sentar las bases de la Liga de filiales, que se iniciará en el mes de septiembre de 2009. Los presidentes de la RFEF y la LFP sellaron un acuerdo que servirá para culminar el proyecto iniciado por Roberto Olabe y que ha terminado Ricardo Resta, tras diferentes reuniones con Fernando Hierro.
La que será primera Liga de filiales estará compuesta por los 42 equipos que forman la Liga BBVA y la Liga Adelante. Los dirigentes de la LFP han querido buscar un espacio para que los jugadores continúen su formación una vez que han teminado su etapa juvenil y no encuentran acomodo en los primeros equipos de sus respectivos clubes. El CSD también está al tanto del nacimiento de la competición.
Los 42 equipos se dividirán en tres grupos de 14 por proximidad geográfica. El torneo se disputará en tres fases. La primera se jugará a una sola vuelta y los cinco mejores de cada grupo y el mejor sexto se clasificarán para la Superliga, que se celebraría a doble vuelta, determinando el campeón.
Los otros grupos los formarían los peor clasificados. Los dos mejores de cada grupo tendrían como premio poder participar en la Copa, junto a los ocho primeros de la Superliga. La Copa se jugaría en sede única y a eliminatoria directa.
La idea es que puedan participar jugadores a partir de los 16 años y menores de 21, con un cupo de cinco con un máximo de 23 años. Sólo podrá haber cinco jugadores en la plantilla. Jugadores lesionados de larga duración de los primeros equipos también podrían participar para completar la recuperación.
Formación arbitral
La competición también servirá para que los árbitros desarrollen su formación, mientras que la LFP garantiza la divulgación de la misma a través de un canal de televisión, que servirá de principal fuente de ingresos para que la Liga tenga un coste cero.
Lo cierto es que, con el paso de los años, el peso de los equipos filiales en la competición ha ido desapareciendo hasta ser casi testimonial en estos momentos. Sólo el Sevilla mantiene un equipo dependiente en la LFP.
En Segunda B hay 16 equipos filiales, de los que tan sólo Murcia B, Villarreal B y Betis B se encuentran en posición de playoffs de ascenso. Por contra, hay cuatro en descenso: Sporting, Racing, Valladolid y Las Palmas. Depor y Atlético están en promoción de descenso.
El modelo español será diferente al de otros paises. En Francia los equipos dependientes juegan en cuarta categoría, sin ascensos; Inglaterra tiene una Liga auxiliar en la que se disputan 18 partidos para dar minutos a los que no juegan; Italia tiene la Liga primavera sub 19 y en Alemania los 12 equipos dependientes militan en Tercera llamada Oberliga y que mezcla formación y rendimiento.
http://www.marca.com/edicion/marca/futbol/1a_division/otras/es/desarrollo/1195040.html