El gol 1.000, a tiro25/04/2011
4 de septiembre de 1994, primer partido oficial del Málaga Club de Fútbol bajo su nueva denominación como entidad. El cuadro malaguista empata en Adra (1-1) en su estreno en el Grupo IX de Tercera División. Minuto 64, el centrocampista Juanma anota el primer tanto de la historia del flamante ‘CF’. 17 años después, un número redondo llama a la puerta con fuerza en plena recta final de la temporada 2010/11. Tras los goles de Baptista y Seba logrados en el triunfo de ayer ante el Racing, la cifra se sitúa en 998 y la pregunta no puede ser otra… ¿Quién marcará el gol 1.000 del Málaga C. F.?
El Málaga se pone a 100 en menos de un año
En apenas poco más de nueve meses, el Málaga llegó a la cifra de 100 goles tras mostrar una superioridad aplastante en Tercera División en la campaña 94/95, con Antonio Benítez al frente de un equipo imbatible que logró goleadas tan antológicas y recordadas como el 9-0 al Atlético Estación o el mítico 14-0 al Garrucha. La tripleta formada por el ‘pichichi’ Kiko Aranda (27 goles), un jovencísimo Basti (23) y el asturiano Toño (21, 5 de ellos en la liguilla de ascenso a Segunda B) fue la ejecutora principal de un arsenal ofensivo que se plasmó en el centenar de goles en el último compromiso de la liga regular, un 21 de mayo de 1995, conseguido en el minuto 54 del choque a domicilio que ganó el Málaga al Real Melilla. Su autor, el referido Toño, un talentoso atacante con definición de cirujano. El ascenso a Segunda División B vino acompañado por una buena ración de goles y espectáculo.
El escurridizo Manolo selló el 200
Como es lógico, el paso a una categoría superior hizo bajar el espectacular promedio de goles del nuevo Málaga Club de Fútbol. Pasaron cerca de dos campañas hasta llegar al tanto número 200. Destacar en ese período el buen tino de Manolo Sousa, un ‘9’ a la antigua usanza que firmó 13 dianas en la 95/96; los goles de falta directa del gallego Manu; los habilidosos de Almagro; los de llegada desde atrás en segunda línea de Manolo Herrero; los de siempre de ‘Van Basti’ y, también, los de un sevillano que vino de romper redes en el Córdoba con medias cercanas a los 30 goles por campaña: Manolo López Gómez, que un 30 de marzo de 1997 anotó el cuarto tanto malaguista (91’) en la 31ª jornada del Grupo IV de Segunda División B, en el triunfo fácil por 4-0 en La Rosaleda frente al canario Gáldar. La travesía en el desierto durante tres largos años en la tercera categoría del fútbol nacional marcó el paso del 100 al 200.
El 300 tuvo la firma de un clásico: Basti
El nombre de Sebastián Fernández Reyes siempre irá asociado al gol y al Málaga. Aquel chaval de 16 años al que Juan Gómez ‘Juanito’ le dio el empujón para que debutara con el primer plantel blanquiazul, se fue haciendo grande marcando goles de todos los colores y sabores. De pillo, de ‘9’ nato, de vaselina, por fuerza, de chut seco, de cabeza… Símbolo del progresivo ascenso del Club desde los campos de tierra de Tercera hasta el regreso a la élite del balompié nacional, ‘Van Basti’ se convirtió en icono de la parroquia de Martiricos por su carisma especial. Y por sus múltiples goles. Otro mito del malaguismo partícipe de los tantos más importantes en el intervalo entre el 200 y el 300 fue Pablo Adrián Guede. Los siete tantos del hispano-argentino en la liguilla de ascenso a Segunda División en la temporada 97/98, tres de ellos en el épico triunfo ante el Tarrasa por 4-1, fueron absolutamente claves en el devenir de la historia futura del Málaga. Y ya en la división de plata, un 18 de octubre de 1998, el segundo de los dos tantos de Basti (40’) en Leganés en la victoria por 0-2 en la 8ª jornada liguera, asociaron para siempre el gol 300 al delantero paleño.
Los 400 llegaron con el poderío de De los Santos
La etapa de Joaquín Peiró en el banquillo del Málaga estuvo marcada por el buen juego del equipo, con un marcado carácter ofensivo, el ascenso brillante a Primera y la consolidación en la máxima categoría y posterior participación histórica en competiciones europeas. Consecuencia, muchas victorias y goles por doquier. 50 en Liga en apenas dos años marcó Catanha, 26 en Segunda (98/99) y 24 en Primera (99/00), finalizador efectivo como pocos que exprimió al máximo sus cualidades al servicio del equipo. Los pases de Sandro fueron catapulta de bastantes tantos en aquella gloriosa época. Especialmente significativos los anotados por Edgar, Agostinho y el gran capitán Francis Bravo en el triunfo del Málaga ante el Albacete, en La Rosaleda por 3-2, que valieron todo un ascenso a Primera en la temporada 98/99. Ya en la élite, una campaña después, el pivote defensivo charrúa Gonzalo De los Santos marcó el gol 400 en el minuto 73 de un Málaga-Numancia (3-1) jugado en Martiricos correspondiente a la jornada 25 de Liga. No marcó muchos el ‘Uru’, pero el reseñado seguro que nunca lo olvidará. Los más famosos de este periplo, los de Agostinho y Valcarce en el Camp Nou en el increíble triunfo ante el Barça por 1-2.
El ‘chino’ Zárate dio lustre al 500
Llegar al medio millar de goles le costó al Málaga C. F. algo más de siete años. Tras la etapa de Catanha como referente goleador absoluto, una dupla inolvidable haría levantar de la silla al aficionado malaguista en multitud de ocasiones. La ‘Doble D’ formada por Dely Valdés y Darío Silva proporcionó muchísimos y preciosos goles al Málaga de Peiró, que con descaro y fútbol a raudales bordeaba puestos UEFA en su vuelta a la Primera División del fútbol español. Rápidos, como el anotado en siete segundos al Valladolid por el indomable Darío. Y espectaculares, como la plástica chilena a Cañizares en aquel ‘hat-trick’ mágico de ‘Panagol’ al Valencia. La conexión entre el panameño y el uruguayo sembraba de pánico a las defensas contrarias, y los dígitos unidos de ambos daban un número cercano a los 30 goles al final de cada temporada. Edgar o ‘Kiki’Musampa también contribuyeron de manera importante para llegar al gol 500, que firmó un jugador de gran calidad: Ariel Zárate. El mediapunta de origen argentino lo marcó en el 45’ de un Málaga-Osasuna (2-1) disputado en el Estadio La Rosaleda, en la 13ª jornada liguera de Primera División en la temporada 2001/02.
Leko puso acento croata al 600
Los goles más importantes de la historia del Málaga Club de Fútbol, y los más internacionales, llegaron en el intervalo 500-600. En la 2002/03 el Club jugó y ganó la Copa Intertoto, competición europea que daba acceso directo a la Copa de la UEFA. Míkel Roteta, que levantó el primer trofeo europeo de la entidad malaguista, marcó en la vuelta de una de las tres finales de la Intertoto, ante el Villarreal, un poco ortodoxo pero recordado tanto que aseguró un título. Los de la UEFA siguen instalados en la memoria del malaguismo. El ‘doblete’ de Dely Valdés en Leeds y, sobre todo, el gol del fuengiroleño Manu Sánchez en Atenas, que daba el pase a cuartos de final, son símbolos del mejor Málaga de siempre. El fútbol, cíclico, obligaba a la entidad blanquiazul a reinventarse permanentemente. En eso fue un maestro Joaquín Peiró, que acabó su ciclo brillante -al igual que muchos jugadores emblema del Club- dando paso a la breve pero feliz etapa de Juande Ramos en el banquillo. En un partido de mal recuerdo en el inicio del periplo del técnico manchego, el croata Iván Leko fue el protagonista del gol 600 del Málaga. El mediapunta zurdo hizo el 4-2 en el 89’ en la derrota en Santander, en la 7ª jornada de Primera en la 2003/04, frente al Real Racing Club.
‘Pichichi’ Salva Ballesta marcó el 700
Dos temporadas completas después del gol 600, llegó el 700. Salva Ballesta vino a Málaga procedente del Valencia con una hoja de servicios impecable respecto a goles anotados. Había ganado el ‘Pichichi’ en Primera División con el Racing (27 goles) y en Segunda con el Atlético de Madrid (20 goles), y su prestigio, fuerte personalidad y acierto de cara a puerta hacían presagiar que no serían pocos los goles que metería para el Málaga. Así fue. 22 en el total del ejercicio 2003/04, 19 en Liga y 3 de ellos al Barcelona en aquella tarde-noche lluviosa e inolvidable del 5-1 en La Rosaleda al equipo de Frank Rijkaard. Los más bellos en cuanto a factura, sin duda, se marcaron en un partido concreto de la 04/05, donde el brasileño Fernando Baiano marcó la diferencia con nueve ‘gritos’ en la segunda vuelta del campeonato (dos de ellos en el antológico 1-6 en Pamplona de la escuadra de Tapia). Fue el ‘día de los golazos’. Un 4-1 en casa ante el Numancia, en el que el equipo entrenado por Manzano se sacó de la chistera tres obras de arte: un pepinazo colosal de fuera del área de Miguel Ángel, una definición sublime de Wanchope tras llevarse el balón con un sombrerito, y una jugada pletórica llena de regates imposibles con chut casi sin ángulo de José Juan Luque. Ya en el inicio de la fatídica 05/06, en otro encuentro para el recuerdo, Salva firmó el primero (7’) de los cinco goles que el Málaga endosó al Betis en Martiricos en la 8ª jornada liguera de Primera División.
El menos vistoso de todos, el 800, en propia puerta
La media cercana a los 50 goles por temporada hacía prever otro gol histórico redondo en el inicio de la 2007/08. El 800, en este caso. Atrás quedaron un descenso traumático a Segunda y una tortuosa campaña en la 06/07 donde se flirteó con la Segunda B peligrosamente, hasta que Antonio Hidalgo, centrocampista llegador que tenía el don de marcar en las citas importantes, dio la tranquilidad con su tanto en el dramático partido en casa contra el Cádiz que acabó con 1-1 y la salvación matemática de la categoría en la penúltima jornada del campeonato. Salva Ballesta seguía engordando sus registros goleadores poniéndose a la altura de otros grandes realizadores malaguistas, caso de Basti, Catanha, Dely o Darío. Y el Málaga se rehacía de dos años malos con un proyecto austero liderado por Fernando Sanz en el palco y Muñiz en el banquillo y en los despachos. En los inicios de la campaña del último ascenso a Primera, en un Poli Ejido-Málaga correspondiente a la 6ª jornada de Segunda División (07/08), el 1-2 a favor de los blanquiazules en el 59’ lo anotó sin quererlo el central contrario Tena. Curioso y accidental protagonista del gol 800.
El 900, de penalti, con la clase de Luque
Nombres como los de Antonio Hidalgo, Nabil Baha, Duda o Alberto Luque, entre otros, van asociados a la historia goleadora reciente del Málaga. En el caso del ‘8’ catalán, con letras de oro, ya que anotó los dos tantos ante el Tenerife que brindaron el último ascenso a Primera División. El retorno a la élite fue magnífico, con un equipo que deslumbró de la mano de Tapia en la 08/09 con su fútbol veloz y poderoso a la contra que generó ocasiones -y penaltis, que siempre transformó Apoño- con Baha como mejor artillero en punta de lanza. Inolvidable aquel 0-4 en Huelva ante el Recreativo. En la segunda vuelta de aquella Liga, irrumpió con fuerza un futbolista de talla internacional que siendo muy joven jugó en calidad de cedido en el Club. Alberto Luque, el ‘torero de Tarrasa’, fue el anotador del gol 900 desde el punto de penalti en el 87’. Fue en la 35ª jornada, en el Estadio La Rosaleda, de un Málaga-Racing que acabó 1-0.
Falta poner nombre y apellidos al goleador 1.000
Autor de innumerables asistencias en jugada y a balón parado en su largo periplo en el Club, el luso Duda fue el mejor goleador del equipo en la pasada 2009/10 con ocho dianas. La más significativa, la que dio una permanencia milagrosa en el último partido liguero ante el Real Madrid. Este año, en su debut en la Liga BBVA, Salomón Rondón se ha destacado como ‘pichichi’ indiscutible malaguista por su tenacidad y esfuerzo, secundado por el punta uruguayo Sebastián Fernández, los destellos de ‘crack’ de Baptista y el olfato del filial Juanmi. La cuenta atrás ya ha comenzado, el gol 1.000 pide paso con celeridad y su autor entrará por derecho propio en la historia del Málaga Club de Fútbol… ¿Quién será?
NOTA: Se han computado todos los goles marcados en partidos oficiales, incluyendo las competiciones de Liga (en todas sus categorías), Liguillas de ascenso (3ª y 2ª B), Copa del Rey, Copa Intertoto y Copa de la UEFA. Los tantos marcados durante los 90 minutos de partido y en prórrogas de eliminatorias han sido incluidos en la estadística, quedando excluídos de la misma los anotados en tandas de penaltis.
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Málaga Club de Fútbol
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